Quantcast
Channel: El Blog de las Series Americanas
Viewing all 1377 articles
Browse latest View live

La season finale de This is Us nos deja al borde de las lágrimas

$
0
0

¡Hola, amigos! Ya hemos pasado ese duro invierno que tanto les gusta a los Stark y nos adentramos en la estación que, como bien dice el refrán, la sangre altera. Pero a mí no solo me ha alterado la primavera, sino también el final de temporada de la serie revelación de la NBC de esta temporada, This is Us. Veamos qué ha pasado con los Pearson en el pasado y en el presente y cómo ha sido el desenlace de las tramas de esta temporada. ¡Comenzamos!

Ya hablé un poco de esta serie cuando llegó la mid season finale, pero ha llegado el momento de hablar de lo que todos algunos estábamos esperando: el final de la primera temporada. Llevaba varios días sin poder ver series debido a diferentes problemas con las clases y quehaceres de mi vida diaria, cuando de repente me acordé de que ya había finalizado la tanda de capítulos de This is Us, así que decidí ponerme al día con ella. Y, sinceramente, no sé qué pensar.

Lo primero que debo decir es que esta serie me ha hecho reflexionar, y eso no lo consigue cualquier cosa. This is Us es de estas series que te lleva por los diferentes momentos que puede vivir una persona en la vida, desde los más bonitos e importantes a los más despreciables. En varios momentos podemos incluso sentirnos identificados con algunas de las situaciones que viven los protagonistas, lo que hace que se nos caiga una lagrimita mínimo cuando acaba el episodio.

Eso sí, me gustaría hablar de los que para mí han sido los personajes que han evolucionado a lo largo de esta temporada, y de los que han caído en picado cuando eran muy potentes en un principio. Lo primero que quiero señalar es toda la trama de William y Randall. Esta ha sido una de esas relaciones que han ido creciendo a lo largo de estos capítulos, culminando en ese 1x16 llamado "Memphis", con el que acabas llorando como si volvieras a ver la muerte de la madre de Bambi. Todos sabíamos desde el principio de la serie lo que iba a acabar pasando, pero los guionistas han conseguido que se nos caigan las lágrimas de una manera magistral. Nunca lo superaré.


Si hablamos de William, hay que hablar de Randall. Creo que alguna que otra vez, antes de continuar con la segunda parte de la temporada, dije que el hijo de William era un personaje que no me terminaba de atraer. Me parecía que entre tantos personajes con tanto potencial, Randall no sabía destacar tanto como otros personajes, como Kate (de la que ya hablaré después, porque MADRE MÍA) o Jack.

Eso sí, ahora tengo que asumir que, en esta segunda mitad, el marido de Beth ha subido mucho en mi top de personajes favoritos por varios motivos, como su relación con su padre, su pasado con esa obsesión insana por ser perfecto o sus problemas en el trabajo por estos mismos temas que ya le hicieron sufrir anteriormente. Randall, por favor, continúa así.

Por otra parte, también quiero hablar del personaje revelación al cual muchos no le han dado el mérito que se merece, y ese personaje es el de Beth. La esposa de Randall ha pasado por muchos momentos en la serie (recordemos ese momento icónico de la televisión mundial cuando se fuma un porro con William), pero el momento por el cual me encanta Beth es por ese discurso que realiza en el penúltimo capítulo de la serie, mostrando su cariño hacia su suegro. Espero ver mucho más de Beth a lo largo de la próxima temporada, porque para mi gusto se lo ha ganado (y mucho).

En este momento quiero ponerme un poco serio porque ha llegado el momento de hablar de los mellizos: Kate y Kevin. Uno ha subido más en mi top y otro ha bajado de una manera desmesurada en esta segunda tanda. Me duele mucho decir esto, pero Kate, para mí has ido a peor. Tía, lo primero que te tengo que decir es preguntarte QUÉ COÑO HACES CON TOBY. Es que no sé de verdad qué le ve, si no puede ser más tonto y más cursi y ufff. Por ejemplo, la relación de Kate con el hombre del campamento sí me gustaba, pero vamos, muchísimo más que con Toby.

El chico del campamento (no me he molestado en aprenderme su nombre, sorry) daba mucha más vida a Kate que su pareja. Y lo que no entiendo es cómo Kate puede preferir a su novio antes que al otro hombre, es que no me entra en la cabeza. Esta chica me ha decepcionado muchísimo, con lo maravillosa que me pareció en los primeros capítulos, ahora me da taaaaaaaaanta pereza. Espero que mejores, Kate, porque tú antes molabas. Además, todavía no hemos descubierto por qué Kate no quiere hablar de su padre, aunque yo personalmente tengo varias teorías acerca de este tema y lloro con cada una de ellas. Puta vida.

Y ahora hablamos de Kevin. Sinceramente, su trama de esta segunda mitad ha sido la hostia. Y así os lo digo, porque me ha parecido buenísima. Nos han mostrado una cara de este chico que desconocíamos. Habíamos visto a Kev con Sloane y con Olivia, teniendo sus más y sus menos, pero la relación que tiene con Sophie es maravillosa. Era lo que Kevin necesitaba sin ninguna duda. Ese plot twist del 1x13 cuando descubrimos la existencia de Sophie es sorprendente, y es por ese tipo de cosas por las que This is Us engancha y te atrapa. Espero que a Kevin y Sophie les vaya bien en la próxima temporada.

En general, This is Us ha sabido mantenerse, con sus más y sus menos, pero ha sabido seguir en la misma línea en la que terminó la primera parte. Pero si hay algo de lo que quiero hablar es del matrimonio más "bonito" de la televisión: Jack y Rebecca. A ver, si yo entiendo que esto es una serie, que hay que darle dramatismo, que esto necesita salseo porque si no se hunde, pero tío, no me hagas esto. No nos estés metiendo 17 capítulos de "oh, qué gran matrimonio el de Jack y Rebecca" y luego en el último episodio nos metas el drama de su vida. No. No lo acepto.

Y repito que entiendo que no todo va a ser amor, pero veo MUY CLARO que han ideado todo para que al final de la temporada lloremos como nunca montándonos el drama del siglo con esta pareja y haciéndonos pensar que íbamos a ver otra cosa distinta (todos los que habéis visto la serie sabéis qué es lo que esperábamos ver). Me explico FATAL pero bueno, espero que me hayáis entendido. Tendremos que ver qué nos depara esta pareja, pero vamos, espero que todo vaya bien, porque son la jodida pareja más mona del mundo.

Eso sí, también quiero recalcar algo que es bueno y malo a partes iguales, y es el hecho de que NOS HAN DEJADO CON LAS GANAS. Guionistas, hijos míos, no nos pongáis ese final, que yo me voy a estar comiendo las uñas hasta septiembre-octubre pensando en lo que pasa con estos dos. Pero bueno, mejor que te dejen con las ganas antes que sin ellas.

Y esto ha sido todo por hoy, amigos. Espero que os haya gustado mi pequeño resumen-análisis del final de temporada de This is Us, que volverá a NBC la próxima temporada. ¿Cuándo? Esa es una buena pregunta. Pero bueno, mientras tanto no dejéis de ver todas las series que podáis. Y ahora, os toca, ¿qué os ha parecido el final? ¿Qué creéis que va a pasar con Jack y Rebecca? ¿Estáis de acuerdo conmigo en el tema de Kate?



Crítica del 6x15 "A Wondrous Place" de Once Upon a Time: cambios de compañía

$
0
0

La semana pasada Isidro nos contó lo precioso que fue el capítulo tan maravilloso centrado en la Evil Queen y Regina (no podía ser de otra manera teniendo a Lana Parrilla protagonizándolo, obviamente), y aunque esta semana no ha tenido nada que ver, ya que se han ido por otros derroteros, creo que también han contado una buena historia. ¡Spoilers!

Conforme la temporada va llegando a su fin, se va acercando aquél momento spoileado sobre la muerte de Emma que está escrita en su destino, y Gideon se está volviendo cada vez más insoportable. Necesita a Emma para matar a su abuela, el Hada Oscura, y por eso mandó a Hook a cazar krakens al fondo del mar (literal). ¿Qué habrá hecho esa señora además de criar a un nieto tan encantador? Lo averiguaremos pronto, me temo. Así, el capítulo se ha centrado en las dos mitades del Captain Swan con sus respectivos dramas y en cómo intentan solucionarlos desde la distancia.

Emma
¿PERO QUIÉN VA A DECIR QUE NO A IRSE DE COPAS CON ELLA?
A pesar de ser la supuesta protagonista de la serie, Emma últimamente no ha pintado demasiado que digamos. Sin embargo, en este capítulo ha sido el centro de atención de todo el mundo porque estaba triste porque Hook la había abandonado. Los shippers del Swan Queen debéis estar encantados con este capítulo y con esta nueva amistad entre Regina y Emma. La semana pasada se abrazaron (admito que aunque era algo que quería que pasara desde hace tiempo, me pilló desprevenida ¿porque nunca se habían abrazado, no?) y esta semana Regina la invita a irse de copas y le hace un análisis psicológico propio de una mejor amiga. Hasta yo estoy encantada con todo esto. No ha sido una trama tan interesante como divertida (sobre todo cuando Snow borracha en modo liberación de todas sus preocupaciones de madre y de maldiciones del sueño hizo diana con varios cuchillos para sorpresa de todos los bárbaros del nuevo bar del pueblo) pero creo que ha sido un capítulo que ha retratado a Emma como una verdadera drama queen porque ¿no hace como medio día que Hook desapareció? ¿No es exagerar sacar las cosas de Hook de casa cuando ni siquiera sabe lo que le ha pasado? ¿No debería estar preocupada en lugar de enfadada? Por un lado entiendo que discutieran y que lo más lógico sería pensar que se ha ido enrabietado, pero viviendo donde viven y con las cosas que les pasan, tendría que haberse planteado al menos por un momento que quizás su desaparición no era tan voluntaria como ella piensa. Y lo que es peor, ¿no debería importarle a Henry un poco más que su madre esté triste? El chaval está irreconocible con respecto a sus inicios de niño adorable.


