Quantcast
Channel: El Blog de las Series Americanas
Viewing all 1377 articles
Browse latest View live

La agente Scully volverá a The X Files, pero... ¿no será pelirroja?

$
0
0

Estos días están siendo como un sueño para los fans de The X Files. Hasta que no ha comenzado el rodaje de la nueva temporada en Vancouver, y he visto con mis propios y desconfiados ojos a David Duchovny, Gillian Anderson y Joel McHale de Communityen acción (¡ya tenemos vídeos del rodaje y todo!), no me he acabado de creer que fueran a volver. Que ya son muchos años de decepciones, seguro que me entendéis los fans que los hayáis sufrido conmigo.

Pero sí. Mulder y Scully are coming back, no hay duda, y vamos a disfrutar de una nueva temporada de seis episodios que traerá de regreso también a personajes tan míticos como nuestro entrañable calvo, Skinner, y el Fumador - lo cual ya de por sí es un LOL considerable, queda por ver qué improvisan para traerle de vuelta.

Todo marcha sobre ruedas. O al menos casi todo. Porque lo cierto es que veo a muchos fans muy ilusionados porque Gillian Anderson se haya vuelto a teñir de pelirroja... y yo me pregunto... ¿me habré vuelto daltónico? ¿Dónde le veis el pelirrojo? ¡Si está igual que antes!


Gillian no es pelirroja natural, pero sin duda al pensar en Dana Scully todos visualizamos a una mujer bajita, tremendamente sexy, con una habilidad casi sobrenatural para correr con tacones y un característico pelo rojo que tuvo su apogeo entre las temporadas cuarta y quinta. No obstante, todo parece indicar que, en esta nueva ocasión, volveremos a ver a Scully con el pelo rubio-rojizo (por decir algo) como el que tuvo en la no demasiado memorable segunda película.

No me malinterpretéis: amo a esta mujer. Sería feliz incluso si volviera calva. Simplemente me pregunto por qué hizo en su Twitter todo el paripé de "teñirse" si realmente se ha quedado igual que antes. ¿Será que la actriz acabó cansada del pelo rojo fuerte? ¿Se verá más rojo con efectos especiales, guiño, guiño, codazo, codazo? Esta mujer sería impresionante incluso peliverde, cierto es, aunque tengo que decir que, personalmente, para mí la guinda del pastel sería que volviese pelirroja. ¿Habéis pensado también en el tema?

Estas declaraciones de David Duchovny, por cierto, dan a entender que The X Files podría durar más de una temporada. Muramos de amor.



Isidro López (@Drolope)


Eye Candy: Final de temporada... y de serie

$
0
0

El final de temporada de Eye Candy ha llegado a su fin, y no solo de temporada. La serie no ha sido renovada por MTV. Podemos decir que esperaba mucho más de la serie y puede que esté de acuerdo con MTV a la hora de prescindir de ella.

Hablaremos de la evolución de los personajes más importantes, el desenlace de la trama principal y lo bueno y malo de la serie.

Nuestra hacker de Brooklyn, que a lo largo de la temporada ha estado buscando a su asesino en serie cibernético, nos ha dejado un sabor agridulce, ya que era un personaje que le veía futuro. Lindy (la adorable Lola) empezó esta serie buscando a su hermana que fue raptada delante de ella, pasó de la libertad condicional a trabajar para la NYPD y quedando con los supuestos sospechosos para intentar atraparlos.

El policía con menos sangre de Nueva York estaba en esta serie. El personaje de Tommy no ha dado mucho de sí y lo más relevante de él fue enamorarse de la exnovia de su amigo. Tommy intentaba ser el poli guapo de la serie pero se quedó en el poli con sangre de horchata.

Sophia fue la chica dulce e indecisa. Su personajeaunque fuese principal poco interés tuvo en la trama, exceptuando un par de episodios. Esta joven alegre que con solo verla sonreír, te sacaba una pequeña sonrisa.

El intrigante Connor es ese tipo de chicos que no sabes si está posando para resultar más atractivo o te está poniendo una cara de pocos amigos. No me gustaba nada el personaje de Connor, al inicio de la temporada, pero conforme iban pasando los capítulos, se puede decir que este chico acabó cayéndome bien.

Y por último pero no menos importante, George (el magnífico-increíble-fabuloso-encantador George). Este personaje me encantó desde el inicio, porque es de esos personajes que con su presencia te hace sentir bien. Le dio el punto cómico a la serie y no me cansé de reír y de disfrutar viéndolo.




¡EH, TÚ! ¡SPOILER!

Como ya sabéis la serie trata del acoso cibernético que sufre nuestra protagonista y que a lo largo de esta intenta atraparlo con y sin la ayuda de la policía de Nueva York.

Después de tener a numerosos sospechosos entre las manos, nuestra pequeña hacker no se creía que el verdadero asesino era el que más cerca había estado.

Aquí tengo que darle la razón a Tommy que desde un principio sospechó de él. Y si, amigos, el asesino cibernético más buscado de Nueva York es nada más y nada menos que Jake Bolin, si, aquel chico simpático que parecía que no le hacía daño ni a una mosca. Creo que nadie se lo esperaba, yo mucho menos, y en este aspecto la serie se merece una enhorabuena por hacerme creer que las apariencias engañan.



¡EH, TÚ! ¡NO SPOILER!

Haciendo un último recuento de las cosas que pudieron levantar esta serie y las cosas que la hundieron definitivamente:

Uno de los aspectos positivos de la serie fue ver como la realidad se apoderaba de ella, nunca había gozado tanto con la sangre (puede que sea un perturbado “amasangre”) como con esta.

Otro aspecto positivo de la serie que si no llega a ser por él, no la hubiese visto es Harvey Guillen o George. Haga lo que haga este hombre siempre me gusta. Es un personaje divertido que incluso dentro de una serie policiaca, te hace reír y bien.

La historia es otro punto positivo porque trata sobre un tema actual y todo lo que está pasando hoy en día en internet pero (siempre hay un ‘pero’) no han sabido manejarla bien, primero querían hacerla lineal y de repente todo cambia y se vuelve en una historia para cada capítulo y esto me trastocó, sinceramente.


Al haber sido cancelada, tuvieron que cerrar la serie con el descubrimiento del asesino pero dejaron en el aire el gran dilema, la hermana.


¿Qué pasó con la hermana? ¿Qué crees que habría sucedido? Si crees tener la respuesta deja un comentario.


Esto ha sido todo amigos, hasta aquí la entrada de hoy, comenten, compartan y vean series.

Os quiero seriéfilos.


Samuel Alonso (@SamAlonsoRguez)

How I met your mother: de la comedia al drama en nueve temporadas

$
0
0

Siempre me había llamado la atención How I met your mother. Recuerdo con mucho cariño las tardes al llegar del instituto viendo capítulos en Fox mientras merendaba (qué tiempos aquéllos). Por eso, como un mes antes de que su emisión en Estados Unidos terminara el año pasado, decidí que era el momento perfecto para empezar a visionarla de principio a fin, porque eso de ver los capítulos salteados no podía ser, y arrastré conmigo a mi hermano en una aventura que nos ha llevado más de un año y de la cual os quiero contar mis impresiones. Spoilers de la serie a continuación, no sigas leyendo si no has acabado de verla. 

How I met your mother es una sitcom, luego se supone que es una serie para sentarte, relajarte, reírte y no pensar, aunque, en mi opinión, de sitcom tiene poco. A pesar de que cada uno de sus capítulos está compuesto por alocadas historias que te sacan carcajadas a cada momento, y que tiene todos los elementos necesarios para ser una sitcom, lo cierto es que es mucho más: tiene un trasfondo, una trama que continúa entre capítulos y entre temporadas, que no se pierde a lo largo de los años y que acaba sin dejar ningún misterio por resolver, ningún cabo suelto (ni una apuesta impagada, oye), y eso es algo que me parece indispensable en cualquier serie. Y yo creo que ese trasfondo, esas enseñanzas que va dejando caer temporada tras temporada, son las que hacen a la serie una serie más profunda y que fueron motivo de que me conquistaran de un modo en que ninguna sitcom ha conseguido conquistarme. Luego está el hecho de querer saber quién narices era la madre de los hijos de Ted Mosby. A lo largo de las nueve temporadas, de los 208 capítulos, queda de manifiesto que la serie no es solo un montón de chistes bien hilados, sino que va de madurar, de hacerse mayor y de darse cuenta de que, aunque duela, tienes que dejar atrás las locuras para centrarte en tu vida de adulto. Va del amor, del fuerza de la amistad, y de que a pesar de que pasen los años, las personas que de verdad merecen la pena estarán ahí en los momentos importantes, y ellos mismos lo experimentan. Va de una comedia que se transforma en drama poco a poco, porque ya os digo yo que no había llorado hasta los últimos capítulos y no solo porque vaya a echarlos de menos. 


Pero no es solo esa trama y esas ganas de conocer a "La madre" lo que te empuja a seguir viendo la serie, sino también esos personajes a los que siempre vas a tenerles un cariño aunque no quieras, que se convierten en tus amigos poco a poco y sin saber por qué. No sé si sería capaz de elegir a un favorito, es muy difícil, porque todos tienen algo que odias de ellos, pero también algo que los hace especiales. Ted, con sus sueños de encontrar a su mujer ideal y a pesar de sus fantasías, no podemos negar que es una gran persona, y yo me alegro mucho de que al final consiguiera lo que llevaba toda la vida buscando. Con Barney tengo una relación interna de amor odio, porque me encanta, me ha hecho reír como el que más, pero a la vez pienso que no soportaría tener un amigo así, aunque no le puedo negar que ha tenido sus momentos tiernos y que probablemente han sido de los que más me han gustado de la serie (véase la declaración a Robin entre otros). Quizás si tuviera que elegir con quién me siento más identificada es con Robin (posiblemente mi personaje favorito si tuviera que decantarme por uno, no sé, no me hagáis elegir), porque me gusta su fortaleza y a la vez su capacidad de ser sensible en los momentos precisos, además de su pasado en Canadá, que son una de las subtramas más hilarantes de la serie. Por último, Lily y Marshall, porque sí, van en un pack indivisible, como los yogures, son una de las parejas más bonitas que he tenido el placer de ver en una serie de televisión, de principio a fin, a pesar de sus altos y bajos, luchan por estar juntos y ser felices. “That’s love, bitch!”. No es que me quiera dejar a “La madre” pero, sinceramente, dieron tan pocas posibilidades de conocerla que no llegué a tomarle demasiado cariño a la pobre Tracy. 


Son muchas las personas que dicen que las primeras temporadas fueron grandiosas y no lo niego en absoluto, aunque estoy menos de acuerdo con los que dicen que la serie empezó a caer a partir de su sexta temporada, porque algunos de mis capítulos preferidos son precisamente de ese año. Episodios como el 6x13 “Bad News” en el que aparecían una sucesión de números a través de las escenas, o el 6x15 “Oh, Honey” en el que la mismísima Katy Perry tomó parte de la historia, ya se han hecho un huequecito en mi lista de capítulos que no me importaría ver hasta la saciedad. Con estos también tengo que destacar todos los episodios de “Acción de tortas”, a cada cual más épico, aquél en el que convirtieron el MacLaren’s en “Puzzles” o aquél en el que acabaron todos vestidos de traje haciendo un musical en plena calle (y seguro que me dejo infinidad de ellos). En lo que sí coincido con muchos es que la última temporada fue un tanto excesiva, aunque aún así, admiro la capacidad de los guionistas para mantener una trama de 24 capítulos que ocurriera prácticamente por completo dentro de un espacio y tiempo tan limitados, aunque muchos no quedaran satisfechos con el final de la serie. Y, por supuesto, no puedo irme de aquí sin hablar sobre ese polémico final que a tantos fans decepcionó. Yo me posiciono en el grupo de los que prefirieron el final original al final alternativo, no me peguéis si no opináis como yo. Considero que la serie había sido lo suficientemente realista como para hacer un final realista. Es triste, sí, lo acepto. Ocho temporadas esperando a conocer a "La madre" para que después de unos pocos capítulos desaparezca de nuestras vidas y de la vida de Ted de la manera más trágica posible; capítulos y capítulos de romance y una temporada entera a espera de la boda de Robin y Barney para que tras tres años el amor se acabe y terminen divorciándose. Son cosas que pasan todos los días en la vida de las personas en el mundo real y creo que estuvo bien introducir esa realidad en la serie, aunque eso convirtiera el final más en un drama que en una comedia. Todos tuvieron su final justo: Lily y Marshall con su familia perfecta, Barney con su pequeña Ellie (para mí una de las escenas más bonitas de la serie es el momento en el que Barney conoce a su hija) y Ted y Robin, bueno, yo espero que juntos a pesar de que todo acaba un poco a la imaginación de cada uno. ¿Por qué Ted y Robin? Pues veréis: a mí la relación de Barney y Robin me parecía bonita, tuvo muchos detalles con ella y no puedo negar que su declaración fue preciosa, pero Ted y Robin fueron una pareja que me encantó desde el primer momento y que me siguió gustando en los muchos años de amistad que tuvieron posteriormente. Sinceramente, por mucho que Barney pudiera querer a Robin y viceversa (porque no dudo que se quisieran y, además, su química era impresionante), creo que no estaba hecho para el matrimonio. Con Ted viudo, lo más correcto que pudieron hacer fue que buscara a Robin para rehacer su vida. Además, la viudedad de Ted también permitió darle un sentido a la explicación a sus hijos de cómo conoció a su madre, porque uno no se pone a contar la historia de toda su vida así porque sí. Sinceramente, que Ted y Tracy, Lily y Marshall y Barney con su niña se hubieran quedado felices mientras Robin se quedara sola con una jauría de perros me hubiera parecido injusto para ella y creo que era muy difícil, dadas las circunstancias, hacer un final con el que todo el mundo se quedara satisfecho. 


