Por fin las cosas se empiezan a hilar, la espera y el enfado han merecido la pena. Como no podría ser de otro modo y por estas fechas, Brooklyn Nine-Nine llegaba este lunes con un capítulo navideño en el que retomaba viejas historias. Y en especial aquella que hacía tantos capítulos estaba esperando. Click y ¡¡SPOILERS!! de uno de los capítulos que más ha merecido la pena.
No es la primera vez que esta serie me hace un bazinga y como ya voy por el tercero prometo ser más prudente, aunque con capítulos como los tres últimos dudo que pueda conseguirlo. En cualquier caso, me lo merecía en parte pero dejando mis imprudencias a un lado voy con el capítulo, que tiene tela.


Ya era hora de que empezasen a hilar historias del pasado con el presente, era más que necesario saber la historia de los padres de Boyle y Gina. En cuanto al “Bandido Pontiac” no sé si era muy necesario pero desde luego que visto lo visto está más que bien su aparición. Hemos tenido delante de nuestras narices un capítulo impecable o casi impecable (depende como se mire). Los polis han hecho cosas de polis y las historias que tenían que evolucionar dentro de la serie lo han hecho. Espero que sigan esta línea porque desde luego deja con ganas de seguir viendo y ver cómo progresan las cosas dentro de la a veces no tan monótona serie. Por fin, algo nuevo bajo el sol.