Hook
El Capitán ha estado viviendo su angustia bastante acompañado. Nemo, su hermano pequeño Liam, Aladdín, Jasmine y Ariel se han unido al team Hook para ayudarlo en mayor o menor medida. Sin duda, a quien tenía más ganas de ver era Ariel, que me parece un personaje monísimo y que han desaprovechado tantísimo desde que decidieron introducirlo en la serie... Aquí ha tenido su importancia, pero me hubiera gustado o me gustaría que hubiera tenido su propia trama bien elaborada y no solamente algunas apariciones esporádicas a lo largo de varias temporadas (pero esto es Once Upon a Time, no podemos pedir más). Nemo y Liam han pasado un poco del culo de Hook, la verdad, y eso que se supone que son amigos/familia suya, pero, a cambio, Aladdín y Jasmine lo han ayudado a la vez que conseguían su objetivo de recuperar Agrabah y de derrotar a Jafar. Me parece que lo han resuelto todo demasiado fácilmente y rápido, sobre todo si consideramos que probablemente sea el final de la historia para Aladdín y Jasmine en la serie, pero oye, al final no me ha parecido tan aburrida su historia teniendo en cuenta las pocas expectativas que tenía respecto a ella cuando empezó la temporada, en especial el hecho de que le han dado la vuelta a la historia convirtiendo en heroína a la princesa, como en la serie ya han hecho en otras ocasiones, demostrando cuán fuertes pueden ser y que no necesitan que venga un príncipe a salvarlas cada vez que tienen un problema.


El punto de conexión entre los miembros de la pareja no llegó hasta el final del capítulo, cuando Hook se comunicó con Emma mediante la caracola walkie-talkie. Hook sigue sin poder regresar al lado de su Swan, y espero que al menos le den un par de capítulos más de desesperación y lucha y que no se lo pongan tan fácil como otras veces, porque está claro que tarde o temprano volverán a estar juntos y que habrá boda queramos o no.

Lo cierto es que la temporada, en líneas generales, me está gustando bastante. Sobre todo me gusta que no haya estado girando a ninguna historia en particular, que haya ahondando en sus personajes protagonistas, en lo que sienten y en lo que piensan, en lugar de prestarle toda la atención al villano de turno, que les esté dotando de un poco más de profundidad; y también aplaudo que hayan roto su estructura de los últimos años creando una historia de más de diez capítulos seguidos, aunque hayan metido al pringadete de Gideon por en medio. ¿Qué os está pareciendo a vosotros lo que estamos viendo? Invitados quedáis a dejar vuestras opiniones.

PD. ¿Visteis la furgoneta de Hurley de Lost ahí aparcadita en la puerta del bar? ¡Me hizo toda la ilusión!

Doralicia (@Doralais)

One day at a time: Por fin una sitcom feminista

$
0
0




Quien fuera que dijo que el humor feminista no era divertidísimo se equivocaba. Aquí tenemos One Day at a time, una sitcom protagonizada por tres mujeres cubanas que ayuda a entender temas importantísimos mientras te echas una risas.

(Sin spoilers):

One day at a time es la mejor sitcom que he visto en mucho tiempo, porque nos demuestra que se puede hacer humor sin ofender y sin ser irrespetuoso con nadie. Que, aunque muchas series de hoy en día lo encuentren difícil, no es imposible. No hay ni una sola escena de One day at a time en la que no me haya reído a carcajadas y no ha sido a costa de la dignidad de ninguna persona. Creo que es importante que apoyemos este tipo de humor y que acabemos con el que hace sentir mal a la gente.

Y es que es de una de estas series familiares y acogedoras a las que tanto estábamos acostumbrados durante los años 90 y 2000, pero refrescante a la vez. Tratando de temas tan importantes que no creo que ninguna sitcom los haya tratado antes (el mansplaining, salir del armario, la inmigración, la brecha salarial...)


Esta maravillosa comedia está protagonizada por Penelope, una enfermera que estuvo en el ejército, madre divorciada de dos adolescentes, Elena y Alex. Los cría con la ayuda de su madre Lydia y de su vecido Schneider, que a veces supone más una carga, pero nos gana con su encanto. 

Para mí, lo más importante es la relación entre Lydia, una abuela cubana tan tradicional como atípica; Elena, la hija social justice warrior, y Penelope, una madre que solo quiere lo mejor para su familia. La serie trata básicamente del día a día de estas tres generaciones de mujeres cubanas, sus problemas y sus muy diferentes formas de ver el mundo. Porque es normal que por su edad y por sus experiencias tengan opiniones opuestas, pero al final son familia y se quieren y se intentan comprender las unas a las otras. Es muy dulce, de verdad. 
Otro de los temas principales en la serie es hasta qué grado una familia originaria de Cuba que vive en Estados Unidos conserva sus raíces culturales. Aquí también tenemos una diferencia generacional. Mientras que Lydia tiene clara su identidad cubana, Penelope está entre los dos mundos y Elena prácticamente es una adolescente estadounidense que ni sabe hablar español. 

Por último, One Day at a time tiene solo trece capítulos de 20 minutos que no os durarán más de tres días. Está renovada para una segunda temporada. Y os va a encantar, tanto si sois feministas formadas, como si os apetece disfrutar mientras aprendéis.

PS: sí, es una sitcom feminista. Trata la sororidad entre mujeres y bastantes términos feministas, por no hablar de que Elena se autodefine como social justice warrior. No, no hay otro término que pueda utilizar. Por si acaso.



Victoria (@_TheEastWind)

Crítica del 2x18 "Senile Lines" de Blindspot: ¿despedida?

$
0
0

Después de las malas noticias que recibió el equipo al final del capítulo anterior, los guionistas se han acordado por fin de que resolver algún tatuaje de vez en cuando estaría bien, sobre todo para despedir la serie hasta el próximo 26 de abril, cuando regresará con los últimos cuatro capítulos de su temporada (o de su historia, pues aún no hay noticias de si la serie renovará por una tercera temporada). No obstante, aunque el capítulo ha sido intensito, me parece que se están tomando las cosas muy relajadas teniendo en cuenta lo que queda de temporada, y me da la sensación de que la trama no avanza.

Esta semana, no solo han tenido que investigar un tatuaje que les ha llevado a un caso de experimentos con niños huérfanos, sino que cada uno de los miembros del equipo ha sido interrogado e investigado, lo cual, en realidad, ha sido lo más interesante del capítulo. Todos excepto el pupas de Reade, que ha estado en el hospital después de la paliza que le dieron en el capítulo de la semana pasada. En el contexto del episodio, con todos bajo vigilancia, no han tenido idea mejor que sumarle un poco de intensidad al asunto sacando a Roman al terreno. No nos equivoquemos, aplaudo que por fin hayan hecho eso, porque estaba cansada de que lo tuvieran relegado a un segundo plano con la única función de ver un par de fotos para ver si se acuerda de algo. Es más, creo que ha sido muy interesante que hayan creado ese paralelismo entre él y uno de los niños huérfanos, que le tuvieran ahí ha sido productivo para todos porque ha ayudado a comprender cómo puede sentirse un niño en esas condiciones y también nos ha llevado a explorar un poco más su personaje.


En cuanto a las investigaciones a las que el equipo se está viendo sometido por el incidente del derrumbe en el final de temporada de invierno, estoy un tanto indignada. Supongo que serán los procedimientos habituales en un sitio como el FBI, pero es que el tipo de preguntas que Weitz les ha hecho me parecen absurdas y completamente fuera de lugar. Además, ya les gustaría a ellos saber contestar a muchas de ellas... En fin, Blindspot siempre se propone que odies a todo ser superior a Weller que aparezca por la oficina, aunque también es cierto que ninguno de ellos ha acabado precisamente bien, así que ya se puede andar con cuidado Weitz. De cualquier manera, estos interrogatorios no han traído nada nuevo a la trama, que está un tanto estancada y que únicamente nos deja caer alguna que otra pista sobre la dirección que tomará todo de ahora en adelante. Pensé que los problemas con la investigación del equipo durarían más, pero habiéndose resuelto tan rápido van a tener que elaborar un final de temporada muy frenético para que pasen cosas interesantes en tan solo cuatro capítulos.


Lo que más me ha impresionado de todo (que no sorprendido, porque de Weller y su responsabilidad desmesurada me puedo esperar cualquier cosa), ha sido la reacción de Weller al final del capítulo: era capaz de renunciar a su puesto en pago por lo que pasó aquel día, siempre y cuando el resto del equipo pudiera seguir adelante investigando los tatuajes y poder vencer a Sandstorm. En cambio, sí me ha sorprendido que Nas asumiera finalmente las culpas sacrificándose ella para que incluso Weller pudiera continuar en la investigación. Si este ha sido el último capítulo de Nas, se ha ido como toda una señora, y, como ellos mismos han dicho, al principio ninguno la queríamos ahí (vamos a ver, es que el romance con Weller fue una trama muy chapucera y tenía una cara de sospechosa que tiraba para atrás), pero ahora es difícil imaginarse la serie sin ella


¿Qué pasará de ahora en adelante con el equipo? ¿Volverán a tocarles las narices con que están apoyando a un grupo terrorista, o podrán vencer a Sandstorm y evitar su inminente ataque nuclear? ¿Volverá Reade al equipo, o acabará de traumatizarse con el VHS que tantas vueltas ha dado a lo largo de la temporada? Espero que lo descubramos pronto. Hasta entonces, ahí abajo tenéis vuestra sección para comentar.