En este año visionando esta serie, me he comido todos los spoilers habidos y por haber y he llegado hasta el final sabiendo cómo acababa la historia, pero lo cierto es que no me ha importado porque creo que lo verdaderamente importante de esta historia no era el final, sino cada una de las locuras que sus personajes vivieron, y yo ya os digo que para mí es una serie LEGENDARIA.

¿Es para vosotros una serie legendaria? ¿Os quedasteis satisfechos con el final? ¿Hubiérais preferido que hubiera sido todo un sueño? Nunca es tarde para hablar de todos estos temas, y podéis hacerlo ahí abajo en los comentarios.



Doralicia (@Doralais)

Crítica del 5x10 "Mother's Mercy" de Game Of Thrones: Orgullo y Vergüenza

$
0
0


Tras toda una temporada de idas y venidas. De escenas llenas de ira, de orgullo y deshonor. De dolor. De escenas épicas y de acción. Tras una temporada que aunque no se ha marcado mucho por tener escenas muy movidas, nos ha venido trayendo mucho trasfondo de cada personaje. Una temporada que se ha permitido el lujo de acercarnos a cada personaje como nunca antes lo habían hecho y, en pos de la marca de la casa, sorprendernos con los finales más absolutos que puedes llegar a encontrarte dentro del mundo de Game Of Thrones.




Empezando con las pequeñas Stark. Esa casa que creíamos ya perdida casi del todo. Sin embargo esta casa muestra que tienen verdaderos huesos duros de roer. Las niñas de la familia, que en un principio parecen ser las más débiles juegan todas las cartas que tienen para librarse de los terribles destinos que tienen bien. No siempre con un resultado predecible, pero desde luego al arriesgar tanto pueden llegar a ganar mucho si se lo proponen. 

La joven Arya Stark, por ejemplo. Un personaje que ha abandonado ya por completo a la dulce niña que partía hace cuatro temporadas feliz de Invernalia con su familia y su lobo huargo Nymeria. Que ha madurado quizá demasiado rápido. Que incluso ella misma ha querido precipitarse a su propia madurez. Que ha querido dar varios pasos por delante sin considerar siquiera de verdad la consecuencia de los actos que estaba cometiendo. Así nos lo hace ver con el asesinato del hombre con el que sintió el primer rencor de los millones que tiene acumulados: el hombre que le quitó la vida a Syrio Forel. En una escena demasiado sangrienta y demasiado cruel, le destroza los ojos, le agujerea el pecho y tras recordarle quién es ella y por qué está ahí le degüella lentamente mientras en su cara no expresa ningún sentimiento. Un sordo orgullo que resuena en su postura. De sentirse victoriosa. De sentir que todo su entrenamiento ha tenido resultado.
Sin embargo, ese resultado no viene solo sino que también tiene sus consecuencias. Su querido amigo Jaqen H'ghar decide entregar su vida al precio de la vida que se ha llevado por venganza la pequeña Stark. La ciega Arya que no ha visto más allá de sus narices. Que no ha visto que mediante tanta venganza y demás, se ha perdido a sí misma. Ha perdido su visión y su horizonte. Y tanto es así que al final literalmente le llega la ceguera. ¿Qué consecuencias va a tener esta ceguera? ¿Cómo hará cambiar la postura de Arya? ¿Llegará a cambiar? ¿Es esa ceguera tan absoluta como pensamos? 

La ya no tan joven Sansa Stark ha tenido un desenlace un poco más agraciado que el de su hermana menor. Acostumbrados al rol pasivo de este personaje, es bastante raro que veamos cómo puede llegar a tomar decisiones por sí misma. De echarle cara y narices al miedo. De darse cuenta que tiene mucho por luchar todavía. Y es que con la reveladora noticia de la posibilidad que sus hermanos estén vivos, Sansa ha adquirido un incentivo de dimensiones muy grandes. Su familia sigue viva. Pocos, pero esos ya son más que ninguno. Y no está dispuesta a perderlos de nuevo. A sentir el dolor enorme de perder a alguien más de su familia. Por eso ella misma toma la iniciativa de ir con la vela para avisar a Brienne de Tarth. En qué momento más inoportuno, puesto que es justo cuando llega cuando se desarrolla la batalla de los Bolton contra Stannis Baratheon. Y al final recibe la ayuda de la última persona de quien nos esperábamos algún acto de propia voluntad. De un Hediondo que ha recordado al olvidado Theon Greyjoy y la relación que tenía éste con los Stark. Veremos cómo se las llegan a desenvolver estos desgraciados personajes.

Y enlazando con la trama de Sansa, a Stannis llegamos. En este capítulo hemos visto cómo la quema de su hija Shireen Baratheon ha originado un efecto dominó catastrófico. Que ha conllevado a su fin definitivo. Primero con su mujer Selyse Florent que no se ha perdonado haber matado a su hija y, rota de dolor se ha suicidado. Luego con mucho ejército desertor. Y finalmente con la derrota en batalla por parte de los Bolton. Y cuando aparece Brienne para quitarle su vida además por venganza al asesinato de Renly Baratheon, cortan justo la parte en la que ésta debería clavarle la espada. ¿La habrá clavado de verdad? ¿Seguirá Stannis vivo? Después de ver lo visto, queda bastante claro que Stannis tiene mucho que aprender sobre en qué confiar en cuanto a deber y honor y qué consejos desoír. ¿Podría Brienne enseñarle algo al respecto?

Huyendo del campamento de Stannis, Melisandre de Asshai ha ido al Muro del Norte. En busca de cobijo. Con una cara que expresaba grandísima confusión. Que expresaba un ciego arrepentimiento. Que le hace replantear todos los actos que ha hecho con Stannis. ¿En qué momento ella malinterpretó alguna llama? ¿Por qué R'hllor no le ha mostrado la luz? 
Y en el Muro es donde hemos tenido la escena final más increíble de todas. Después de todo lo que Jon Snow hace por los demás, parece ser que nunca será suficiente para los que tienen fijación en las tradiciones. Y ni tan siquiera Samwell Tarly puede estar ahí, ya que ha decidido convertirse en Contramaestre tras ver el triste final del Maestre Aemon.
Así, el niño que era el sirviente del Lord Comandante, Olly, tras todo lo que Jon ha hecho por él es el primero en lanzar la piedra de la traición. Una traición en forma de puñaladas traperas. Por todos sus hombres y camaradas. Una traición que le ha dejado tendido en la nieve desangrándose y al borde de la muerte. Después de haber pasado por todo lo pasado y sobrevivido a las situaciones más extremas, ¿morirá Jon así tan fácilmente? Personalmente, creo que si Melisandre está por ahí alguna misión va a poder hacer con este hombre.

Y ahora centrémonos en la que yo creo que ha sido una de las escenas con más fuerza de esta temporada. Con un carácter impresionante. Una escena llena de violencia, de deshonor. De vergüenza. De orgullo. De desnudez de cuerpo y alma. De humillación excesiva. De un personaje que todavía tiene mucho pero mucho que contar a la trama de esta serie. 
Y sí, hablo de la escena de Cersei Lannister. Un personaje destrozado de arriba abajo y que por encima de su orgullo, por encima de todo su honor, ha tenido que reconocer su pecado delante del High Sparrow. Pero no sólo delante de él. Se ha tenido que exhibir delante del pueblo. Un pueblo con grandísimo odio y rencor contra esta reina. Una reina entre mierdas, insultos, desprecios y comida podrida. Una reina humillada. Una reina entre la vergüenza de sentirse odiada por todo el mundo exhibida delante de todos. Una leona que además ha perdido la melena de león que tenía. Una leona que ha querido ser toda su vida un león y que a lo único a lo que le lleva es a sentirse cada vez más despreciada y pisoteada. Una leona que llega con el rabo entre las piernas delante del palacio. Que no puede más que echarse a llorar rota de dolor y de humillación y vergüenza. Vergüenza. Vergüenza. Vergüenza. Y campanadas para dar paso a la vergüenza. Sin embargo, ahora que está en la capital, esa fuerza se convertirá en furia. Alta furia. Furia que hará que todos los que la han humillado se callen. Furia que se hará mayor una vez que se descubra lo que ha pasado en Dorne con la pobre e inocente Myrcella Baratheon y que se hará mayor cuando llegue Jaime Lannister. Probablemente se forme entre ellos la mayor fuerza contra el reino. Expectante a más no poder estoy de ver cómo evolucionarán los mellizos Lannister después de esta temporada.

En general, ésta ha sido para mí una temporada impresionante a más no poder. Una temporada que nos muestra unos personajes algo más recogidos, pero que no por ello no tengan nada que decir. Y ya veremos cómo se desarrollan. No he mencionado a Daenerys pero porque quizá ha tenido más protagonismo indirecto Tyrion Lannister: ¿cómo reinará en Meereen con la de conflictos que hay ahí actualmente? 
¿Qué será de Sansa, de Arya? ¿Qué ha sido de Bran Stark, de Las Islas del Hierro todo este tiempo?¿Habrá un gran conflicto entre Dorne y Roca Casterly? ¿Qué harán los nuevos dothrakis con Danerys Targaryen? Tendremos que esperar un año para ello. Espero que para entonces pueda seguir criticando con gusto la temporada. Muchas gracias a todos los que me habéis siguiendo durante esta quinta y espero que me comentéis vuestros dispares pareceres.




Juan (@MrRadda)

¿Por qué Phoebe Buffay?

$
0
0


Últimamente me he estado fijando en una cosa: Phoebe Buffay es el personaje preferido de la mayoría de las personas que ven o han visto Friends. Incluso el mío. Y no es raro, en realidad. Tiene muchísimas cualidades que le convierten en un personaje fácil de querer, éstas son las que más me gustan:

1) Su locura:


Tenemos que admitirlo, nos gustan los personajes extraños. Cuanto más rarito, más nos interesa. Desde genios hipocondriacos como Sheldon Cooper, hasta una “inocente” profesora de primaria como lo es Lily Aldrin. Lo diferente siempre es mejor. Y Phoebe es especialista en el arte de la extravagancia:


2) Sus memorables canciones:


La capacidad de Phoebe para cantar es mucho menor a la de componer letras que nos hagan reír a carcajadas. Pero siempre está dispuesta a cantarlas con una sonrisa. Y a repetirlas una y otra vez (Aunque el público no lo pida). Mi favorita, sin duda, que hasta la llevo pegada en la carpeta para animarme el día, es ésta:


3) Sus principios hippies:


Si hay algo que Phoebe tiene son principios. Qué sí, qué trabaja en una cadena de masajes a pesar de estar totalmente en contra. Pero no se la puede juzgar por ese hecho aislado. Phoebe es una buena persona que tiene valores morales y, siempre que puede, aprovecha la ocasión para ayudar al resto. Prohíbe a sus amigos ir de caza, defiende los derechos de los animales, tuvo a los trillizos de su hermano... 


4) Su infantilidad:


Phoebe tiene la personalidad de una adorable niña pequeña. Quizá es por el hecho de que no tuvo una infancia muy feliz (su madre se suicidó y tuvo que vivir en la calle). Pero no ha perdido su inocencia. Y esa es una de las cosas que más me gustan de ella. Siempre nos hace reír y soltar algún que otro “oh, Phoebe, qué mona”.


5) La ira de Phoebe:


Sí, me refiero a esos enfados imprevisibles que tiene. Puede estar muy contenta y, de repente, llena de ira unos segundos más tarde. Cuando Phoebe se pone a gritar pone en su sitio a todo el mundo. Y no sería la primera vez que utiliza la fuerza o el carácter para que sus amigos hagan exactamente lo que ella quiera.


6) Siempre dice lo primero que se le pasa por la cabeza:


Ésta, sin duda, es mi preferida: Phoebe siempre dice lo que piensa. Puede ser la cosa más estúpida o más alocada del universo, que ella lo suelta sin preocuparse de qué pensará el resto. Esa confianza y esa capacidad para hacernos reír en cualquier situación, ese es el verdadero encanto de Phoebe Buffay.


¿Y vosotros? ¿Cuál es vuestro personaje preferido de Friends? ¿Qué es lo que más os gusta de ella?



Victoria (@MissGoingAway)

¿Echas de menos The Walking Dead? Dale una oportunidad a los zombis mamarrachos de Z Nation

$
0
0

Cuando The Walking Dead está en emisión, los 'haters' salen a presión hasta de debajo de las setas. Todo es mucho bla bla blá y quejarse de lo mala que es, pero yo sé, tú sabes, e incluso el vecino porrero del cuarto sabe, que cuando se estrene la sexta temporada todos volveremos a picar -como siempre-, y seremos los primeros en ver los nuevos episodios. Y no es para menos: como ya comenté en nuestra web amiga, la quinta temporada ha sido la mejor de todas. Todos y todas hemos tenido que quitarnos el sombrero ante las interpretaciones de Andrew Lincoln y Melissa McBride.

Pero, ¿qué hacer mientras esperamos? El género Z está en alza, es cierto, e incluso en España se están poniendo las pilas -ya tenemos, de hecho, trailer para Extinction, nueva superproducción zombi con Matthew Fox y Clara Lago-. No obstante, el cine es una cosa, y la televisión otra muy diferente. Salvando la honrosa excepción de la simpáticaiZombie, que es como una genial Verónica Mars muerta, las opciones hoy en día son escasas. Y sí, podríamos hablar también de los momentazos de los Caminantes Blancos en Game of Thrones, pero son muy puntuales. Por tanto, ¿qué opciones tenemos los aficionados a este putrefacto género?

Quizá la respuesta esté en Z Nation... o no.


Lo mamarracho vuelve a triunfar



Ya os lo conté en este mismo blog: Las series mamarrachas pueden apetecer más, en ocasiones, que la mismísima Mad Men. No todo en la vida pueden ni deben ser series con profundos mensajes psicológicos que nos hagan reflexionar sobre la esencia de la vida. Pero, ¿hasta qué punto Z Nation no da auténtica vergüenza ajena? ¿Lo mamarracho en las series debe tener un tope, al menos por el bien de la salud de nuestras ya de por sí deterioradas neuronas?

Es cierto que me gusta ver series mamarrachas. Ostras que si lo es. Tras tantos años, como ya os conté, sigo enganchado a Pretty Little Liars, lo cual ya dice bastante de mí. Pero incluso dentro de estos entrañables esperpentos televisivos podemos distinguir entre "calidad" y falta de ella. Porque sí, puedo seguir fascinado con las chorradas de -A, pero todos los que conozcáis la serie sabréis que está llena de diálogos divertidísimos, e ingeniosos a ratos. Tiene el trasfondo suficiente (pero no el demasiado) como para que sienta que no estoy perdiendo el tiempo viéndola.


Por otra parte, para mí una mamarrachada sin gracia, para que me entendáis, sería The Last Man On Earth, una serie que la crítica yanqui ha puesto por las nubes y que, sin embargo, a mí me pareció una comedia con un trasfondo idiota y chistes malos que parecían escritos por críos de cinco años. Cuando la historia se centró en "quiero tirarme a la rubia a toda costa", perdió toda la gracia que tenía. Y es una pena, porque ni por la espectacular January Jones (irónicamente, de Mad Men), pude seguirla.

¿Es, pues, Z Nation una mamarrachada con la suficiente "chicha" como para que verla no sea una completa pérdida de nuestro valioso tiempo?

Me voy a mojar y voy a responder que sí. No tiene nada que ver con The Walking Dead, y sería un error establecer comparaciones, pero lo cierto es que, si la vemos con la mentalidad de que es algo diferente, podemos pasarlo muy bien. La serie es transgresora, brutal, y se esfuerza cada episodio por imaginar a los zombis de las maneras más bizarras posibles. Zombis-tornados (¡ríete tú del trailer de Sharknado 3!), zombis en tubos de gasolina, perros-zombis, bebés-zombis que se comen gente... un desmadre, nenes. Olvidaros del héroe salvando al bebé. En Z Nation, el bebé se come al héroe. Literalmente.


Otro punto fuerte, además, son los personajes. No esperemos a nadie que sea el colmo de profundo, no, pero ni falta que hace. Son carismáticos, divertidos, se les puede coger aprecio a incluso empatizar con ellos. Z Nation es una serie bizarra que va a lo que va, pero tampoco es que no se tome en serio a sí misma. Si la veis, es más que probable que todos los amantes del género Z paséis un grandísimo rato viendo una serie divertida, pero consistente y con una trama que, sorprendentemente, engancha. Hay diálogos y momentos, os lo aseguro, que son oro.

¿Qué me decís vosotros, seriéfilos? ¿Alguno por la sala que ya haya visto Z Nation y pueda opinar?


PD: ¡El prota de Z Nation también es un macizo considerable! [Fuente de la imagen]

PD2: Si os gustan las películas zombis, en nuestra web amiga os recomiendo mis 7 filmes Z favoritos.


Isidro López (@Drolope)

Outlander Or How To Steal Our Ovaries: Blame The Gorgeous Ginger Boy

$
0
0
Recientemente he terminado la primera temporada de Outlander, un maravilloso viaje por la Escocia del s. XVIII que atrapa como pocas veces me ha pasado, haciendo que cada capítulo de una hora se pase en un suspiro. En esta aventura seguimos a Claire, una mujer luchadora e independiente de 1945 que sufre un “accidente”: vuelve al pasado. Pero, aunque la serie tenga personajes femeninos muy fuertes y potentes para la época en la que se sitúa la trama, tengo que destacar a un personaje en particular, el pelirrojo del momento. ATENCIÓN: lo que viene a continuación es puro fangirleo. Pueden darse casos de tsunamis domésticos, bajadas de tensión y subidas repentinas de temperatura en las casas. Lea esta entrada bajo su propia responsabilidad.

¡Adiós bragas!
Sí, fanboys y fangirls de este macizorro guapo que quita el hipo, hablo de Jamie Fraser, el hombre que me ha ido quitando los ovarios poco a poco durante 16 episodios. ¡Menuda crueldad! Sabía que el pelirrojo se las traía – mi compañero Isidro me había hecho ser muy consciente de ello – pero lo que no me imaginaba era que iba a ser para tanto. No sólo es que el actor que lo interpreta, Sam Heughan, sea un hombre atractivo y con unos ojos azules arrebatadores, es que el personaje es la lotería hecha escocés con kilt – o no – incluido. Mi amado, querido y deseado Jamie es un hombre que engaña por su aspecto fortachón y rudo, ese que muestra ante sus camaradas y amigos, ya que realmente es un trozo de pan que me comería sin dudarlo – ¡¿pero por qué estás tan bueno, señor mío?! ¡A la cárcel deberías ir porque no tendría que ser legal! –. El pelirrojo es un ser noble, mono hasta decir basta, atento, un caballero de esos que quitan el sentido de muchas maneras, romántico casi empedernido y enamorado de Claire hasta las trancas, tanto que daría lo que sea por ella. Levantad la mano todas aquellas que quisierais tener a un hombre así a vuestro lado. Yo acabo de levantar las dos. ¿Que estás en peligro? Pues el chaval va jugándose la vida y te rescata. ¿Que le dices que vienes del futuro como la señorita de Calgon? Pues, tranquila, que aunque todo le suene a chino él va a decidir creerte y te hará preguntas como qué significa “fucking” y tú podrás demostrárselo de forma práctica – aquí una no es tonta –. Ains, este señor es un regalo del cielo. ¡Viva la madre que lo parió! Además, tiene el superpoder de embarazarte con la mirada porque, uff, qué mirada, qué intensidad, qué actitud más de “lo eres todo para mí”, y también el de hacerte perder las bragas tontamente.

¡¿PERO POR QUÉ TE TAPAS?!
Aparte de que el personaje es lo más mono que me he echado a la cara en tiempo, es que el muchacho está de toma pan y moja, y hemos podido comprobarlo bastante bien. ¡Bendita sea la persona que le hizo ESE primer plano de ESE CULO! En ese momento, creo que todo el sector femenino y el homosexual hicieron que los casquetes polares se deshicieran un poco más, ¡subidón de temperatura al máximo! ¿Y qué me decís de las escenas de sexo casi salvaje y pasional que se marcan aquí el amigo y Claire? Me he quedado con ganas del cigarrillo de después, con eso os lo digo todo. ¡Qué calores, por favor, y menuda zorra con suerte que es ella! Mira, Claire, si quieres volver con tu marido a 1945 hazlo, pero yo me quedo consolando a Jamie. Entiendo que se llegue a plantear el volver a su tiempo pero, hija mía, ¿has visto a ESTE hombre? ¡¿Lo has visto bien?! Pues no dudes más, por favor, porque la respuesta está muy clara. Y si alguien tiene dudas que mire la escena del molino y ese desnudo casi integral que te quita todos los males que tengas. Agua de santo. Te dará calor, algún sofoco, posibles desmayos varios, ganas incontrolables de tirarte como una hiena a la pantalla del televisor/ordenador. Vamos, lo normal en estos casos de “tío sexy que se agarra el paquete porque si no se le ve TODO”.

Hinquémosle el diente
Quiero dejar una cosa bastante clara y que os puede sorprender pero me gusta Jamie Fraser, no Sam Heughan. He visto al actor en sesiones fotográficas y no siento esa conexión “carnal” o enchochamiento – es difícil de explicar, sinceramente – que siento cuando veo a Jamie. El actor es muy guapo pero me gusta más cuando está de mierda hasta las cejas, con el pelo revuelto, con aspecto de que no se ha duchado en días pero que me sigue quitando el hipo. No sé, creo que le da un aspecto más sexy, más atractivo me atrevería a decir. Llamadme rara pero me gusta más así, me dan más ganas de tirarme encima de él cual mono en celo.

Ay, que la espera para la segunda temporada se va a hacer eterna y no vamos a ver a Jamie durante un tiempo. ¡Qué sufrimiento que nos espera! Menos mal que tenemos más chulazos a los que darles amor porque si no lo pasaríamos realmente mal. El pelirrojo me ha ganado totalmente y eso que no lo esperaba para nada. ¡Ha sido una muy grata sorpresa! Os animo a que me contéis vuestra experiencia con Outlander y sobre todo con este dios escocés que la serie nos ha dado. Sois libres de poner comentarios fangirlsy hasta subidos de tono – os lo permito todo –.

Jamie, Jaime, que no me entere yo que lo que hay debajo del kilt pasa hambre #PrayForOurOvaries


Irene (@MissSkarsgard) 

Scream de MTV te deja el culo torcido de lo mala que es

$
0
0

Mal, Ghostface. Así, no. 

Cuando MTV anunció que iba a ponerse manos a la obra con una nueva serie basada en la mítica saga de Scream, fuimos muchos los que sentimos emociones encontradas. Para los fans de la saga -yo, el primero de ellos- la nueva Scream era la excusa perfecta para revivir una historia fascinante. Muy manida, sí, pero que con el giro de tuerca adecuado, con inteligencia y con creatividad, aún podía dar muchísimo juego y aportar frescura al género. Scream 4, sin ir más lejos, no logró superar (para mi gusto) a la primera y endiosada película, pero sí fue de lo más correcta e, incluso, superior a la segunda y tercera entregas.

¿Podía, por esta regla de tres, ser la nueva Scream otra, al menos, correcta vuelta de tuerca a la historia de nuestro sangriento colega Ghostface?


El día que pensé que algo bueno podía salir de este esperpento debía estar emporrado de más, desde luego, porque estaba obviando lo primero que se debe tener en cuenta para juzgar cualquier producto: la cadena que lo emite, el público al que va dirigido. Y la nueva Scream de la MTV se ha presentado con un piloto tan, tan malo que todavía no sé si quiero seguirla. ¿Mejorará? ¿Valdrá como mamarrachada, o ni eso?

¡Cuidado! A partir de aquí destripo (guiño, guiño) parte del piloto:

La MTV nos traslada con su "magia" a Lakewood (la creatividad se ve hasta en el mismo nombre del pueblo), un lugar sobre el que se cierne la maldición de un feo vengativo del pasado que asesinó a unos cuantos chavales que se rieron de lo orco que era y le reventaron a palos. Varios asesinatos después, el pobre colega murió abatido en el lago del pueblo. 

20 años después, una rubia sexy se baña en el jacuzzi de una super-casa que es más inteligente que la propia rubia. Es un poco bicho, y además es una mujer joven segura de sí misma a la que le gusta el sexo - por tanto debe morir. En medio de la tensión del momento, la cabeza de su novio sale volando al agua del jacuzzi en el que se está bañando, y ya del resto no me entero porque estoy secándome los lagrimones de la risa y no puedo ver nada. 


Esta escena de partida, que tan brutalmente sodomiza la mítica apertura de Scream con Drew Barrymore, es lo que mejor ejemplifica todo el episodio. El piloto de la Scream de MTV es como esa cabeza: desvaído, poco logrado, volando a la deriva hasta estrellarse sin dignidad en un jacuzzi metafórico en el que la rubia son nuestras esperanzas de que esta serie hubiera podido ser decente. Y nuestras esperanzas, al igual que la rubia, no han durado ni cinco minutos (¡aunque punto para ellos por no matar innecesariamente al perro!)

No voy a ser del todo injusto: Scream lo intenta. Hace referencias molonas a Hannibal, Bates Motel, American Horror Story y The Walking Dead, e incluso se atreve a bromear con lo arriesgado que es hacer una serie larga y continuada sobre una trama que, se supone, debe matar a todos los chicos en 90 minutos. Ese giro final de "será aún más jugoso que mueran cuando te encariñes con ellos" tiene su atractivo, pero sigue sin ser suficiente. El piloto de Scream ha sido muy básico, se le podría haber ocurrido a cualquiera. Debería haber sido más ingenioso, más divertido, y definitivamente debería haber sido mucho más inspirado.