Doralicia (@Doralais)

El adiós a la serie de los huesos

$
0
0

Bones se despidió de nosotros hace apenas unos días después de12 largos años en emisión que finalmente aguanté como una campeona. Muchos son los que por el camino fueron cayendo, temporada tras temporada, viendo como, cada vez más, se degradaba una serie que tan buena había sido en sus inicios, viendo como el elástico que querían estirar estaba ya completamente dado de sí, y yo pensé en más de una ocasión que no viviría para verla terminar.

¡Spoilers a partir de aquí!

Ya hace un par de temporadas que dije que seguir renovando Bones era un error, pues la serie no ha pasado por sus mejores momentos en los últimos años, llegando a tornarse incluso aburrida. Principalmente, bajo mi punto de vista, la serie fue perdiendo la esencia con la que se estrenó, y es algo que muchas veces pasa cuando los protagonistas, que comparten una tensión sexual no resuelta más grande que una catedral, comienzan una relación. En este caso, Booth y Brennan se vieron prácticamente obligados a comenzar una relación cuando ella se quedó embarazada (introduciendo el embarazo de Emily Deschanel en la trama). Quizás fue esa serie tan precipitada de eventos lo que hizo que las cosas no fluyeran de forma natural, aunque creo que también comenzaron a plantarles enemigos que no estaban en el nivel de los primeros (el Sepulturero, Gormogon... eran geniales) y eso no sumó puntos a favor precisamente. Por las renovaciones o cancelaciones de esta serie hubo hace dos temporadas una gran polémica en este blog. Personalmente, yo sigo pensando que llegar entonces a una décima temporada y ahora a una decimosegunda ha sido más malo que bueno para la serie. No obstante, en líneas generales, esta temporada me ha gustado bastante porque ha explorado más a sus personajes, en especial la relación de Booth y Brennan, los roles que juegan dentro del equipo y cómo se complementan el uno al otro, y sólo puedo pensar que ojalá hubiera llegado esta temporada hace unos años cuando la serie todavía se encontraba en su máximo esplendor para que la hubiera cerrado en un momento perfecto.

Esta era la OTP de la que yo me enamoré.
Cuando la temporada 11 terminó y volví a verle la cara a Zack Addy, me emocioné, no lo voy a negar, pues el caso del caníbal Gormogon fue parte de los años dorados de Bones, de las mejores tramas de la serie. Pensé que recuperar a ese personaje para una temporada final podía ser muy interesante, sobre todo teniendo en cuenta que se suponía que estaba loco. No esperé en ningún momento que las cosas se volverían de la manera que se han desarrollado a lo largo de la temporada 12, sino que pensé que Zack llegaría como el enemigo final de la serie, loco de remate porque sus amigos se habían olvidado de que estaba en un psiquiátrico y ni siquiera lo visitaban (es cierto que deberían, al menos, haber hecho aparecer al personaje en alguna ocasión para que la audiencia supiera que seguía vivo aunque encerrado). Sin embargo, su vuelta ha sido para hacer justicia a un personaje del que se deshicieron muy rápido teniendo en cuenta la gran relevancia que tenía en las vidas de todos los miembros del laboratorio, para intentar desmentir su culpabilidad como ayudante del caníbal y de un nuevo asesinato cometido presuntamente por él.


Esta trama, a priori, pensé que ocuparía toda la temporada, que se centrarían en investigar antiguas y nuevas pruebas para exonerarlo, para librarlo de la cadena perpetua, pero ha sido todo lo contrario: ha sido una trama secundaria que se han limitado a nombrar de tanto en tanto y que han resuelto con pinzas y rapidito. De todos modos, al menos le ha dado un final más digno al personaje de Zack que el dejarlo en una celda sin volver a nombrarlo más, aunque hubiera preferido que le hubieran dado una mayor relevancia a su caso. Por el contrario, han tenido tiempo de hacer capítulos independientes y de centrarse en una trama relacionada con Booth y su pasado que, sorprendentemente, al final me ha parecido hasta emocionante, y que ha conseguido que todos se replantearan su futuro, lo que querían hacer y no, y que vieran cuáles eran sus prioridades en la vida. Esto se ha notado en especial en Brennan que con su poca capacidad de analizar sus sentimientos y sensaciones, ha llegado a plantearse si realmente seguía teniendo pasión por su trabajo.

Los últimos dos capítulos de la serie han sido, para mí, lo mejor de la temporada. Hacía mucho tiempo que la serie no me mantenía en vilo y estos dos capítulos lo han conseguido. Recurrir a antiguos enemigos del pasado que salen de debajo de las piedras es un recurso muy utilizado en las series de este tipo, pero creo que en esta ocasión ha sido un acierto. Está claro que tener a un asesino pisándoles los talones es algo común en la vida de Brennan y Booth, pero en esta ocasión, el frenetismo y dramatismo de la historia me han llevado a entusiasmarme con la trama.



El final de Bones ha sido muy emotivo, lleno de recuerdos a antiguas tramas, a símbolos y objetos del pasado, a buenos y malos momentos; lleno de escenas compartidas entre los personajes, cerrando antiguas heridas y creando el nuevo camino que van a seguir sus vidas después de que el Jeffersonian volara literalmente por los aires. Cam y Arastoo casados y adoptando a tres hijos, el bebé de Angela y Hodgins, y éste último siendo coronado Rey del laboratorio, como siempre quiso... También ha traído de vuelta a todos los personajes, tanto a los más esporádicos, como a los que han pasado horas trabajando en el laboratorio durante todos estos años (casi lloro cuando recuerdan a Vincent y a Sweets, las muertes mas dolorosas de toda la serie) y ha sido un reconocimiento a la gran labor que Brennan ha realizado con sus muchos becarios. Aunque muchas veces sea pedante, Brennan es un personaje muy especial y haberla visto desprovista de toda su identidad con la pérdida de sus capacidades y destrozada por la muerte de su padre, ha permitido verla más como una humana que como el robot sabelotodo que siempre aparenta ser.


El final de Bones, aunque tarde, me ha gustado mucho. Es una forma de dejar en el aire la esperanza de que sus personajes volverán al Jeffersonian en unos meses, o que iniciarán una nueva vida, una nueva familia o un nuevo proyecto, pero de saber que los dejamos felices. Después de todos estos años, no puedo negar que me da algo de pena que Bones termine, pero era un final más que necesario para una historia que, en general, poco más tenía que contar. Me llevo un buen sabor de boca de esta temporada, e intentaré recordar Bones con cariño por los buenos momentos que fue dejando a su paso y olvidar sus últimos defectos. ¡Hasta siempre Bones!

¿Y vosotros? ¿Echaréis de menos Bones? ¿Qué os pareció el final de la serie? Podéis dejar cualquier comentario un poquito más abajo.


Doralicia (@Doralais)

Crítica Del 1x09 "Self Condemned" De The Good Fight: Hypothetically He's Back

$
0
0
Falta menos de una semana para la season finale de The Good Fight– con una segunda ya en mente – y, esperemos, para conocer la respuesta a algunas de nuestras preguntas. Las cosas por Chicago siguen complicándose para algunas de nuestras protagonistas. Si quieres enterarte de lo que ha pasado, no dudes en seguir leyendo

Me parto xD
No puedo negaros una cosa y es que mi hype por este episodio estaba bastante arriba por un único nombre – lo siento, Jane Lynch –: Colin Sweeney. La vuelta de mi cliente favorito ha sido el combustible para que yo me lo pase pipa viéndole un año después de los acontecimientos de The Good Wife. No estuvo en la última temporada de esta, cosa que eché muchísimo de menos, pero tenerle de vuelta es lo mejor que me ha pasado en lo que llevamos de serie. Colin sigue siendo un troublemaker, un tipo excéntrico y juguetón que no puede estarse quieto. El caso en sí me ha dado un poco igual porque Dylan Baker – a sus pies; ¡qué pedazo de actor y cómo le quiero! – sigue robando la pantalla cada vez que aparece. Sí, tenemos otro caso de brutalidad policial que implica a Sweeney. Si lo pensáis fríamente, en estos diez episodios nos hemos movido por un rango muy restringido de casos: brutalidad policial, Chumhum (blancos ricos que se ríen de sus abogados), un caso de presuntos abusos que al final no fue, el caso Rindell como tal… Entiendo que en veinte episodios, como en el caso de TGW, hubiese una mayor diversidad pero se puede trasladar a los diez de The Good Fight y sin meter relleno, como pasaba en la serie madre. Se me está haciendo cansino ver lo mismo y más si tampoco es que avancemos gran cosa en la trama. Colin Sweeney ha sido todo lo que quería y necesitaba, pero venimos de un capítulo donde la guerra civil en Reddick, Boseman & Kolstad acababa de comenzar y… lo han cortado. ¿Lo van a dejar para el final de temporada o ya para la siguiente? ¿Con un periodo de tiempo tan largo, en el caso de la segunda opción, nos va a seguir interesando esta división del bufete, táctica ya más que manida por parte de la serie original? Tengo mis serias dudas. Siguiendo con Sweeney, tengo que decir tres cosas. La primera es que ha mencionado a Alicia– no podía coger su caso. ¿Qué andará haciendo con su vida? – y el momento en el que se ha dirigido a Barbara me ha recordado muchísimo a cuando hablaba con Florrick. Tengo los feelings a flor de piel con este señor – no os podéis ni imaginar lo mucho que le quiero –. Segundo: ¿qué ha pasado con Renata?¿Ya se ha divorciado de ella? Anda que las fiestas que este se trae con drogas y sexo de por medio… Habría que verlas para salir huyendo. Tercero: ¡¿embajador en el Vaticano?! Por favor, ¡spin-off para Colin Sweeney si eso ocurre! El diablo en persona en el Vaticano. ME MUERO. Ay, Colin, cómo te echaba de menos en mi vida. Ojalá vuelvas.