¿Seguiré la serie? Sí, para qué engañaros. Tengo curiosidad por ver cuándo demostrarán su racismo al matar primero a la asiática. Además, puede ser interesante ver cómo el asesino trata de quitar esa máscara a la santurrona protagonista para demostrar que, en realidad, no es tan buenaza como aparenta. Esa trama puede tener potencial aunque, personalmente, hubiera preferido una protagonista algo más alejada de los estándares habituales. 

¿Y si, por una vez, la protagonista fuera la chica que disfruta sin tapujos del sexo? ¿Es que la audiencia solo puede empatizar con las Bellas de Crepúsculo y las Elenas de The Vampire Diaries? Necesitamos, señores y señoras, a más Clarkes de The 100 o, incluso, a más Jennas de Awkward, también de MTV. Chicas diferentes, chicas con personalidad que no aburran. Aunque le daremos el beneficio de la duda a... a como se llame.

¿Qué me decís vosotros? ¿Seguiréis con Scream?




Isidro López (@Drolope)


Crítica de la tercera temporada de My Mad Fat Diary: te echaremos de menos, Rae Earl

$
0
0


Si os digo la verdad, es particularmente difícil para mí escribir sobre este tema, me da una pena horrible que My Mad Fat Diary haya acabado. Supongo que terminar series que te gustan siempre cuesta. En realidad, por eso he decidido hacer este artículo, es mi forma de decir adiós. Con él me despido de Chop, Izzy, Archie, Chloe, Finn, Danny, Tix y, por supuesto, Rae. Esto es en su honor, en el de todos ellos.  

*Spoilers a partir de aquí*

My Mad Fat Diary ha sido una serie bastante corta, pero eso no significa que no le hayamos cogido muchísimo cariño. Es que, hemos pasado tanto con sus personajes, les hemos acompañado en sus mejores momentos, y también en los peores. 




Sobre todo, les hemos visto evolucionar, crecer, madurar. ¿O acaso no os acordáis de cuando creíamos que Chloe era una zorra? Y al final todos tuvimos que arrepentirnos de haberla odiado tanto en los primeros capítulos. O cuando pensábamos que Archie era heterosexual y que había algo entre Rae y él. Y ahora, ahí la tenemos, ayudándole a él a ligar con el dependiente de la tienda de discos. O cuando Karim sólo era el lío de su madre, estoy segura de que nadie se esperaba que acabaría siendo como su padre. O cuando atribuíamos el título de "hombre perfecto" a Finn, para entonces era imposible que engañara a Rae (y menos con Katie Springer alias "El diablo").



Han cambiado tantas cosas… Pero sobre todo, Rae ha cambiado. Al principio de la serie, se comparaba con un pajarito herido, siempre esperaba a que vinieran a salvarla. Cada vez que se presentaba una dificultad, buscaba desesperadamente a alguien que pudiera consolarla. Pero por fin, descubre que tiene que solucionar sus problemas por sí misma. Y eso la hace más independiente y más adulta.

¿Qué la temporada podría haber tenido más capítulos? Pues sí. ¿Qué la canción final podría haber sido Don´t look back in anger de Oasis? Pues también. Sin embargo, estos son solo detalles. Lo que importa es que se ha mantenido la esencia hasta el final, no me ha decepcionado, ni siquiera un poco. Era difícil conseguir estar a la altura de las otras dos temporadas, y definitivamente lo han conseguido. El drama, la comedia, los grandes momentos... nada sobra. Una temporada intensa de principio a final.

Es más, en mi opinión, la serie no podría haber acabado mejor. Lo sé, es triste que cada uno haga su vida por separado, podrían haberse quedado en Stan Ford para siempre todos juntitos. Sin embargo, lo que han obtenido durante estos años de amistad les ha servido para mejorar como personas, a todos ellos, y ahora es el momento de que continúen con su camino. Es inevitable.

Lo último es darles las gracias a estos alucinantes personajes, a los actores que les han dado vida y a todo aquel que haya contribuido a que MMFD haya sido posible. Porque hay pocas series así. Ya no hablo de la banda sonora (buenísima, por cierto), tampoco de ese estilo noventero que tanto me gusta, ni si quiera de sus ingeniosas bromas. Me refiero a las emociones que sentimos al verlo.ç

Estás nervioso, contento, enfadado, tienes ganas de reír a carcajadas, de llorar, de abrazar a alguien, de gritar a la pantalla… todo al mismo tiempo. Ése es el efecto que causa MMFD. 



Stan Ford Forever.


Victoria. 

Los nominados de postureo y los grandes olvidados de los Emmy 2015

$
0
0

Los Emmy y sus "nominaciones expertas" llegan un año más (aquí la lista completa), y un año más todos nos quejamos de sus elecciones. Que si falta mi actor favorito, que si nominan a tal o cual de forma automática, que si no tienen ni idea... pero no pasa nada, ya estamos nosotros para imponer nuestro criterio como si fuese el único válido y criticar sus decisiones. 140 caracteres se quedan cortos, así que me he dicho, ¿por qué no criticarles como es debido y dedicarles todo un post en el blog? Porque ahora mismo los Emmy son como Jon Snow, y nosotros una Ygritte (¡somos pelirrojos!) muy cabreada...


No puedo empezar un post así sin quejarme en primerísimo lugar de que Julianna Margulies y The Good Wife, como era de esperar, se hayan caído de la lista de nominados. Y sí, podríamos debatir que la sexta temporada ha sido menos luminosa que las anteriores, ¿pero alguien duda de que la calidad de The Good Wife sigue siendo inmensa? Acostumbrados a una épica quinta temporada, una (simplemente) buena sexta temporada nos ha sabido a poco, pero esa no es excusa para olvidar a la gran Margulies (por mucho que le tengamos tirria por lo que ha hecho a Archie Panjabi) y seguir poniendo a la sobreactuada -y sobrevalorada- Claire Danes por Homeland.

No obstante, parece que el lugar de Margulies ha sido dado a Tatiana Maslany por sus papeles en Orphan Black, lo cual es realmente una buena noticia: Los Emmy reconocen de esta forma a la ciencia-ficción, que tan olvidada tenían desde que brillaron hace años The X Files y Lost. Pero, y es un gran pero, parece que si no hay un vibrante movimiento fan que respalde a un actor o serie que no sea de postureo, los Emmy hacen oídos sordos. No hay más que ver la nominación automática a la irregular Better Call Saul en favor de Outlander, la serie revelación de Starz que ha obtenido una nominación "de consolación" en el apartado de Música por su banda sonora. ¡Como para no morirse de amor con canciones así


Pero si hablamos de postureo en su máxima expresión, el gran premio se lo lleva Emilia Clarke. Porque sí, es una actriz de lo más solvente, ¿pero recordáis una sola escena interpretativa suya que nos haya dejado la boca abierta en la quinta temporada? Yo, ni una. Pero ya se sabe cómo son los Emmy, que le hacen la pelota gratuitamente a Downton Abbey y Juego de Tronos, por mucho que la quinta temporada de la segunda haya sido, con diferencia, la peor, y su trama de Dorne (la primera en España) una mala sitcom. ¿Qué sentido tienen los Emmy si premian fama antes que calidad? Incluso Peter Dinklage parece que también esté metido solo para quedar bien, porque ya me diréis qué carajo ha hecho Tyrion de interés en la quinta temporada.

¿Y Vera Farmiga por su brillante trabajo en Bates Motel? ¿Algún día recordarán a Emmy Rossum por Shameless, que tiene implícito en su mismo nombre una rancia ironía del destino?¿Y de Eva Green mejor ni hablamos, no? Incluso el "boom" deJane the Virgin se ha pasado tan rápido como llegó. Pero ya se sabe, no son series "molonas" de postureo, así que nada que hacer en los Emmy...



Isidro López (@Drolope)

Sobre Scream: Ser o no ser racista, esa es la cuestión

$
0
0

Hace unos días os contaba mis primeras impresiones sobre la nueva Scream serializada de MTV: y lo cierto es que me quedé espantado de lo mala que me pareció. Pero, ironías del destino, aquí me encuentro ahora, enganchado y pasándomelo pipa con los juegos macabros de esta especie de -A sangriento que nos ha surgido en Lakewood dispuesto a atormentar a nuestra no tan inocente rubia protagonista.

De lo que me gustaría hablaros hoy, más que de la serie en sí, es de una "pequeña" polémica que ha surgido por algo que ocurre en el tercer episodio. He intentado plantear el titular de tal forma que no destripe nada, pero a partir de aquí habrá un spoiler importante. ¡Dejad de leer si no habéis visto los primeros tres episodios!


Tiene mucha gracia el asunto. En el post que os enlazo en el primer párrafo, en las líneas finales, decía en tono de broma que seguiría Scream porque quería saber cuándo demostrarían su racismo al asesinar a la chica asiática. ¡Y nos ha durado solo tres episodios la chiquilla, qué cosas!

Las reacciones de los fans, especialmente en Tumblr, no se han hecho de esperar. Muchos han criticado a MTV por hacer picadillo a la, literalmente, única protagonista que no era blanca, el único toque de "color" en el elenco. Que, por cierto, tampoco hay negros. ¿Saldrá Shonda Rhimes a criticar la serie por eso mismo, al igual que ya hizo en su momento con Bunheads?

En Estados Unidos el tema del racismo siempre está a flor de piel, y muchas "sensibilidades" son heridas con tremenda facilidad. Yo mismo bromeaba con que la asiática iba a durar poco tiempo, pero era eso: una broma. ¿De verdad alguien cree que se la han cargado por ser china? Ella ha muerto porque su personaje era el que tenía todas las papeletas. Chica buena, dulce, cuya pérdida destrozará al grupo, hará sentir mal a la protagonista, y además romperá el corazón al friki.


Enfoquemos el tema desde otra perspectiva. Los que se quejan de que no debería haber muerto por ser asiática, ¿están diciendo, entonces, que ella debía ser intocable? ¿Que, precisamente por ser china, no podía morir? Es decir, lo que algunos proclaman es que había que ser políticamente correctos y mantenerla viva en contra de las necesidades creativas de la historia, porque matar a una china en un pueblo de blancos queda feo. Ajám. ¿No sería lo realmente racista tratar a su personaje considerando su raza? ¿No es lo igualitario de verdad tratarla como a cualquier otro personaje del pueblo, es decir, una adolescente que está ahí para morder el polvo, como todos y todas? Su muerte ha llegado ahora porque el transcurso de la historia así lo requería, su raza es irrelevante.

Que haya tan pocos personajes no blancos como protagonistas sí que podría dar pie a un debate más problemático, porque la diversidad siempre es necesaria y bien recibida, pero las críticas concretas que han surgido por este tercer episodio no se sostienen. Los que critican son los primeros que están obsesionados y pendientes de la raza de los personajes. ¿Acaso hubo revuelo cuando una chica blanca y rubia murió en el segundo episodio? No lo creo.

Scream tiene pendiente incluir más diversidad en el elenco (algo que, vistas las críticas recibidas, no dudo que hará próximamente, al igual que Bunheads), pero el racismo es un tema muy serio y grave que no merece estos debates absurdos, exagerados y sacados de contexto.


Isidro López (@Drolope)


Crítica de la tercera temporada de Orphan Black

$
0
0
Cuando te dicen que Orphan Black es una serie sobre clones humanos puedes imaginarte cualquier cosa excepto lo que ocurre en realidad. Hace poco estaba pensando en lo extraña que me pareció cuando me la recomendaron y lo genial que me pareció la primera temporada. Genialidad que no ha hecho más que crecer conforme los capítulos han ido avanzando y que ha hecho que me quede con unas ganas increíblemente gigantes de que regresen en una cuarta temporada que ya está confirmada para el próximo año.


Tras esta maravillosa tercera temporada en la que he disfrutado y sufrido a partes iguales, tenía que seguir obligadamente con mi crítica anual (el año pasado os trajimos una crítica muy completita de parte de varios compañeros del blog) sobre las mejores clones de la historia (y el resto de personajes, claro, porque esta temporada ha tenido un poquito de todo). Si seguís conmigo un poco más, podemos comentar lo ocurrido en los diez capítulos que han formado la tercera temporada de Orphan Black, con sus correspondientes spoilers.

Si Tatiana Maslany nos ha malacostumbrado a una interpretación impecable (por la que, por fin, tras tres temporadas, ha recibido una nominación a los Emmy *aplausos entusiastas*), poca queja podemos ponerle tampoco a la increíble interpretación de Ari Millen quien ha dado vida a cada uno de los clones masculinos que el proyecto Castor ha traído a nuestras pantallas este año. La verdad es que algunas personas se esperaron ya la llegada de unos clones hombres, pero a mí eso me pilló por sorpresa cuando el telón de la segunda temporada bajó, y más por sorpresa aún me pilló saber que los personajes interpretados por Tatiana Maslany y por Ari Millen, proceden del mismo organismo original, es decir, son hermanos. La introducción de una tanda de nuevos personajes ha permitido que se ampliaran los puntos a tratar en cada capítulo y le ha dado una mayor flexibilidad y complejidad a la trama. ¡Los clones psicópatas van en aumento!