¡Qué mona, por favor! ♥.♥
Este episodio ha estado más centrado en Maia, quien se ha reunido con una agente del FBI, Madeline Starkey, interpretada por Jane Lynch, y Lucca, quien es ¿su abogada? ¿Qué pasó con la anterior, la han echado, se le ha acabado el contrato, los King han decidido cortar por lo sano? ¿Qué es esto? El caso es que Starkey ha jugado bastante bien al intentar confundir a Maia en más de una ocasión y hacerla sentir bastante incómoda. Que te pregunten por cosas de hace nueve años es una gran presión, sobre todo porque ni vosotros, queridos lectores, os acordaríais de qué hicisteis si quiera hace una semana – ni yo, os lo aseguro –, así que estaríamos todos un poquito en la mierda. Por lo tanto, comprendo y simpatizo con Maia. Sin embargo, ya vamos viendo cosas raras. Maia notaba que algo se estaba quemando pero nunca fue más allá, se contentó con las respuestas que su padre, principalmente, le daba. Puede ser por la inocencia de la juventud, porque su mente estaba a otras cosas, no indagase más, pero algo debió pasar en su cabeza para que no le dijese nada a Henry sobre la inversión que querían hacer los padres de Amy. La “traición” a Amy le pesa bastante ahora mismo y con cierta razón, dado que es su novia y le mintió, pero debe haber una razón por la  que no se ha cuestionado nunca sobre por qué no se lo contó a su padre. La sensación que me da sobre Maia y la fundación es que realmente ella no estaba muy involucrada, sino que eran sus padres quienes manejaban todo y ella sólo firmaba los papeles que le daban. Esta institución nació con muy buenas intenciones, pero estas desaparecieron del mapa en cuanto los padres de ella se dieron cuenta del negocio tan lucrativo que tenían entre manos. Si lo expandimos, mi sensación es que Maia es una hija única muy querida involucrada en la familia pero, al mismo tiempo, muy ausente. Si no, no me explico cómo tampoco se olía nada o nunca le ha dado por mirar los cajones. ¿Demasiado inocente? ¿Hay gente de 25 años tan inocente? Sin duda alguna, Maia – aunque me duela – necesita un par de bofetones para espabilar porque si no se la van a comer con patatas. Ya los está recibiendo por todas partes, sin comerlo ni beberlo, y espero que la hagan un poco más lista y más echada para adelante porque la noto muy paradita. Otra razón puede ser que sus padres sean merecedores del Oscar a mejor actor y actriz del año, porque esconder todos los problemas ha debido de ser para darles el premio. Al final, entre jugada y jugada, supuestamente Maia miente a Starkey, por lo que el tratopor el que “todo lo que digas no va a ir en tu contra”se anulayRindell va a ser investigada por el fiscal del Estado. Me da una pena tremenda porque, en el fondo, es una chiquilla que acaba de obtener su título como abogada y estaba empezando a trabajar. Esto puede ir dos caminos: uno muy bueno en el que todo se medio arregle y ella espabile, sin perder su bondad; o por uno muy malo donde, uno, también se medio arregle todo y se convierta en una cínica como Alicia Florrick, o dos, todo se vaya a la mierda y acabe en la cárcel. Esto último sería lo sorprendente y lo que haría que The Good Fight se desvirtuase un poco de The Good Wife. Una de mis quejas es que, aunque esté bien beber de la serie madre, también hay que saber forjar una identidad propia, desvinculándose en ciertos momentos y tomando un timón propio. TGF lo ha hecho en cuanto a que contamos con tres personajes femeninos protagonistas en vez de uno solo, tenemos un bufete integrado por afroamericanos, nuevos personajes…, pero en otros aspectos continúa ciertos caminos ya vistos y que pueden resultar repetitivos. Espero que la season finale nos sorprenda.

¡Qué monas! Me gusta el tándem que forman
Otra cosa con la que no se ha avanzado en este episodio es la no relación entre Lucca y Colin, a quien no hemos visto junto a Marissa. Ambos personajes han estado fuera de combate. Me da a mí que lo van a dejar para la finale también y ahí va a haber una marabunta de temas, tramas y personajes que nos va a volver locos. Tenía ganas de saber qué va a pasar entre Lucca y Colin, quienes me están quitando la vida poco a poco, pero vamos a tener que esperar una semana más. En cuanto a Lucca, ha estado estupenda ayudando a Maia. Starkey se le ha metido debajo de la piel y Quinn ha sabido cómo jugar a su juego. Menos mal porque veía que esto terminaba peor de lo que lo ha hecho.

En general, este episodio me ha parecido más un tránsito hacia el final de la temporada, donde todo parece que va a explotar. Y no estoy muy segura de que eso sea bueno. Con todo lo que tienen que contar, me da que el episodio va a durar casi una hora o sus 50 minutos no se los quita nadie. No sólo tendrán que cerrar tramas, sino también abrir otras nuevas de cara a la segunda temporada, a no ser que dejen alguna abierta ya de esta y ya veréis la risa que nos va a dar – totalmente irónico esto último –. Este capítulo, en particular, no me ha dicho gran cosa; tiene dos puntos interesantes (la vuelta de Sweeney y la reunión de Maia) pero no mucho más. Como llevo diciendo semanas, me sigue faltando algo en esta serie, algún tipo de profundización con chicha. En este caso lo hemos tenido con Maia, pero realmente no hemos sacado mucho en claro porque ni ella misma se acuerda bien de lo que pasó, por lo que, haciendo balance, me quedo con nada.

Por mi parte nada más excepto animaros a que dejéis vuestros pensamientos, sentimientos o cualquier cosa que se os haya pasado por la cabeza al ver el episodio. Siempre intento sacar un hueco para responder vuestros comentarios, que sé que es una cosa que cuesta bastante. Os lo agradezco de veras.

¡Hasta la semana que viene!

P.D: Mamá Rindell lleva años tirándose a Uncle Jax. Esto se pone turbio.

P.D.D: ¿Adrian sugiriéndole a Diane que vayan a cenar alguna vez? ¿Esto es una hipotética cita? Uyuyuy.

Irene Galindo (@MissSkarsgard) 

¿Son necesarias las escenas más duras de 13 Reasons Why?

$
0
0

Supe de la existencia de 13 Reasons Why como la mayoría de nosotros: cuando, un buen día, sin previo aviso, las redes sociales comenzaron a arder comentando lo buena que era la nueva apuesta de Netflix. Y lo cierto es que la gente daba tanto por saco con ella (pero tanto), y la premisa me parecía tan original, que me picó la curiosidad por verla. Sabía desde el principio que iba a ser una historia dura, triste, pero quizá de forma un tanto inconsciente (tal vez por el tono juvenil, por ser adolescentes los protagonistas) esperaba que fuera a ser una serie medianamente "suave", moderada. ¡Pero qué moderada ni qué ocho cuartos! Esto, señores, ha sido un DRAMÓN mayúsculo.


Resulta curioso ver 13 Reasons Why. Y digo curioso porque te genera una sensación muy particular de desesperanza, de "agobio", durante su visionado: desde el principio sabes que no va a haber ningún final feliz, ninguna solución mágica, y que los problemas van a seguir creciendo sin remedio para Hannah Baker. El relato se vuelve más y más oscuro durante su recta final, llegando a extremos que son realmente difíciles de digerir. Me estoy refiriendo a esas "escenas duras" a las que hago alusión en la pregunta que da forma al título de este artículo; en concreto -y sin entrar demasiado en spoilers-, a varias escenas muy gráficas de violación, y a una del mismo suicidio de Hannah.

Tratar casos de violación en ficción siempre es un tema doloroso y muy delicado. En mi opinión, hay dos formas de enfocar este tema: una buena, y una mala. En esa maravilla que es Sweet Vicious, por ejemplo, se tratan, efectivamente, este tipo de temas tan duros, pero la serie lo hace con tanta sensibilidad, con tanta intencionalidad crítica y de denuncia social, que no puedes más que aplaudirla. Hay escenas fuertes, pero honestas, necesarias para mostrar el terror de esas situaciones y que podamos entender el dolor del personaje. Outlander y la segunda temporada de American Crime, por seguir poniendo buenos ejemplos, también tratan estos conflictos con muchísima sensibilidad e inteligencia. En el otro extremo, en el de cómo NO tratar las violaciones, tendríamos a otras más torpes y machunas como Game of Thrones.


Las escenas de violación en 13 Reasons Why son, por supuesto, durísimas, muy gráficas, pero las considero justificadas. La serie lanza un mensaje potentísimo, que puede recordar al de Sweet Vicious, sobre cómo el sistema no protege ni apoya a las mujeres, criticando conceptos como el de la masculinidad tóxica y la forma en que perjudica a las mujeres -e incluso a los propios hombres por las presiones que genera en ellos, caso del personaje de Alex-. La escena del suicidio, por otra parte, ya es otro cantar...