La trama central de la temporada se ha basado en la búsqueda del origen de los clones: quién es el original y dónde está, ya que éste podía ser la clave para la resolución de todos los problemas de salud de éstos y, además, nos ha llevado a descubrir que quieren utilizar los clones masculinos como arma biológica, propagando la infertilidad en las mujeres. Que el original de todos los clones fuera la madre de Siobhan fue algo que no esperaba de ningún modo. Esta señora es una quimera que contenía células tanto masculinas como femeninas en su interior y está prácticamente en busca y captura por las diferentes partes interesadas en el original. Como Bioquímica y después de haber estudiado todo esto durante cuatro años, me alegro de que series como ésta acerquen un poco más esta parte de la ciencia que pocas ficciones se atreven a tratar, y más que lo hagan con lógica y con verdades (exceptuando el hecho de los clones humanos, que los tenemos todavía muy lejos, afortunadamente). Con estas cartas sobre la mesa, lo realmente increíble es descubrir que en cierta forma Siobhan tiene un parentesco genético con Sarah. Así, el final de temporada puede habernos dejado más o menos locos con el regreso de los neolucionistas: los verdaderos enemigos a los que a partir de ahora tendrán que volver a enfrentarse y que tienen en sus manos a Rachel y su nuevo ojo biónico, la única capaz de descifrar el código secreto que el profesor Duncan escribió en su ejemplar de "La isla del Doctor Moreau". Esta ha sido la trama principal en la que han estado metidas todas las clones, pero por supuesto, cada una ha seguido con su vida y ha tenido sus proyectos, sufrimientos, y más de un susto.


Para empezar, Sarahha tenido que renunciar a su hija para alejarla del peligro que suponían toda esa panda de científicos locos. Cuando parecía que todo le estaba yendo un poquito bien con Cal y que parecía que las cosas podían estabilizarse, éste y la niña tuvieron que irse a Islandia, nada más y nada menos, a vivir prácticamente en un iglú, aislados del mundo. Menos mal, porque Sarah no ha vivido lo que se dice la mejor época de su vida en estos capítulos, huyendo de escopetas y llegando a ser secuestrada junto a su sestra, que le tenía un cúmulo de rencor por haberla cedido al ejército. A la pobre Sarah le llueven palos por cosas que no hace, aunque, afortunadamente, siempre acaba consiguiendo deshacerse de los problemas. Es la mejor. Uno de los episodios que más me han gustado, ha sido en el que Sarah escapó, con ayuda de Paul de su cautiverio. Ha sido uno de los capítulos más descorazonadores de la temporada (por no decir de la serie), y lo ha sido al cobrarse la vida de Paul, ése al que he odiado y querido en capítulos alternos, que ha sacrificado su vida por Sarah y destruido la base militar donde estaban cautivos. Todo esto también ha acercado a la memoria de Sarah el recuerdo de Beth, lo cual, hablando con sinceridad, casi me sacó lagrimillas de los ojos. Me pareció un modo de homenajear al personaje que tan poco tiempo duró en la serie pero que fue el origen de todas las investigaciones sobre los clones y, sin el cual, no tendríamos esta fabulosa serie. Además, otro punto que me ha gustado de la odisea de Sarah en esta temporada ha sido la estrecha relación que ha adquirido (recuperado, más bien) con Siobhan y Felix, que han ganado un mayor protagonismo, sobre todo en la segunda parte de la temporada, y que siempre le cubren y le cubrirán las espaldas, esté en las circunstancias en las que esté.


Otro punto que ha despertado mi interés a lo largo de la temporada ha sido la aventura en la que se han metido los fantásticos Alison y Donnie. Son geniales de por sí, pero si se embarcan en un proyecto político cuyos fondos se van a recaudar en la venta de jabones con repartición de drogas de estranjis, la cosa se pone todavía más divertida. He disfrutado muchísimo viendo cómo se enfrentaban a los camellos y cómo luchaban para conseguir lo que finalmente acaban consiguiendo: la victoria de Alison en las elecciones del colegio (bueno, no es un alto cargo, pero por algo se empieza, que Alison es mucha Alison y lo ha demostrado en repetidas ocasiones), con ayuda incluso de Cosima, que se tuvo que hacer pasar por ella durante unos minutos que se suman a los grandes momentazos interpretativos de esta serie (este año también hemos visto a Helena haciéndose pasar por Alison, o a Sarah haciéndose pasar por Rachel, o a Alison haciéndose pasar por Sarah). De esta trama también hay que destacar el momentazo (porque para mí fue un momentazo) en el que Alison, tan tranquilamente le presenta a Cosima a su madre diciéndole que son clones y su madre se queda tan ancha y pasa de ella. Olé, señora, olé.

 

Como decía, la relación de Sarah con su sestra durante esta temporada ha sido un poco tensa, pero lo cierto es que Helena y su compañero imaginario inseparable, Pupok (un escorpión parlante), han sido un aliciente más para que los capítulos cobraran un tono más cómico, a pesar de la tensión del ambiente debido al cautiverio de nuestra clon rubia. Helena ha estado un poco violenta esta temporada, pero hemos de perdonarle ciertas cosas que ha hecho, porque siempre ha sido para proteger a sus babies, y se ve que el instinto maternal de esta chica es muy fuerte. Cuando no está comiendo, se lo está pasando bomba con un niño, es adorable. De cualquier forma, con lo encantadora que es cuando quiere, le perdonamos todo, hasta que se haya cargado a todos los camellos casi en las narices de Donnie, una escena que debería ser chocante y se convirtió en una comedia que me dejó boquiabierta. Si es que no podemos más que querer a nuestra clon glotona y sanguinaria.



Por su parte, Cosima ha tenido que lidiar con más problemas que nunca. Además de su enfermedad y de intentar descifrar de cualquier modo el código genético (como si fuera poco), ha querido comenzar una nueva relación sentimental para olvidar a Delphine. Todo muy normal, sí, pero Delphine, al mando de DYAD tras el incidente de Rachel con el lápiz, no se lo ha puesto nada fácil. Seguro que quienes veis series conocéis novias celosas, pero a mí el comportamiento de Delphine en esta temporada me ha defraudado mucho. Estoy de acuerdo en que debía proteger el Instituto (aunque ciertos límites no se deben sobrepasar nunca), pero lo que ha hecho con Cosima y Shay a mí me parece casi imperdonable. De todos modos, el futuro de Cosima, tanto con Shay como con Delphine ha quedado en el aire al finalizar la temporada, ya que no sabemos qué misterios pueda esconder la aparentemente perfecta nueva novia de Cosima, y no sabemos si Delphine continuará con nosotros la próxima temporada, o si acabará su paso por la serie muriendo en un aparcamiento.

En general ha sido una temporada muy completa y que deja muchas nuevas incógnitas para el próximo año y creo que ha superado el nivel de la anterior, pero quizás no de la primera (no sé, no soy buena para estas cosas, no me hagáis elegir). Eso sí, la alianza que deberán formar a partir de ahora contra los neolucionistas puede ser muy, muy interesante y tengo ganas de ver cómo desarrollan todo ello. Lo que más me gusta de esta serie (además de ver a Tatiana Maslany bordando cada papel) es poder vivir la tensión de los personajes casi como si te encontraras en escena (ya desde la intro, que a mí me produce escalofríos en cada episodio de lo genial que es), y todo ello, además de por la credibilidad de las interpretaciones de sus actores, también se consigue gracias a una banda sonora muy acorde a cada escena y una serie de localizaciones que seguro que la mayoría de nosotros no pisaríamos ni borrachos.


Orphan Black sigue siendo una serie increíble y ansío ver qué les deparará a todos sus personajes la cuarta temporada. ¿A vosotros qué os ha parecido esta temporada? ¿Os ha gustado más que la anterior? ¿Menos? ¿Os ha encantado? ¿Era tan mala que queríais que acabara? ¡Contadnos! Seguro que me he olvidado miles de cosas que podrían comentarse, os doy carta blanca para que lo hagáis. Por el momento, sólo nos queda cruzar los dedos para que le den a Tatiana Maslany una docena de premios Emmy o del galardón que sea, hasta que se le caigan las estanterías por el peso.


¿Por qué The Good Wife no está nominada al Emmy?

$
0
0
Después de la perrería del año pasado, las nominaciones a los Emmy son más una gran decepción verano tras verano que una alegría. Que la quinta temporada de The Good Wife no tuviese su reconocimiento con una nominación a Mejor Drama me pareció lo peor que se pudo hacer, por lo que este año no me he llevado una sorpresa. En esta entrada os quiero expresar mi opinión sobre por qué la serie no tiene grandes nominaciones este año.

La sexta temporada ha sido cuanto menos irregular y es algo que he destacado a lo largo de las reviewsque he escrito sobre ella. A pesar de que su comienzo fue fuerte, impactante y planteándonos una trama interesante, sobre la mitad de la temporada vimos cómo estaba todo el pescado vendido: Alicia ganaría las elecciones, Cary no iría a la cárcel y el bufete iba a experimentar una gran revolución. Luego vimos que las tornas giraban un poco, Alicia no sería fiscal del Estado– gracias a Dios – pero se plantearía abrir su propio bufete, la salida de Kalinda iba a ser pacíficay la escena de estas dos juntas sería una total y absoluta tomadura de pelo para el espectador al no haber sido grabada con ellas dos en el mismo lugar sino haciendo uso del CGI de forma muy chapucera. Como suelo decir, la sombra de la quinta temporada es muy alargada y se ha notado de veras en esta sexta, tanto que se ha quedado a medio gas. Algunos fans dicen que ha sido una temporada llena de experimentos, viendo lo que funciona y lo que no, pero para mí ha sido una decepción y lo digo desde el más profundo pesar de mi corazón. The Good Wife me encanta, la vivo, pero hay cosas que no puedo dejar pasar. Sinceramente, no sé cuál ha sido la reacción de la crítica pero la de los fans ha sido muy dispar, situándose algunos en el bando de “me ha gustado” y otros en el de “WTF?!”. Es por eso que muchos no ponían en sus quinielas de los Emmy a esta serie entre sus favoritas para Mejor Drama porque el sabor de boca que ha dejado tiene un regusto amargo difícil de quitar.

Por otra parte está la no-nominación de Julianna Margulies. ¿Realmente es por la “maldición del ganador del año pasado”, que no suele ser nominado en la siguiente edición o es por otra cosa? ¿No podría ser que los encargados de escoger a los nominados hayan visto que el ego de la Margulies está un poco subidito y han querido darle una “colleja” en forma de olvido total? Las noticias sobre la mala relación entre esta y Archie Panjabi han inundado los diferentes portales webs, un secreto a voces del cual los actores y compañeros de estas dos no sueltan prenda, por lo que la Academia también se habrá hecho eco del asunto, obviamente. A lo mejor se sienten tan traicionados como el resto de los fans ante semejante actitud de quinceañera caprichosa que supuestamente tiene Julianna que ni siquiera se digna a grabar una última escena con Archie. La Margulies es la que lleva los pantalones en el set, por lo que parece ser, donde ya incluso negocia los contratos con los nuevos actores que se incorporan, como en el caso de Jeffrey Dean Morgan. Dicho mal y pronto, su coño moreno es el que tiene la voz cantante y cuidado del que diga una palabra más alta que la suya. Visto así, la pobre mujer parece una tirana y me resulta extraño que, si lo es, todo el mundo diga maravillas de ella. ¿Les tendrá tan acojonados? ¿Habrá habido más de alguna discusión en el set de rodaje o sólo ha sido un caso aislado con Panjabi? A este paso este formará parte de los grandes misterios de la humanidad.

Otro tema a tratar sería las nominaciones que sí ha obtenido, donde destaco la de ChristineBaranski, Alan Cumming y Michael J. Fox. Con la de Baranski no tengo ningún problema ya que creo que se lo merece aunque no se la ha visto casi nada esta temporada y muchos se han quedado con ganas de ver a Diane en pantalla. Con los que sí tengo un problema sería con los otros dos. Primero, ¿por qué nominan a Fox si se le ha visto dos veces y tampoco ha sido destacable de verdad? Y, segundo, ¿por qué nominan a Cumming si su personaje Eli Gold – siento decir esto porque le quiero mucho – tampoco ha tenido una temporada impresionante o destacable como Louis Canning?¿Ya votan automáticamente o qué? No es por ser fangirl, que también, pero creo que Matt Czuchry se lo merecía mucho más por la primera parte de la temporada, donde le hemos visto lucirse de verdad y, sinceramente, para una oportunidad que tiene el pobre chaval que puede explotar y brillar, encandilando así tanto a los críticos como a los fans, pidiendo incluso su nominación, me parece una de las mayores putadas que he visto en tiempo. No me extraña que algunos fans del actor casi le imploren que se vaya de la serie porque lo suyo no es que le puteen, es un nivel más allá. Y si no tenéis como prueba más reciente el trato a Cary durante la segunda parte de la última temporada, donde sólo aparecía de forma muy puntual y para responder teléfonos cual secretaria. Imperdonable.

Los Emmys son fuente de dichas y desdichas, algunos ni siquiera se los toman ya en serio vistas ciertas nominaciones que se repiten año tras año sin tener una base muy sólida para respaldarlas. En este caso, como habéis podido comprobar, apoyo que se castigue a The Good Wife de esta forma, a ver si los King toman nota de las cosas mal hechas para ponerles remedio en la siguiente temporada. Sigo teniendo fe en vosotros, Robert y Michelle, no me defraudéis.