He estado leyendo mucho sobre el tema, tratando de forjarme una opinión. En esta entrevista a 'EW', el creador de la serie, Brian Yorkey, se justifica: "trabajamos muy duro para no ser gratuitos, pero queríamos que [la escena] fuese muy dura de ver para dejar claro que no hay nada, de ninguna forma, que haga que el suicidio valga la pena". Un poco lo mismo en la línea de lo que explicaba antes: es difícil de ver, pero necesario, para mostrar lo horrible que es el suicidio, que no hay nada "glamuroso" en ello. Sin embargo, en ese mismo artículo de 'EW', Christine Moutier, directora de la American Foundation for Suicide Prevention, afirma también -aunque sin haber visto la serie, un poco chochona-, que "mostrar escenas tan gráficas sobre el suicidio es peligroso por el efecto contagio que puede generar". Estamos hablando, por tanto, de un tema muy, muy delicado.

Este tuit también sintetiza bastante bien otro de los grandes "problemas"-o, como mínimo, puntos más delicados, más mejorables-, de 13 Reasons Why:


No creo que 13 Reasons Why haya sido, por tanto, perfecta ni mucho menos: podríamos lanzarnos a debatir si no habría sido más aconsejable que hiciera ciertas cosas de una u otra manera. Pero en lo que no hay duda es que ha sido una buenísima serie que ha hablado bastante bien -salvando los "peros"- de problemas tan graves como el machismo, la homofobia, la masculinidad tóxica, el acoso escolar, la importancia de respetar el dolor ajeno y, cómo no, el suicidio, un gran tabú social pero que es, increíblemente, la décima causa de muerte en Estados Unidos. Tal vez haya pecado de algo "simple" a la hora de abordarlo, pero... ¿no es bellísimo el mensaje? ¿Lo importante que es apoyar a los demás, quererles, estar ahí para ellos?

Ha sido una serie dura, pero también muy gratificante de ver. Porque 13 Reasons Why ha contado historias que necesitaban ser contadas.


PD: Acabemos estas líneas con un poquito de humor, que nunca viene mal... ¿qué pasaría si Hannah Baker hubiera sido una choni furiosa?




Isidro López (@Drolope)

Las 13 razones de Hannah Baker

$
0
0
¡Hola, amigos! Espero que todos estéis pasando una buena Semana Santa, llena de noches sin dormir a causa de capítulos que terminar y contando los días para que llegue la séptima temporada de Game of Thrones (yo lo estoy haciendo), pero no vengo a hablar de lo p*** ama que es Cersei (que podría), hoy vengo a hablar del fenómeno del que todo el mundo habla, de la serie que está revolucionando Twitter y el mundo en general. Hoy os comento 13 Reasons Why y que me ha parecido su final (o su final de temporada, no sabe nada todavía). ¡Comenzamos!

Hace pocos meses comencé a escuchar noticias y rumores sobre esta serie, todo el mundo hablaba de la adaptación del libro de Jay Asher que iba a hacer Netflix. Yo, en ese momento, apenas le dí importancia a las informaciones que iban y venían y no tenía pensado verla, pero a raíz de varias personas que me la recomendaron decidí darle una oportunidad. Y no puedo estar más contento de habérsela dado.

Netflix lo ha vuelto a hacer. Tenemos que pararnos a pensar un momento en la cantidad de grandes producciones que nos está dando esta distribuidora, porque está comenzando a ser mejor que muchos canales de televisión: Orange is the New Black, House of Cards, Stranger Things, Narcos... madre mía, Netflix. Gracias por ser como eres.

Una de las cosas buenas que tiene esta serie es que no te aburres en ningún momento. Eso es algo que no se puede decir de todas las series (hola, The Walking Dead). Cada capítulo pertenece a la historia de Hannah Baker con uno de los personajes, por lo que en cada episodio descubres cosas nuevas acerca de la vida de la protagonista y las relaciones que ha mantenido en el instituto con cada uno de sus compañeros. Eso sí, tengo que decir que cada capítulo es más fuerte que el anterior, por lo menos en mi opinión, porque vamos, tú llegas al episodio 9 o al 12 y lo que quieres hacer es irte a llorar a un rincón o pegar a alguien (y lo digo en serio, casi me pongo a romper cosas cuando vi lo que pasaba en ambos capítulos).

Aunque la serie se cuente desde la perspectiva de Clay Jensen, la verdadera protagonista es Hannah Baker y eso lo sabemos todos. Tengo que decir que muchas veces me parecía que Hannah era un poco drama queen, que hacía una montaña de un grano de arena y que veía las cosas de una manera muy extremista. Pero, aparte de todo eso, me parece el mejor personaje de la serie junto con Jessica (además, es la hija de Addison Montgomery, solo con eso ya me tiene ganado <3). Con sus cintas, la hija de los Baker consigue que sigamos su camino de dolor y acoso escolar que la llevó a ese final que ninguno queríamos que llegara. Todos sabíamos que íbamos a llegar a ese punto, pero creo que a la mayoría de nosotros nos dolió verla suicidándose en la bañera. Fue como si nosotros también hubiésemos perdido a una amiga, como si la conociésemos de toda la vida. Hanna, we love you.

A raíz de Hannah, debo hablar un poco de los temas sociales que abarca la serie, como son el acoso escolar y el suicidio. Creo que lo ha hecho Netflix al adaptar un libro que trata sobre temas tan duros como estos es de admirar, y plantearlo de una manera bastante dura como esta es algo que espero que ayude a concienciar mucho más a la gente y, sobre todo, a los jóvenes de hoy en día, aunque es bastante triste que estemos en una sociedad en la que haga falta una serie para que se consiga abrir los ojos sobre este tema. Todos en algún momento hemos sido Hannah y todos en algún momento hemos sido una razón - y, por cierto, mi compañero Isidro sigue haciendo hincapié en la crítica social que la serie hace a estos temas tan duros, podéis leerle aquí

Después de este momento de seriedad, vamos a hablar de Clay, porque mira, no sé qué le veis a este chaval. Si yo puedo entender que os guste, es el personaje principal, la serie está en su perspectiva, es un personaje bien creado y no se puede negar, pero a mí me parece soso. Muy soso. Me parece tan cliché y tópico el personaje de Jensen que hay momentos en los que no le soporto. Además, había veces que era insoportable y plano hasta más no poder. Eso sí, como digo una cosa digo la otra y fangirleo muchísimo su relación con Hannah. LA ESCENA DEL BAILE JODER. ESA ESCENA ES MI VIDA <3

En toda serie de televisión que se precie debe haber un personaje que se roba la escena en la que se encuentra, ese típico personaje que no puedes dejar de mirar desde el momento en el que aparece en el plano. Y ese personaje en 13 Reasons Why es Tony. El personaje de Tony es lo contrario al de Clay en todos los aspectos: un personaje nada tópico en mi opinión, no sabes lo que esperar de él y hay veces que no sabes de qué palo va (en todos los sentidos). Es agradable ver un personaje así, es un soplo de aire fresco. Más personajes como el de Tony, gracias.

Ha llegado el momento de hablar de dos de los personajes que más me han gustado: Jessica y Justin. La primera me parece el personaje mejor construido de toda la serie. Desde su primera aparición en la serie hasta la última, pasando por esa dolorosa escena del 1x09 de la cual no voy a hablar para no hacer spoiler, pero que a todos nos dolió en el alma. Jessica es uno de esos personajes que se supone que son malos, pero por los que también sientes pena, por lo menos en mi caso y creo que podría ser mi personaje favorito. Sin lugar a dudas.

Y por otro lado tenemos a su "novio", Justin, al cual todos odiamos desde el primer episodio, pero que según han ido avanzando en la trama hemos visto que su personalidad arrogante no es más que un escudo tras el cual se ve un personaje mucho más frágil y delicado, despreciado por su madre y en ocasiones por sus amigos, más solo que la una, vaya. Me gustan estos personajes que te los presentan como una cosa y terminan siendo otra. Punto positivo para 13 Reasons Why.

Respecto al final, tengo que decir que me ha parecido un final muy... no sé cómo explicar la verdad. Han cerrado las cintas de Hannah y en ese sentido todo ha quedado técnicamente resuelto, pero en mi opinión han dejado muchísimos cabos sueltos (no los voy a decir por no hacer spoiler, pero sabéis a que me refiero). Además, en un primer momento se pretendía no hacer más de una temporada, así que... ¿tenían pensado con tantos interrogantes para siempre? Eso sería muy cruel.

Lo que sí ha dicho Jay Asher es que se están replanteando realizar una segunda temporada debido al éxito y el hype que ha tenido la serie, lo cual es completamente normal. Netflix ha conseguido concienciar a la sociedad y tratar un tema tan serio como el bullying con una adaptación bastante buena que te deja con ganas de más y con la que acabarás en un mar de lágrimas. Cualquier persona que entra en Twitter sabe cual es la serie de moda y no es para menos. Llorarás más que con el final de Friends (bueno a lo mejor no, pero ahí, ahí).

Y bueno, amigos, esto ha sido todo por hoy. La verdad es que las trece razones de Hannah Baker me han dejado con ganas de más. Y ahora que me acuerdo, debo reivindicar el personaje de Skye, que me parece un personaje maravilloso al que no se le ha dado el suficiente protagonismo y que puede dar muchísimo más de sí. Espero que si hay segunda temporada se le de más visibilidad por favor, porque esa señorita se lo merece. Y a vosotros, ¿qué os ha parecido el final de 13 Reasons Why? ¿Y la serie en general? ¿Cuál es vuestro personaje favorito?