¿Y vosotros qué pensáis sobre la ausencia de la niña bonita de la crítica en las nominaciones de este año? ¿Estáis de acuerdo o queréis prenderle fuego a los responsables de semejante barbaridad?


Irene (@MissSkarsgard) 

Recolección de machismos y "micro-machismos" hacia Outlander

$
0
0

En este blog nos encanta Outlander. De hecho, hace unos días nuestra compañera Irene nos trajo un post de lo más fangirl y simpático sobre Jamie Fraser, el galán pelirrojo de la serie revelación de Starz, una cadena que en su momento ya lo petó con la brutal (y homoerótica, ejem) Spartacus.

Pero no: hoy no vengo a hablar maravillas por enésima vez de Outlander (que luego me llamáis pesado, y eso no puede ser), a lo que en realidad vengo hoy es a quejarme de esa irritante capa de machismo silencioso que parece envolver esta serie por todas partes. En algunos momentos llegaba a plantearme si no estaría yo mismo exagerando, viendo "machismos" donde no los había, quizá malinterpretanto ciertos comentarios... pero NO. Son comentarios problemáticos que no habrían existido de ser Claire Beauchamp un hombre. Y son tan jodidamente molestos que no he podido resistirme a compartirlos con vosotros y vosotras.

He aquí algunos de mis favoritos:

1) Bromas sobre que Claire tiene la libido de una colegiala: Esto es para mear y no echar gota, así os lo digo. Por fin tenemos una serie que se centra en explorar el placer femenino con ella en primerísimo lugar, y sin embargo no faltan las"bromitas" de que Claire está más salida que el pico de una plancha. Que las hagan chavales puede pasar, pero cuando vi que un supuesto crítico reputado hacía una broma de este estilo en su análisis de la serie, mi culo quedó irremediablemente torcido para toda la eternidad.

Así voy a acabar yo de leer un solo chiste más de que Claire está salida


Tiene que gracia que personajes como Lucas Hood de Bansheesean auténticos machotes, que su sexualidad activa sea una característica que refuerza su hombría, y sin embargo que Claire disfrute (¿tanto?) del sexo es motivo de chistes. Pues no, lo siento, no me hacen ni puñetera gracia. Y mira que yo me río con cualquier chuminada, pero con esto nada...

2) Acusaciones de golfa a Claire por "olvidar" a su primer marido: Por suerte este argumento lo he oído en menos ocasiones, pero aún así y con todo también me he topado con iluminados de la vida soltando perlas del estilo de "vaya, qué pronto se le ha pasado la pena a la enfermera, qué rápido ha vuelto a revolcarse por ahí con otro macizo."

Porque claro, que una mujer se recomponga y sepa seguir adelante está tan feo. Lo decente habría sido que se sentase a tejer en una esquina sin abrir la boca y a renunciar al sexo de por vida, ¿no?


3)"Qué pereza verla, va a ser un culebrón":¿En serio? No vamos a negar que la serie cuenta una historia de amor, que tiene una gran sensibilidad argumental, pero Outlander es mucho más. Outlander es un viaje fascinante a la Escocia del siglo XVIII, un choque de culturas, una historia de superación personal y, sí, de amor.¿Qué tiene eso de malo?

Si Claire fuese un hombre y se enamorase de una pelirroja maciza de las Tierras Altas de Escocia, muchos tíos no habrían tardado ni dos segundos en ponerse a ver esta serie. Hay que tener un poco de amplitud de miras, muchos hombres deben aprender a empatizar mejor con las mujeres. Pero la explicación de esta realidad nos lleva a un problema aún mayor y que es de raíz: un pequeñísimo porcentaje de películas de nuestra cartelera está protagonizado por mujeres, ellos no están acostumbrados a que ellas tomen el control de la historia. El mero hecho de que una serie cuente una historia de amor desde el punto de vista de una mujer echa a muchos hombres para atrás, y esto es un prejuicio totalmente misógino. ¡Como si Outlander no fuese apta para machotes, oigan! Pero nada, chicos, para qué verla... no sea que vayáis a aprender algo.

4) "Con sus dos últimos episodios, Outlander por fin deja de ser un culebrón": Esto es el LOL máximo, el súmmum de lo absurdo. Con este ejemplo (caso muy concreto, era la opinión de una chica de Twitter) partimos de la base de que el sujeto ya ha visto Outlander. La ha visto considerándola un culebrón (?), lo cual ya es un error conceptual, porque...

Definición de'culebrón': Telenovela que consta de gran cantidad de episodios a lo largo de los cuales se establecen intensas relaciones sentimentales de carácter melodramático entre los diferentes personajes.

Outlander no es una telenovela, Outlander solo tiene 16 episodios, y en Outlander los sentimientos no están exagerados ni sobreactuados. Con la trama de Laoghaire podrían haberse acercado, quizá, a serlo, pero la venganza de la chica despechada era necesaria, era la excusa para que la historia avanzase, la chica en sí nunca fue importante.


Pero lo enormemente increíble es lo de después, es decir, que se piense que con el shock de los dos episodios finales (aún nos dura el trauma) de alguna manera sea cuando Outlander se convierte (?) en una serie de verdad. Es el mismo argumento de los que dicen que Juego de Tronos solo mola cuando hay batallitas o muertes. Es asombroso el enorme desprecio y la poca validez que se le da a Outlander solo porque te habla del corazón de una mujer. Incluso he leído críticas sobre la serie que, después de hablar bien de ella, se "disculpaban" de lo "pastelosa" que era Outlander en ocasiones. Como diciendo que era buena "a pesar" de eso. Y esto me lleva a plantearme que: 

A) Yo mismo soy un "pasteloso" de campeonato, y ni me había dado cuenta hasta ahora (que todo puede ser), o bien B) Muchos tienen simplemente poca sensibilidad, o quizá -y aquí se enreda la cosa-, prejuicios misóginos que les llevan a despreciar, burlarse o a no tomarse en serio una historia que no habría tenido esta problemática (no tengo una sola duda al respecto) de ser un valeroso Claire hombre el protagonista.

¿Qué opináis vosotros? ¿Habéis leído comentarios de este estilo? ¿Hay realmente machismo por parte de muchos al considerar Outlander?


Isidro López (@Drolope)

The Wire: You Gotta Keep The Devil Way Down In The Hole

$
0
0
The Wire ha sido una de mis series pendientes durante un par de años y, recientemente, he podido saldar esa deuda. Aunque me ha durado un suspiro, es una serie que me ha costado seguir ya que no es de las que enganche como otras lo hacen, por lo que eso añade una gran dificultad en recomendársela a otras personas. En esta entrada os hablaré un poco sobre ella y comentaré lo que me ha parecido sin spoilers.

The Wire nos sitúa en Baltimore, una de las ciudades más castigadas por el crimen de Estados Unidos, como veremos a lo largo de las cinco temporadas que la forman. Aunque en un principio sigamos a Jimmy McNulty (Domenic West, al que podéis ver actualmente en TheAffair), un policía de Homicidios de pura cepa con problemas con la autoridad, amigo del alcohol y de las mujeres que no son la suya, veremos cómo poco a poco Jimmy no es más importante que el resto de personajes que se nos van a ir presentando, los cuales forman entre todos una serie muy coral que nos invitará a preocuparnos por ellos, incluso cogerles cariño, o a odiarlos sin remedio. Jimmy, en el fondo, es un tío muy tocado y, sobre todo, muy perdido. En cierto sentido se le podría comparar con Don Draper, dos tipos que no saben ser felices ni teniéndolo todo. McNulty tenía un buen trabajo, su mujer y sus hijos, pero el primero le absorbía tanto – y lo sigue haciendo – que parece que hace imposible la compatibilidad entre este y su vida familiar. También se puede pensar que su verdadera familia son sus compañeros de trabajo, en especial Bunk (Wendell Pierce, al que habéis podido ver en The Michael J. Fox Show), asiduo compañero de copas que termina incluso peor que McNulty – vómitos incluidos al día siguiente en el trabajo –. Por otra parte, aunque no sólo se ve en el caso de Jimmy, este vive frustrado con su trabajo ya que, por pitos o por flautas, no puede trabajar como él realmente quiere, teniendo todos los recursos necesarios para llevar a cabo una buena investigación y coger al tipo malo de turno. Esta frustración se llega a transmitir al espectador, el cual está viendo al mismo tiempo cómo los peces gordos de la institución de policía sólo quieren falsificar las estadísticas, coger su dinero y seguir viviendo bien.

A estos dos hay que quererlos muy fuertemente
La trama de la primera temporada se centra en la creación de un nuevo departamento, el de Crímenes Mayores, el cual tiene a la cabeza a Cedric Daniels(Lance Reddick), un hombre con un pasado laboral un poco tormentoso que le puede dar una bofetada en un futuro. Formando el grupo tendremos a Freamon (Clarke Peters), un hombre que, cuando no hay curro, se dedica a construir muebles para casas de muñecas y venderlas a un buen precio – el hombre se podría retirar con esto –, pero cuando sí hay material al que hincarle el diente veréis a un hombre muy listo, avispado y al que es difícil no tenerle cierto cariño. Por otro lado tenemos a Kima (Sonja Sohn), una afroamericana lesbiana que vive en un mundo completamente de hombres y cuya palabra no vale menos que la de cualquiera que tenga un par de testículos en ese edificio. Gracias a su trabajo y actitud, se ha ganado el respeto de sus compañeros, lo cual es muy loable. Decir de Kima que me parece un personaje pionero ya que en 2002, cuando se estrenó la serie, no se escribían papeles como este, al igual que Omar Little, del que os hablaré un poco más adelante. El círculo lo terminan de completar Prez, el cual al principio será un enchufado por parte de su suegro pero que poco a poco encontrará su propio sitio dentro de la dinámica del grupo; Sydnor (Corey Parker Robinson), quien se toma muy en serio su trabajo y quiere hacer las cosas bien, y Craver (Seth Gilliam) y Herc (Domenick Lombardozzi), uno de los bromance de la serie; son uña y carne aunque tienen actitudes diferentes: mientras Craver es más serio, tanto que a veces se pasa al ejercer su autoridad, Herc es un completo gilipollas, y no hay otra forma de definirle. No sabéis las ganas que he tenido durante toda la serie de que le metiesen la paliza de su vida por imbécil perdido. Un tío chulo, bocazas, metepatas, una diana perfecta para una bala perdida. Como podéis estar imaginándolo, McNulty también formará parte de este grupo y establecerá relaciones muy interesantes, destacando personalmente la que tiene con Kima y esas conversaciones que tienen cuando están en algún tipo de misión o porque tienen que vigilar a algún sospechoso. Al principio el grupo tendrá más integrantes pero se irán cayendo con el paso de los episodios, por lo que sólo resalto a los principales. Personalmente, hay personajes que me han sorprendido gratamente y de los que no esperaba mucho de ellos como, por ejemplo, Prez, el cual me parecía un patán pero con el tiempo le cogí un gran cariño, al igual que a Freamon, el cual no sabía qué papel iba a jugar en la trama. Aunque Jimmy sea un antihéroe, sí que se ha ganado mi aprecio, sobre todo con el bromance que forma con Bunk – borracheras épicas que forman una de las esencias de la serie; grandísima pareja la que hacen estos dos –. Otros personajes que conoceréis y que son de mis favoritos serán Duke, de la cuarta temporada, el cual me rompe el corazón; Bubbles (Andre Royo), a quien no puedo querer más, y Omar Little, entre otros, afroamericano, gay y el tipo con más huevos que he visto en tiempo, formidablemente interpretado por Michael K. Williams, quien cada vez que sale en pantalla lo borda.

Para los que les encante ver caras conocidas, por aquí vais a ver unas cuantas como a Falcone de Gotham (John Doman), a Petyr “Littlefinger” Baelish de Game Of Thrones (Aidan Gillen), a Sugar de Banshee (Frankie Faison), Pornostacho de Orange Is The New Black (Pablo Schreiber), Andy Bellefleur de True Blood (Chris Bauer), Freddy de House Of Cards (Reg E. Cathey), el padre de Marty Kaan en House Of Lies (Glynn Turman), y a varios actores de The Good Wife como quien interpreta al pastor Isiah Easton (Gbenga Akinnagbe), a Dexter Roja (J.D. Williams), al juez Robert Parks (David Fonteno) o al jefe del grupito del NSA (Michael Kostroff) en la quinta temporada.