Crítica del 6x16 "Mother's little helper" y 6x17 "Awake" de Once Upon a Time: ¿La batalla final?

$
0
0

La semana pasada, en el blog estuvimos liadillos y no tuvisteis nuestro habitual análisis del capítulo de Once Upon a Time. ¡Pero no os preocupéis! Como nos encontramos ante una presumible (aunque no confirmada) última temporada de la serie, no queremos dejar pasar la oportunidad de reírnos un poco de las gracias y desgracias de la serie, así que esta semana tenéis aquí una ración doble de reviews con todo el cariño de Isidro y mío. ¿Nos acompañáis?

6x16 "Mother's little helper"

Este episodio ha tenido algunos puntazos, alguna escena simpática y divertida (la araña lo moló todo, lo admito), pero seamos honestos: no ha sido especialmente memorable. Cuando Once Upon a Time se empeña con una idea, no hay quien la saque de ella. Tras el 6x15 "A Wondrous Place" centrado en las dudas de Jasmine, en ese miedo que impedía que ella se convirtiera en un auténtico héroe, hemos tenido otros cuarenta minutos centrados en otro "cobarde" que quería ser un héroe - esta vez, eso sí, sin mucho éxito.

La trama de Gideon no acaba de gustarme. No me disgusta del todo como villano, pero tampoco acabo de verle con la fuerza, con la presencia, que esperaría del hijo de Rumple y Belle. Por una parte, me molesta mucho el pensar que los guionistas puedan usar esta trama para acercar y, eventualmente, juntar de nuevo a Belle con Rumple -¿habría algo de peor gusto, más tóxico que eso?- y, por otra, me parece poco interesante y repetitivo todo este tema de "nací bueno, pero las circunstancias me volvieron malvado". Este cuento ya lo hemos tenido mucho mejor desarrollado con Regina, con Hook...

ONCE UPON A HOOK NIVEL: EXTREMO.

¡Y tenemos movida con Henry! El niño querido de la serie -tan olvidado últimamente-, está comenzando a tener problemas con sus superpoderes de Escritor. Resulta que vienen con un precio, como la magia: y Henry, tiempo al tiempo, acabará sucumbiendo a ese inmenso poder que no puede controlar y se volverá loco. ¿Sacado de la manga? ¿Trama innecesaria? Sí, como la mayoría, pero mirad, lo cierto es que yo me alegro por el chico, que esta temporada nos lo tienen aburridísimo sin nada que hacer al pobre. A ver si esto le vuelve a dar relevancia.

Poco más que decir de este episodio, salvo que Emma es la peor estratega del mundo (su superpoder, el que detecta cuando alguien miente, hace aguas por todas partes) y demasiado confiada. ¿No era mucho más astuta, feroz e intuitiva las primeras temporadas, o es cosa mía? ¿Cómo perdonó tan fácilmente a Gideon? También añadir que no me gusta cómo están llevando al personaje de Belle, colocándola a la sombra de Rumple y manteniéndola en un plano tan secundario, sin apenas contacto con los demás. El Hada Oscura, por suerte, sí está siendo una villana más a la altura...

6x17 "Awake"

Once Upon a Time se caracteriza por su continua introducción de tramas a presión en un pasado en el que ya no caben más cosas -de verdad que es imposible que te hayan pasado tantas cosas en tu vida-. Así, en este capítulo han logrado introducir todavía una trama más en los años de la maldición previos (y a la vez bastante desconocidos) a la llegada de Emma a Storybrooke, lo cual ha sido interesante, aunque no ha roto ningún esquema ni ha utilizado ningún recurso que no conociéramos ya. De todos modos, no sé si soy yo, pero ese flashback me ha hecho sentir un poquito el espíritu de aquella primera temporada tan maravillosa, y me ha dado incluso nostalgia...


El principal miedo que tienen nuestros protagonistas ahora mismo es que no esté toda la familia para el evento del año: la batalla final de Emma contra la Black Fairy. Me hace mucha gracia que le den tanta importancia al asunto, como si se fueran a perder su graduación o algo, y que hagan lo impensable para poder acudir todos a animar a la salvadora. Los guionistas, en este sentido, se han sacado una solución algo chapucera de la manga: una flor mágica que es el remedio de todos sus males. Pero todos, todos. Y Emma tendrá todo el apoyo del mundo en ese día tan importante.

La improvisación del flashback de esta semana me ha desubicado bastante. Por un momento he sido incapaz de situar la historia que pretendían contarnos en una línea temporal lógica si es que eso existe en esta serie, pero finalmente todo ha cobrado sentido y se ha arreglado con un par de pociones. Me ha parecido bonito que los Charming tuvieran la oportunidad de ver a Emma en su infancia (aunque fuera a través de una puerta a lo Monstruos S.A.), y también algo triste ver sus caras al no poder estar con su hija. No obstante, me parece muy repetitivo que vuelvan a contar el rollito de que ellos, tan buenos, siempre piensan en el bien de los demás antes que el suyo, y que nos cuelen otro "I will always find you". Que sí, que lo sabemos, que sois súper justos y siempre os encontráis, no hace falta que nos lo restreguéis más por la cara. Pero claro, les era necesario recalcar que los Charming se habían sacrificado por el pueblo en el pasado para que pudieran sacarlos por fin entre todos de la maldición del sueño en la que se encontraban, lo cual, para mí, ha sido bastante cómico. ¿Que no podemos eliminar la maldición? ¡Pues nos la repartimos entre todos y nos echamos una siesta! Ingenioso cuanto menos.


Ciertamente no me sorprende que hayan despertado a los Charming ya, pues fue divertido al principio pero ya llevaban, en contra de lo que pensábamos, nada menos que 10 capítulos durmiendo por turnos, y algo tendrán que hacer ahora que se acaba la temporada porque. como digo, todos tienen que estar presentes para poder ver el último combate de Emma; incluso Hook. En este capítulo también hemos revivido la época de Neverland: las sombras, los Niños Perdidos, el recuerdo de Peter Pan y hasta una Princesa Tigrilla que quería salvar a Emma tanto como el resto de personajes. Clarísimo estaba que poco más iba a durar Hook separado de Emma. Es de pecado que continúen salvándole el pellejo una y otra vez, y ya no porque el personaje no me guste, que sí me gusta aunque los guionistas lo hayan convertido poco a poco en un personaje odioso, sino porque no es creíble (y además me enfada mucho que eso no lo permitieran con Robin Hood y lo repetiré por siempre). Así, Hook ha vuelto, ha podido prometerse con Emma (se ha anunciado que el capítulo musical del 7 de mayo va a ser la boda y ya me estoy riendo) y traerle la varita mágica con la que se supone debe acabar con la Black Fairy (¿nos fiamos de Tigrilla? ¿nadie se ha parado a pensar que puede ser mala?), y hasta ha recibido el perdón de Charming por cargarse a su padre. ¡A nadie le importan las mentiras en esta serie, así que todos a vivir felices! (Nótese la ironía). El regreso de Hook sólo ha sido posible gracias a Snow, que ha preferido que su hija tenga un futuro con el pirata a seguir despierta, con la certeza de que los salve en el futuro, como siempre hacen los unos por los otros. ¡Jopé, qué bonito! De verdad, me ha parecido bonito el gesto de Snow, no intento ser irónica; ha actuado como una madraza (no como con Neal, al que tienen abandonado a saber dónde).

Ya te dije que sí, GUAPO.
Por último, y con sinceridad, no sé qué esperar de la Black Fairy y Gideon y la verdad es que es una trama que tampoco me interesa en exceso aún teniendo en cuenta que la plantean como trama principal y que puede acarrear el final de Emma. Del hada todavía no me he formado una opinión sólida, y el muchacho me parece un villano tan poco imponente y tan lleno de dudas, que no me da la sensación de que haya que temerle. Además, Rumple y su familia han llegado a aburrirme tanto que ha llegado a darme igual  lo que les pase a todos. Triste, pero cierto.

En conclusiones...

Ahora que Once Upon a Time se encuentra en su (¿supuesta?) recta final, resulta indudable que está intentando mirar más que nunca a ese pasado brillante que nunca ha logrado emular completamente. Dos cosas criticaría de estos últimos episodios al respecto: por una parte, que el Captain Swan se haya convertido en la trama principal, dejando todas las demás en un plano secundario -ciertamente, esto NO formaba parte de la esencia original de la serie- y, por otra, que hicieran las cosas de esa forma con Robin, y ahora parezca que hayan resignado a Regina a no encontrar el amor... el amor para ella, quiero decir, no para su mitad malvada redimida.¿Es justo acabar la serie con ella soltera y los otros dos casándose? ¿Es de buen gusto? 

Todo se prepara para la Batalla Final. Tiene lógica. El símbolo supremo del mal en un épico desenlace contra el bien, contra la Salvadora; contra Emma. Si a eso le sumamos una boda, ya tenemos el típico final de ensueño de una serie de cuentos. Y puede que Once Upon a Time siga decepcionando, siga fallando, pero resulta fácil dejarse llevar por el encanto que aún conserva y prepararnos así para despedirla; porque, a pesar de todo, sigue siendo una serie que es difícil dejar de querer. Y quizá sea lo mejor acabarla ahora cuando todavía conserva algo de su magia, en lugar de continuar otra temporada y terminar por matarla del todo.

PD: Mientras tanto, en una realidad alternativa...



Isidro (@Drolope) y Doralicia (@Doralais)

Crítica Del 1x10 "Chaos" De The Good Fight: Not Only The Name Of A Theory

$
0
0
Finalmente ha llegado la season finale de The Good Fight. ¡Parece mentira! Durante diez semanas hemos visto cómo se desarrollaba el esperadísimo spin-offde The Good Wife y, ahora, nos toca reflexionar un poco sobre lo que hemos sido testigos. Si quieres enterarte de lo que ha pasado, no dudes en seguir leyendo.

BUSTED!
Empezando por el caso de esta semana, tenemos a un viejo conocido, Dylan Stack, a quien le asociamos con Bitcoin– gracias, The Good Wife, por enseñarme tanto – y Anonymous, aunque principalmente con la divisa virtual. Stack va en busca de la ayuda de Diane Lockhart dado que cree que le están teniendo una trampa. Supuestamente, ha aparecido un código en su portátil cuando este lo tiene bastante bien defendido de cualquier posible intruso – sospechoso –. Diane no duda en aceptar el caso y Adrian propone llevar el código al Departamento de Justicia a través de Lucca. Los del Departamento de Justicia, al conectar el pen drive, ven cómo el código se convierte en un malware, es decir, un virus informático que afecta a todo el sistema, por lo que el virus va a hacer de las suyas y lograr su propósito: que haya un apagón que afecte a toda la ciudad. WHAT. THE. FUCK?¿En serio la gente es tan inocente que se dedica a conectar pen drives ajenos sin antes tener algún tipo de seguridad o prevención? ¿No tienen a alguna persona, informática, por Dios bendito, que se dedique a tener un ordenador más preparado (mejor seguridad, que impida que el dispositivo al conectarse empiece a funcionar automáticamente, etc.) para este tipo de situaciones? ¿Este es el Departamento de Justicia o el de los Ineptos? ¡No se veía venir en absoluto! Si tenía que quedarme estupefacta con esta treta, va a ser que no. Siguiendo con el caso, detienen a Lucca por cooperar presuntamente con el hacker, que es lo último que nos faltaba en este episodio. Esto enciende la mecha de Maia y va a defender a ¿su amiga? y abogada con uñas y dientes. Lo que resulta sorprende– si hay algo verdaderamente sorprendente en este episodio – es que recurran a Felix Staples como salvador del caso, dado que crean una trampa – Staples queda en un restaurante chino con el hacker– y Dylan Stack no duda en ir directamente hacia ella. Ante esto sólo puedo preguntar una cosa: ¿qué cojones le está dando a todo el mundo con engañar a sus abogados? Primero Neil Gross y ahora este. ¿Qué mierdas es esto y a dónde vamos a llegar? ¿Dónde está lo interesante o el atractivo de esta artimaña? Si ya no me lo pareció con Neil Gross, un tío que ha salido bastantes veces y le puedes tener asco y/o cariño, fijaos con un pavo que lleva sin salir desde la cuarta temporada de The Good Wife y ya era alguien del que no te podías fiar mucho, ni para bien ni para mal. ¿Por qué esta recurrencia a algo que ya hemos visto? ¿Lo harán en algún momento con Colin Sweeney si vuelve a aparecer, porque ya es lo único que les queda? Si ya me quejaba en al anterior review de la poca variedad de casos, ni os digo con las tácticas de algunos clientes. Wow! Otra cosa al respecto de los clientes es que parece que todo el mundo va al mismo sitio, sobre todo los viejos conocidos. No sólo tienen a Chumhum como cliente y han aparecido por allí Stack, el reverendo Jeremiah y Colin Sweeney de forma casual. Si mal no escuché, también contaban con el Grupo Paisley, muy conocido en la quinta temporada de The Good Wife. ¿Estamos ante una casualidad – hell, no– o es que realmente no es un bufete de abogados sino un club y coinciden todos? O es una colección de cromos o están jugando al Pokémon Go pero con los clientes. Todavía no lo he resuelto. Quiero decir, no me quejo de ver a gente ya conocida, sino de que dé la maldita “casualidad” de que estén todos metidos en el mismo saco. No es creíble.¿Por qué no introducir a otros abogados de otros bufetes y que en Reddick, Boseman & Kolstad se enfrenten a estos clientes tan queridos por el público? No me parecería tan raro, in my opinion.

Final feliz... ¿por ahora?
Diane, al principio de esta temporada, lo pasó “mal”: se quedó sin su dinero de la jubilación – adiós casoplón en la viña francesa –, sin trabajo – y no hemos vuelto a ver a David Lee – pero su salvador, Adrian Boseman, le ofreció un curro y ya no lo volvió a pasar tan “mal”. La temporada de Diane ha sido irregular, inestable y, al mismo tiempo, insípida, si lo pensamos fríamente. Sí, tiene un armario increíble y le ha dado algún coscorrón a algún capullo – hola, Staples –, pero no la hemos visto avanzar gran cosa. ¿Es socia? Sí, pero tampoco está su nombre en el membrete – gracias a Dios, porque ya me rajo las venas –; es más, está en la junta directiva, lo cual no sé si era verdaderamente su objetivo o quiere llegar más alto. ¿Le van mejor las cosas? Suponemos que sí, porque su contribución de capital salió de la cuenta de Chumhum y ya no se ha preocupado más por irse a un cuchitril de casa de ¿80 metros cuadrados? – conozco a gente que vive en una de 45 y son cuatro personas, así que menos quejarse, por favor –. Su vida profesional va bastante bien y la personal… pues también. El único eslabón suelto que quedaba era Kurt. Ya dije en algún comentario que la situación estaba en un “ni contigo ni sin ti” y que es algo que debería de desvelar rápidamente. Diane recibe la llamada desde el hospital, donde le dicen que McVeigh ha tenido un accidente de coche y que están a punto de operarle, así que se va corriendo hacia allí. Con esa referencia al momento en el que visitó el hospital para saber de Will Gardner y encontrarse, posteriormente, que había fallecido – el hombre con un zapato sí y otro no –, se encuentra con Kurt quien, me da a mí que no ha pasado por el quirófano. Si fuese así, no se movería nada y se da la vuelta como un campeón. Diane se da cuenta de lo asustada que está, ya que pensaba que había muerto. Sin embargo, el momento reconciliación ocurre después. Ella ve un vídeo en el que Kurt interviene en el robo de un coche donde estaba metido un bebé. Y, cómo no, aquí caemos en el cliché barato: Lockhart se da cuenta de que su marido es un héroe salvador de bebés por el mundo y se le caen las bragas al suelo. Ya las tenía medio caídas, no vamos a negarlo, pero esto termina de arreglarlo. “Represento a gente sin escrúpulos y tú salvas niños”. Wow, la mujer que se siente culpable por su trabajo. Esto ya es algo que hemos visto tantas veces. Sí, son hijos de puta pero te dan dinero, que es lo que necesitas para que no te mudes a un cuchitril de 80 metros cuadrados y que no tengas que vender medio armario en Wallapop. No siempre se representa a buena gente pero, ¿qué vamos a hacerle? Lo siento, pero cada vez que se queja Diane o se hace la víctima no me la creo. Señora, diosa del Olimpo, usted ha dado un por culo extremo durante varios años con que si un bufete de mujeres, que si me quedo en la calle, que si no puedo ser una simple consejera y traer a Chumhum, bla, bla, bla, como para que me venga con estas. ¡Ya está bien! Quéjese de otra cosa pero no de su vida porque le va bastante bien dentro de lo que cabe.

La que le viene a la pobre
Quien se debería de quejar es Maia, que está en la mierda más absoluta. Rindell ya empezó el día mal su evaluación por parte de Adrian y Barbara – con referencia incluida a como la conocimos al principio de la temporada –. Reconocen su inteligencia– que ya parece mucho pedir en este mundo de Trump, porque suelen reconocer más tus largas piernas y tus turgentes pechos que tu cerebro – pero que le falta atrevimiento. Es decir, lo que ya había comentado por aquí: Maia, tienes que espabilarte o te van a comer los demás. Rindell parece despertarse con la detención de Lucca y decide ayudar a Adrian en el juzgado, a pesar de que en un principio él se negase. Algo que me ha gustado muchísimo es que Maia, por fin, ha sacado carácter en los tribunales, ha peleado por lo que cree y por su ¿amiga?, lo que ha sorprendido a Adriany, a lo mejor, así tiene una mejor opinión de ella. Sin embargo, las cosas no iban a ir tan bien y el día ha terminado de la peor manera. Henry Rindell se enfrenta a una condena de 35 años de cárcel. El señor, que ya podíamos intuir de qué pie cojeaba – del suyo propio, obviamente –, opta por ponerse en contacto con un amigo y preparar su huida del país. Pero llega una noticia inesperada: la fiscalía tiene pruebas en contra de su hija. Para salvarla, tiene que aceptar el acuerdo de los 35 años o ella irá 5 a la cárcel.Y, haciendo balance, ¿por dónde tira la cabra? Al monte, es decir, pirarse del país y que Maia cargue con las consecuencias porque, queridos lectores, entre 35 y 5 años, pesan más esos 35. Supuestamente, el giro de guion de este episodio era el arresto de Maia mientras se encontraba con Lucca tomándose una copa de vino, pero se veía venir desde lejos. Me explico. Ya vi en Twitter cómo TVLine decía que los King explicaban este giro y me pregunté: ¿dónde está? ¿Era que Rindell se la jugase a su hija a pesar de los lloros? Parece ser que sí pero si partimos de la base de que jamás me he creído a este hombre, entonces el giro ni existe en mi caso. Era la detención de Maia o que se liase con Lucca rodeadas de velas y vino. Lo que sí es cierto es que puede dar lugar a una segunda temporada interesante y más alejada de The Good Wife, in my opinion, lo que sería un acierto. Una cosa que me perturba de Henry Rindell es que le dice a su mujer que está contento de haberse casado con ella. ¿Ha perdonado a su mujer? ¿No le molesta que haya estado tirándose a su hermano durante nueve años? Perdonadme, pero es algo que no me cabe en la cabeza. “Teníamos problemas, pero no queríamos preocuparte con ellos”, le dice Lenore a su hija. Lo de este matrimonio cada día lo entiendo menos. Tampoco entiendo que ahora, justo AHORA, Henry reconozca que es culpable porque ¿ha visto las pruebas?¡¿Perdona?! ¿No sabes si eres culpable o no de un delito que has cometido o no hasta que has visto las pruebas? ¡¿Pero tú eres tonto o en tu casa no hay botijo?! O este señor es un inconsciente o un palurdo monumental. Todavía no me decido. Lo que está claro es que, aunque llore por el daño que le va a causar a su familia – según los King –, Henry Rindell se quiere a sí mismo mucho más que a su esposa y a su hija. Es un cabrón, sí, pero no me sorprende. Ahora Maia está viendo cómo su vida se va un poco a la mierda, pero esperemos que salga pronto del socavón en el que está. ¿Tres meses aburridos? ¡Ja!