Este hombre se come la pantalla
Cada temporada tiene un tema en concreto que se irá desarrollando durante la misma. En la primerase nos presentará el negocio de la drogaen los bajos fondos de la ciudad por parte de Avon Barksdale y Stringer Bell como mano derecha, interpretado por un Idris Elba que, especialmente en la tercera temporada, se come la pantalla, y cuyo personaje es de los más interesantes. Conoceremos no sólo su funcionamiento sino también las relaciones entre las distintas partes ya que todo queda en familia, literalmente. En la segunda temporada se tratará el tema de los muelles y el trapicheo que se da en ellos con el robo de mercancía, relacionándolo al mismo tiempo con el mundo de la droga. En la tercera temporada ahondaremos en la relación que se da entre este mundo del polvo blanco con la política, donde los grandes jefes de las calles de Baltimore hacen generosas donaciones a señores de traje y corbata que dan mítines para sus enormes campañas. En la siguiente temporada, se tratará uno de los temas más duros, pero no por ello menos interesante, que es el sistema escolar y el futuro de estos niños que parece ya estar escrito incluso antes de que nacieran. Para muchos – incluyéndome a mí misma – esta es la mejor temporada de la serie por su dureza pero al mismo tiempo por la implicación que el espectador puede tener con estos muchachos. No pensé que me iba a preocupar tanto por ellos pero me sorprendí a mí misma cuando vi que sí lo hacía, que me emocionaba con sus historias y que me alegraba o entristecía por algunas de las decisiones que tienen que tomar en sus duras vidas. Por último, la quinta temporada gira en torno a los medios de comunicación, su tratamiento de la información, la inaptitud del departamento de policía y del ayuntamiento en sí, aparte de ver cómo la gente se aprovecha de un colectivo social que parece importar bien poco en la ciudad de Baltimore, los indigentes. Visto en conjunto, The Wire hace un gran análisis de la situación de la ciudad pasando por todos, o la mayoría, de los palos para darnos una visión panorámica del lugar, desde los policías de a pie, los que llevan las investigaciones, pasando por los peces gordos y terminando en alcaldes y senadores, al igual que en el otro bando con los camellos y los grandes jefes del cotarro. Como veis, se tratan los dos lados de la moneda al mismo tiempo, por lo que tendremos personajes queridos y odiados en ambas partes, haciendo mucho más rica la experiencia y teniendo hasta un posible conflicto moral al posicionarnos indistintamente en un lado u otro.

Yendo hacia un terreno más personal, como podéis ver y seguramente habéis leído o escuchado, The Wire es una serie maravillosa, un peso pesado dentro del mundo de las series, y muchos la tienen en un altar. En mi caso no es así. The Wire, desgraciadamente, no estaría entre mis series favoritas, es más, pensándolo fríamente, me costaría muchísimo recomendarla ya que depende de la persona con la que estuviese hablando. Es una serie, in my opinion, difícil de ver y complicado de meterse en la trama. Al principio me sentí muy perdida, demasiados nombres, los repiten pocas veces, te cuesta ubicarte, y eso me hizo sentir una especie de frustración porque me gusta situarme bien desde el principio, tener un esquema mental de lo que estoy viendo y lo que está pasando en cada momento, pero en este caso no era así, por lo que meterme en la trama fue un problema que me desesperaba. Con el paso del tiempo, y ya mejor ubicada, añadidle mi frustración por no conectar con la mayoría de personajes, a los cuales a muchos de ellos me daban ganas de pegarles un tiro por una razón u otra, sobre todos a los altos cargos, quienes se ganan el odio a pasos agigantados. Al no preocuparme del destino de la mayoría de personajes, conectando o interesándome realmente por sólo unos pocos, mi frustración iba en aumento y mis ánimos iban menguando, por lo que agradezco de veras las palabras de aliento que me daban algunos de mis seguidores en Twitter. Añadid también a la mezcla la frustración y rabia que me producía la serie al ver ciertas injusticias que se llevaban a cabo – otra vez esos malditos peces gordos –. Por lo tanto, a mi parecer, The Wire NO es una serie para todo el mundo, hay que tener mucho ánimo y fuerza de voluntad, y quiero que esto quede claro y que puede aplicarse a muchas series: no porque una serie esté en el olimpo seriéfilo tiene que verla todo el mundo; que cada uno vea lo que le apetezca y lo disfrute, que no vea nada por obligación o para considerarse más seriéfilo que otro porque eso es una tontería. Si os pica la curiosidad con esta serie, mirad el piloto, y si os gusta el rollo, bienvenidos seáis a Baltimore, amigos míos. Personalmente, la serie me ha dejado fría en ciertos aspectos, me ha faltado más justicia, más sangre– la cual aparece en una mayor escala en la última temporada –, pero es posible que lo que yo pida no sea tan realista, que es algo por lo que se caracteriza la serie, cómo plasma la realidad. Una pega que tengo que ponerle a la serie es que la mayor parte de la acción se da en los dos últimos episodios de las temporadas; la trama en sí es muy lenta pero creo que podrían pasar ciertas cosas “gordas” a lo largo de toda la serie, haciendo que el espectador se meta más en la historia, no dejando toda la “diversión” para el final. Esto no quiere decir que lo que pasa anteriormente no sea importante, es el camino que lleva a la resolución de los conflictos, pero me ha faltado “algo” más. Se puede aplicar el dicho de “lo importante no es el destino sino el camino para llegar hasta él”.

Algunos os preguntaréis que qué le ha faltado a esta serie para que esté entre mis favoritas y es algo que quiero dejar muy claro para que nadie se me eche encima diciendo que cómo no puede estar en mi altar particular. En mi caso, para que una serie esté en esa posición especial tiene que engancharme, hacerme sentir, que me preocupe por los personajes, que quiera saber más, que me mantenga en vilo, que me haga meterme en la trama, que VIVA la serie, y The Wire no lo ha hecho. Vuelvo a repetir, esto no quita que la serie sea muy buena, que lo es y lo reconozco, pero a lo mejor no es mi serie, pero la he visto por curiosidad, porque quería y no por quedar de guay.

Siempre a sus pies, Omar Little, siempre
Haciendo un pequeño hincapié en las tramas, me parece una visión muy realista y te hace ver la pésima situación en la que se encuentra la ciudad de Baltimore. La corrupción es la peor enfermedad, la que produce que todo vaya mal y que no se hagan las cosas de la forma adecuada. Da un asco terrible ver cómo los altos cargos del departamento de policía sólo se preocupan por bajar los porcentajes de criminalidad de cualquier forma, siempre chapucera, no dejando a los agentes trabajar como deberían, llevando a cabo investigaciones de gran envergadura que, de repente, se paralizan cuando están a punto de conseguir la prueba definitiva para llevar a cabo la detención del capo. La frustración se masca en el ambiente, el enfado, la rabia de ver cómo el buen trabajo policial se echa por la borda sin mirar hacia atrás. Da un asco terrible ver cómo los señores de la droga están untando a los políticos para lavar su dinero o para obtener favores e ir escalando posiciones en otra organización que no sea la suya propia; da mucho asco ver cómo los políticos prometen el oro y el moro, no caer en la corrupción pero al final lo hacen porque la ambición es quien lleva la voz cantante; da vergüenza ser testigo de cómo los periodistas se aprovechan de una comunidad tan desfavorecida como los indigentes para vender periódicos. Pero lo que más frustración y rabia produce es comprobar que no hay justicia para los chicos malos, que estos se van a ir de rositas, que hagas lo que hagas las cosas seguirán igual, o peor, y que no se puede hacer nada para remediarlo. No importa que se corte una rama del árbol de la droga porque saldrá otra más fuerte y peor, mejor organizada ya que se aprende de los errores de los anteriores; no importa que se recaben pruebas contra ciertos políticos porque con favores y labia saldrán del bache. Una ha terminado con mucha impotencia y con sed de justicia, algo que se ve que no hay en este mundo, no sólo en Baltimore.

En cuanto al apartado más técnico, la serie se compone de cinco temporadas, de unos 12 episodios de media de una hora de duracióncada uno. David Simon es el creador de la serie, también conocido por la serie Treme, quien se basó en su experiencia en la sección de sucesos en The Baltimore Sun junto con la experiencia como policía de Homicidios de Ed Burns. El vivir de cerca este tipo de situaciones no sólo le han valido la ovación de la crítica sino también del público, destacando la opinión de las comunidades retratadas quienes dicen que se ha plasmado de forma perfecta hasta los diálogos entre los personajes.

Como podéis ver, The Wire es un viaje que uno tiene que estar dispuesto a hacer, con muchas ganas, tesón y curiosidad. Es una serie lenta, que tiene que entrar poco a poco, y con eso en mente creo que el camino se puede hacer mucho más llevadero. Ahora os toca a vosotros si comprar el billete o no. Os animo a ello a los interesados y, a los que ya la habéis visto, os invito a dejar vuestra experiencia en el apartado de comentarios para animar a los indecisos.


Let’s go home – McNulty

Irene (@MissSkarsgard) 

Scream de MTV sabe lo que queremos: Sobre el nuevo -A sangriento

$
0
0

Sí, lo sé, soy bipolar. El primer artículo que hice sobre la nueva Scream de MTV fue paraponerla a caldo, pero tenéis que entenderme: soy un gran fan de la saga original de Scream y creí (ilusamente) que esta nueva reinvención de la historia iba a ser algo más que una loca mamarrachada adolescente. No obstante, una vez que superas el shock inicial (el piloto no es nada del otro mundo) y asumes que esta Scream va a ser una mamarrachada, puedes pasarlo genial con este nuevo -A que ha surgido como una macabra parodia de Pretty Little Liars. Porque sí, compañeros: Scream sabe exactamente lo que queremos.

Pretty Little Liars está renovada por siete temporadas, y corre por ciertos lares el terrorífico rumor de que podría renovar también por una octava tanda de episodios en los que el 90% de la trama seguirán siendo relleno y novias de Emily que durarán cuatro capítulos. En ese sentido, Scream ha sido muy inteligente al perfeccionar el concepto ya demasiado manido de la joyita de ABC Family y nos ha ofrecido un -A mejorado, tanto que probablemente cada vez nos vaya haciendo menos gracia el pedorro fan de las muñecas siniestras de Rosewood.


Cualquiera diría primeramente que la inspiración de Scream es, por lógica, la saga de Neve Campbell, pero permitirme que insista: a quien de verdad copia Scream de MTV es a las pequeñas mentirosas. De ellas ha aprendido lo divertidísimo que puede ser que un chiflado acose a los protagonistas valiéndose de las redes sociales, que también son el medio perfecto en el que publicar vergonzosos vídeos íntimos. En Lakewood, nuestros protagonistas ni siquiera pueden echar un pinchito tranquilos sin que un psicópata lo grabe y lo viralice por todo ese cochambroso pueblo de mala muerte. 

¿Por qué nos divierte tanto que puteen a la rubia protagonista, o que los paletos del pueblo publiquen una encuesta en la que poder votar qué chica prefieres que sea la siguiente (atentos a esos 500 votazos para Brooke, casi me meo) después de una serie de sangrientos asesinatos reales? Scream de MTV sabe la respuesta, sabe que el concepto del héroe intocable ya no interesa, y eso es exactamente lo que piensa ofrecernos: buenas dosis de macabro acoso sangriento vía Twitter. Scream ha sabido incluir en la trama las nuevas tecnologías de una manera en que Scream 4 se quedó corta, y se ha convertido en un digno candidato para tomar el relevo del éxito de Pretty Little Liars. Porque este nuevo -A no se va a andar con chiquilladas...


¿Qué hay de vosotros y vosotras? ¿Compráis las mamarrachadas sangrientas de Scream



PD: Hace poco también os hablaba de la "polémica racista" del tercer episodio, un tema un poquito más serio sobre el que os invito a comentar y opinar.


Isidro López (@Drolope)

Agent Carter: Who Said Women Can’t Be Heroes?

$
0
0
Marvel siempre ha sido, junto con DC, una compañía donde los superhéroes y héroes de turno – es necesario hacer la diferencia entre ambos términos – suelen ser hombres, pero desde un tiempo para acá, con la revolución de los personajes femeninos que han dejado de ser amas de casa frustradas para convertirse en mujeres de armas tomar, se ha dado cuenta de que su presencia es necesaria entre tanta testosterona. Por eso, este artículo está dedicado a una mujer con garra que fue toda una revolución para su época: Peggy Carter.

La Viuda Negra, interpretada por Scarlett Johansson, ha supuesto un gran referente para estos personajes femeninos que estaban olvidados en el baúl, que buscaban su momento entre Capitán América, Iron Man y Hulk, entre otros, y que su importancia se ha visto trasladada también a las series de televisión. Agents Of S.H.I.E.L.D. ha sabido reflejar muy bien a esas badass que tanto añorábamos algunas de nosotras, mujeres que no se achantan ante el peligro, que pelean por su integridad física, que luchan por su equipo y que destacan por ello sin caer en el rol de “mamis”. Skye, Melinda May, Bobby o Simmons, cada una con una habilidad especial que las diferencia entre ellas, con unos rasgos únicos que las hacen ser imprescindibles para el grupo, han sabido trasladar al universo de los cómics plasmado ahora en la televisión que las chicas también pueden ser muy guerreras. Sin embargo, la pionera en este universo fue Peggy Carter, una mujer adelantada para su tiempo, valiente, luchadora e incluso fundadora de una institución de gran envergadura como es S.H.I.E.L.D.

En Agent Carter, que es el tema en el que me quiero centrar, seguimos a Peggy (Hayley Atwell) un par de años después de los acontecimientos que vimos en Captain America: The First Avenger, así que si no habéis visto la película pero queréis ver la serie es más que recomendable que le echéis un vistazo antes, que es muy entretenida y Chris Evans sale sin camiseta - ¡Ay, omá, qué rico! –. Peggy intenta hacerse un hueco en el mundo tras perder al que posiblemente era el amor más importante de su vida, ese chaval de Brooklyn que luego se convirtió en el símbolo de la América de los años 40 durante la Segunda Guerra Mundial. Trabaja como agente de la institución anterior a S.H.I.E.L.D., SSR, aunque la tratan más como una simple secretaria  con buenas curvas que como una mujer inteligente que sabe lo que hace. Pero no sólo se enfrenta a su frustrada condición laboral y a la pérdida de un gran amor, sino también al juicio público de su amigo Howard Stark (Dominic Cooper), el padre de Tony Stark, más conocido como Iron Man. Howard es acusado de traición a la patria por vender armas a otros países, por lo que se encuentra en busca y captura. Este, al saber lo mucho que vale Peggy, le pedirá el enorme favor de limpiar su nombre mandándole pequeñas misiones que deberá resolver mientras recaba información de su propio puesto de trabajo. Sin embargo, Stark no va a dejarla sola en esta gran tarea, le acompañará su mano derecha, Edwin Jarvis (James D’Arcy), un lacayo inglés que vive con su mujer y sus hijos en la casa de Howard.  Juntos se enfrentarán a los peligros que supone cada misión que les es asignada y se formará una buena dinámica entre ambos personajes, teniendo algunos toques de humor propiciados por la conducta de Jarvis, a quien veremos tragando saliva en más de una ocasión ante las tareas que se le adjudican, como echar a los múltiples ligues de su empleador o enfrentándose a los momentos de acción junto con Carter.

En el apartado técnico, decir que sólo cuenta con una temporada de ocho episodios de unos 40 minutos de duración de media. Es una serie muy fácil de ver y nos permite rellenar huecos en el universo de Marvel, aparte de ver a un personaje femenino adelantado a su época ya que Peggy es muy diferente al resto de mujeres que vemos en la serie, y es algo que podemos comprobar fácilmente. Al principio puede resultar un poco lenta pero poco a poco veremos más acción, cómo evoluciona y entenderemos a nuestra protagonista que vive una época dura tras la gloria que obtuvo junto con Steve Rogers. Agent Carter tendrá una segunda temporada compuesta por 10 episodios donde veremos a Peggy trasladándose de escenario, de Nueva York a Los Ángeles, y será estrenada en enero de 2016, así que todavía tenéis tiempo de verla tranquilamente.

En mi caso, he visto la serie porque primero, Peggy me gustó muchísimo en Captain America: The First Avenger, donde se ve claramente el tipo de mujer que es y el cual me encanta – los personajes femeninos con carácter me encantan –; segundo, porque Hayley Atwell hace un papelón y no puedo imaginarme a otra persona dando vida a Peggy; y tercero, porque tuve una vena muy fuerte con todo el universo Marvel después de ver The Avengers: Age Of Ultron y quería rellenar huecos, por lo que este material me interesaba de veras. Además, ver a mujeres romperles los esquemas a los encorsetados señores de ciertas épocas de la historia da un gusto increíble. La serie la vi en nada, dos días para ser exactos, ya que ocho episodios son poquísimos. Me alegra que le vayan a dar un par más en la próxima temporada y esperemos que no sean los últimos ya que Carter puede tener un recorrido interesantísimo ya que fundó S.H.I.E.L.D.

Por mi parte sólo me queda animaros a que le deis una oportunidad; como veis no se tarda nada en verla y es genial para hacerse un pequeño maratón. Os animo a los que la habéis visto me contéis vuestra opinión sobre la serie y así los más indecisos tomen una decisión. Hacedlo por Steve Rogers, que no puede bailar con ella una última canción, anda.

P.D: Para que veáis lo genial que es el cast tanto de Agents Of S.H.I.E.L.D.como de Agent Carter, por motivo de la Comic Con, ambos grupos se enzarzaron en una guerra de Dubsmash, una aplicación que permite hacer playback de ciertos audios en formato de vídeo. Hayley Atwell es conocida en las redes sociales por llenar las suyas con estos vídeos, así que Clark Gregg (Phil Coulson) y cía se animaron a retar a esta diosa y ver quién ganaba. Echadles un vistazo en Twitter e Instagram porque valen muchísimo la pena. Por ahora el #TeamCarter va ganando por goleada.


Versiones modernas de Sherlock Holmes

$
0
0


Tengo que confesar que tratar este tema no se me ocurrió a mí, me lo sugirió un comentario anónimo en mi entrada de 5 Razones por las que ver Sherlock. Sinceramente, me pareció una idea buenísima. Y, aunque me ha costado escribirlo, aquí está mi análisis y crítica de tres series que versionan al famoso detective londinense.


Sherlock:



Os he hablado tantas veces de lo mucho que me gusta Sherlock que os lo voy a ahorrar. Voy a dejar el fangirleo a un lado y paso directamente a lo que os interesa: porque es la más fiel a las novelas de Arthur Connan Doyle.

Un Sherlock Holmes actual, interpretado por el increíble Bennedict Cumberbatch, resuelve crímenes en el mismísimo Londres, 221 de Baker Street. Martin Freeman como John Watson, siendo su compañero de piso y, más tarde, mejor amigo. Reproducen las aventuras de las novelas, solo que unos siglos después.


Elementary


Sospecho que cada vez que los británicos tienen una serie exitosa, van los estadounidenses y sacan algo similar pero peor. Esto es lo que me parece que han hecho en este caso. 

Sí, lo habéis adivinado, no soy partidaria de Elementary. Yo creo que si se quiere versionar algo, hay ciertas bases de la historia que se debe respetar. ¿Qué cambia Elementary de las novelas? Absolutamente todo. Empezando porque Watson es una tía (cosa que hacen para que haya tensión sexual entre ellos, siendo que estamos en el siglo XXI y que podría haber atracción entre dos personas que fueran mismo sexo), y continuando porque viven en Nueva York (¿el mítico detective en Nueva York? Es Londres, de toda la vida).


Admito que los casos son interesantes, no va a ser todo malo. Y hay unos veintitantos capítulos de cuarenta minutos por temporada, las cuales estrenan cada año. CADA AÑO. Cosa que nos encantaría tener a los fans de Sherlock.

House:


Lo sé, a mí también me pareció una locura cuando me lo dijeron, pero después de investigar bastante, tengo que admitir que House es una versión moderna de Sherlock Holmes. No intentan recrear las novelas, solo hacer pequeños guiños al espectador. Las enfermedades podrían ser los casos que resuelve con diferentes pistas. Y en cuanto al personaje principal, hay más de una similitud: actitud de genio sociópata, una adicción (en este caso a las pastillas), piso en el portal 221… Y Wilson, su único amigo, sería su Watson.



Sherlock Holmes es una leyenda de la que existen muchas versiones, diferentes formas de darle vida. Y, aunque siempre tendremos a ese brillante detective capaz de hacer todo para resolver un caso, ninguna de estas series es igual que la anterior.  

¿Y a vosotros? ¿Cuál os gusta más?


Victoria (@MissGoingAway)

Porque la revelación de -A SÍ ha molado

$
0
0

Hace unos días se desveló por fin el insondable misterio que llevaba atormentando a la humanidad desde hace muchos, muchos años. Porque sí, compañeros, podemos dormir tranquilos cada noche desconociendo quién es el asesino de Kennedy o si hay vida inteligente en el universo, pero lo que nos quitaba el sueño era no saber la identidad de -A, el sociópata coñazo que ha estado haciendo todo este tiempo putadillas a cuatro paletas de un pueblo por misteriosas razones que nadie podía explicarse. ¿Qué habían hecho las encantadoras Hanna, Spencer y Emily (y Aria) para merecer este tormento?

A continuación, ¡el spoiler del siglo!

Resulta que el culpable de que nos hayamos tenido que tragar esta serie durante años es el padre de Alison. Ya sabíamos que ese señor era más perturbador que los habitantes de Twin Peaks, pero lo que no podíamos olernos era que mentía acerca de su hijo: no era diabólico,¡simplemente era un entrañable transexual! 

CeCe Drake es Charles. Porque CeCe tuvo antaño un rabaco más grande que la copa de un pino, pero se sometió a una operación de cambio de sexo para poder ser mujer... y liarse con su hermano.


Los amigos de Recap Blog han comentado que la historia les ha parecido decepcionante, y han hecho un análisis de todos los agujeros en la trama, que son unos cuantos. Pero, por favor, ¡un poco de humor! Ya sabíamos que estábamos viendo Pretty Little Liars, esperar una resolución brillante digna de la mejor novela de Agatha Christie no era la predisposición más inteligente con la que afrontar una serie de estas características tan poco sofisticadas.

No entiendo a qué viene tanta decepción, de verdad os lo digo. Porque sí, habría sido muy divertido que -A fuese alguna de las madres, un novio petardo o la misma Aria (nuestro sueño imposible), pero la historia de CeCe es la única que encaja y tiene sentido. Durante el 6x10 "Game Over, Charles" han dado muchas respuestas, e incluso han recordado que la clave de su identidad estuvo en su propia presentación. ¡No me digáis que la historia del hermano transexual no ha molado! Estaba claro que la única persona a quien la madre de Alison pudo proteger era a otro hijo. El resto... es echarle imaginación...

CeCe ha estado haciendo putadillas a las zagalas porque criticaron a su adorada hermana, y desde entonces les cogió un poquillo de manía. ¿Que casi corta por la mitad a Emily y congela a Spencer y Aria, entre otras lindezas? ¡No pasa nada! Nunca pensó en matarlas, solo en torturarlas psicológicamente de buen rollo. Mona atropelló a Hanna y miradlas ahora, tan amigas. El gran mensaje que nos transmite Pretty Little Liars es que no hay que ser rencorosos y debemos perdonar los intentos de asesinato que puedan acometer contra nosotros nuestras amigas o acosadoras perturbadas.


Es una resolución mamarracha, como toda la serie. Claro que lo es. Pero también es molona y encaja... más o menos. Los agujeros de la trama que mencionan en Recap Blog pueden rellenarse si le echas imaginación. A Sara se la han sacado de la manga, está claro, pero no le pidamos demasiado a esta serie. CeCe le cogió el gusto a putear a las chiquillas porque es divertido, ¿y quiénes somos nosotros para argumentar que esa no es justificación suficiente, si hemos estado riéndonos de ellas todos estos años? 

Me han divertido con sus diálogos llenos de chispa, me han enganchado con sus ridículas aventuras y me han sorprendido con una extravagante explicación cogida con pinzas, pero que encaja. O que, como poco, da el pego. Esto es exactamente lo que esperaba de Pretty Little Liars. Esperar más... era ser iluso. 


Isidro López (@Drolope)

Por qué querer a iZombie, la encantadora Verónica Mars zombi

$
0
0

El vacío que dejó Verónica Mars aún pesa a muchos. Esa chica rubia, brillante, llena de ingenio y con la asombrosa capacidad de hablar con una velocidad que nada tiene que envidiar a la de la luz hizo historia en televisión. Como sabréis, el año pasado revivió de manera fugaz pero intensa con una película que ya analizó nuestra compañera Irene Galindo. Pero, ¿qué hacer de ahora en adelante con nuestras tristes vidas sin nuestra rubia favorita? Porque no hay nadie como la Vero, eso ya lo sabemos... pero quizá haya nacido una serie que sí tenga su espíritu.

¡Sin spoilers!

El verano es una época nefasta para los seriéfilos. Porque sí, hay tiempo para ponernos al día con esas mil series que tenemos pendientes (aunque luego pasen los días y no veamos ni la mitad de lo que nos propusimos), pero la mayoría de series que seguimos al día se van de parón, como hizo hace poco (y a lo grande) Pretty Little Liars. Necesitaba serie nueva y le di una oportunidad a una que tenía en la lista de pendientes cogiendo el polvo desde hace meses. ¡Y cómo he acertado!


Liv es una chica muy mona que tiene el futuro planeado. Tiene una prometedora carrera en la que deslumbra a todos con su talento y se va a casar con un maromo que está más bueno que los lacasitos... el único problema es que es más sosa que un huevo sin sal. I feel u sis. Acepta la invitación de una compañera del trabajo para pasar la noche en una fiesta sobre un barco y así hacer algo divertido por una vez en su vida. ¿Qué es lo peor que podría pasar...? 


Llena de humor negro y de rapidísimos diálogos con chispa, que nada tienen que envidiar a los de las chicas Gilmore, iZombie es un "procedimental" que no acaba de serlo. Es cierto que cada episodio trata un caso diferente, pero tiene una trama muy serializada que agradará a aquellos que no sean amigos de los procedimentales. Y por otra parte, si sois como mi compi Doralais y os dan pereza los zombis, tampoco tenéis de qué preocuparos, porque iZombie no tiene nada que ver con The Walking Dead. En esta nueva "Verónica Mars" lo que predomina es el humor, pero humor con un trasfondo dramático que da consistencia a la trama y hace que te resulte muy fácil empatizar con Liv. ¡Es un amor de zagala!


Si eres otro seriéfilo en apuros como yo y buscas serie nueva a la que engancharte para el verano, no lo dudes: iZombie es para ti. Porque Liv está muerta... ¡Larga vida a Liv!


Isidro López (@Drolope)

Viewing all 1377 articles
Browse latest View live