♥ Os quiero ♥
Pasamos de Maia a Lucca, quien está en una situación “rara” con Colin. A estos dos los quiero mucho porque, primero, son dos personas profesionales que lo dan todo con sus casos y como personas me cae bien, y segundo, porque son muy cuquis y me encantaba su relación de “somos follamigos pero, en el fondo, nos queremos mucho aunque tenemos problemas”. En este episodio, la relación ha sido de lo más cordial y a ella le ha extrañado que él no hubiese llamado insistiendo. Creo que Colin es un tío muy respetuoso y que no te va a dar el coñazo cuando tú ya has dicho “no” – este será uno de los pocos hombres que conocen el significado de esa palabra. ¡Menos mal! –, así que ese es otro detalle que me encanta de él. Sobre Morello, hay que decir que le hemos visto diciendo que dimite, pero su jefe le ha dado la vuelta a la tortilla al ascenderle a fiscal, por lo que no sabemos realmente cómo han quedado las cosas. Por lo que hemos visto, sigue en su puesto de trabajo pero podría ser hasta terminar con el caso. Este es uno de los muchos misterios que tendremos que resolver en la siguiente temporada junto con la relación de estos dos, que me tiene en un sinvivir.

En general, la season finale no ha estado mal. Me equivoqué con mi predicción de que tendría mínimo 50 minutos; no llega ni a eso, y lo que han hecho ha sido, más que solucionar cosas, enredarlas. Me quedo con Barbara por primera vez en el juzgado – ¡ya era hora, joder! Os ha costado – y con Jay ayudando a Marissa a prepararse para sacarse la licencia de investigadora, lo cual me hace comprar más su amistad. Sin embargo, lo de Marissa siendo investigadora me parece rizar un poco el rizo. ¿Otra Kalinda pero sin ser Kalinda en absoluto? ¿Están haciendo esto para que también haya una mujer en otro cargo que no sea secretaria ni abogada y aumentar la diversidad de perfiles? ¿O es porque Marissa sirve para todo y es así de versátil la muchacha? No sé, no termina de encajarme. Y, como vaticiné, hay cosas que se han quedado en el tintero como la guerra civil en el bufete, algún posible sentimiento de Adrian hacia Diane o, lo más interesante de todo, el misterio de Lenore Rindell, que no sabemos muy bien a qué juega esta mujer. Lo que sí nos han adelantado es ese momento de Diane y Adrian juntos en el despacho de él mientras Barbara está en el suyo a oscuras. Tampoco me pillaría de sorpresa si Barbara se sintiese apartada por la presencia de Lockhart; creo que ha visto su latifundio amenazado y es comprensible. Diane ha ido a por todas y Barbara, aunque se ha mostrado comprensiva, no le ha hecho ni puta gracia – a mí tampoco, así que te apoyo a tope –, pero ella es muy educada y se mantiene firme.

Sobre la temporada en general, me ha parecido una introducción y una muestra de lo que va a ser esta serie. Me ha gustado pero tampoco bebo los vientos por ella y tengo que dejar claro que no es por la ausencia de Cary Agos – cariño, te echo mucho de menos, que lo sepas –, sino porque me falta “algo”. Seguimos con la poca profundización en los personajes, a veces con la poca relevancia de los acontecimientos – por casi me quedo dormida el otro día viendo un episodio por segunda vez de lo poco que me interesaba –, el abrir melones para luego no cerrarlos y dejarlos en la recámara sin mucho sentido – espero que traten esas tramas abiertas en la siguiente temporada –, con la sombra de The Good Wife sobre ella, lo cual es un arma de doble filo porque la comparación siempre va a estar ahí y te puede arrastrar si quieres crear una personalidad e identidad propias. Ha tenido cosas buenas como la presentación de los nuevos personajes y conocer un poco más a otros, como Lucca, pero la conocemos sólo por sus hechos porque no tenemos ni zorra idea de su mentalidad o su lado más personal – sí, tiene miedo al compromiso y una gran inseguridad, pero no sabemos las razones que hay detrás de ello –, y la vuelta de algunos personajes queridos y odiados desde la serie original. Como ya digo, me tomo estos diez episodios como una introducción y una declaración de intenciones que, ha estado bien, pero tiene problemas de ejecución que deberían intentar solventarse para la segunda temporada.

Por mi parte nada más excepto animaros a que dejéis vuestros pensamientos, sentimientos o cualquier cosa que se os haya pasado por la cabeza al ver el episodio. Ha sido un verdadero placer traeros cada semana estas críticas y espero que hayáis disfrutado leyéndolas tanto como yo escribiéndolas.

¡Nos leemos la próxima temporada!


P.D: Al final el número de palabras en los títulos de crédito ha ido de forma ascendente, hasta encontrar su pico en el quinto y sexto, para luego descender. Así que nada de títulos kilométricos, lo cual agradezco de veras.

Irene Galindo (@MissSkarsgard) 

¿Esta era la mejor forma de hacer madurar a Hannah Horvath?

$
0
0
Final de 'Girls', de HBO

Girls, de HBO, ha sido una serie maravillosa y rompedora en muchos sentidos. Siempre en el ojo del huracán por cuestiones sobre raza, desnudos y escenas (muy) incómodas de sexo, la obra de Lena Dunham ha tenido la valentía de hablarnos, con una honestidad tan auténtica que dolía, de temas importantes que muy pocas series han sido capaces de explorar. La desmotivación vital de la llamada "generación millenial", sus inseguridades y, sobre todo, las amistades de mierda -uno de mis temas favoritos y que mejor ha escrito Girls-, han sido cuestiones recurrentes en la serie.

Final de 'Girls', de HBO
"Estoy aquí. Yo gano. Soy tu mejor amiga. Soy la mejor en ser tu amiga. Soy la que más te quiere." 

Estos días se están escribiendo ríos de tinta sobre la temporada final de Girls. Y creo que no sería exagerado decir que ha sido, sino la mejor, una de las mejores: acostumbrados como estamos a ver series agonizando en su recta final, estirando el chicle tanto que terminan por dejarlo sin sabor -caso deBones, por ejemplo-, en Girls nos encontramos con que Lena Dunham tenía perfectamente claro a dónde quería llegar con sus historias, y qué tiempo requerían. El 6x03 "American Bitch", que ya analizamos en el blog, ha sido uno de esos "episodios embotellados" tan famosos de la serie que ha brillado con luz propia, crítico y afilado como pocos, pero es que en general todos los capítulos han sido estupendos e importantes por uno u otro motivo.

Y, sin embargo, no todo ha sido perfecto en la sexta temporada de Girls. Podríamos criticar el poco tiempo de pantalla que han tenido personajes como Shoshanna (he echado mucho en falta a Zosia Mamet), y el despegue que han tenido otros entrañables, aunque quizá no del todo necesarios e interesantes, como Elijah -el auténtico "mejor" amigo de Hannah, con el permiso de Marnie-, pero las historias de Jessa, Marnie y Shoshanna han sido tan buenas, tan potentes, que realmente no he sentido que esa "falta de tiempo" las perjudicase. Lo que me ha acabado "chirriando" ha sido una de las grandes decisiones de Dunham con respecto a Hannah y su futuro.

Hay tres formas clásicas en ficción de hacer madurar a los personajes: a través de la muerte de otros, de matrimonios y de maternidad/paternidad. Y en Girls hemos tenido pleno. Ray puso en perspectiva su vida a raíz de la muerte de su mentor, Shoshanna se casó con alguien "bueno" y "amable" (todo lo contrario a sus amigas de mierda), y Hannah maduró, al fin, con el nacimiento de su hijo -un bebé, por cierto, como señala este artículo en inglés, extrañamente negro-. No hay duda de que Girls ha tratado estos temas con muchísima personalidad, y que incluso Marnie se reía del cliché del hombre que cuestiona toda su vida cuando alguien muere, pero lo de Hannah ha sido... demasiado.

Final de 'Girls', de HBO

¿De verdad no había otra forma mejor de "centrar" a Hannah que haciéndola pasar por la maternidad? ¿No es esta trama en sí misma otro cliché mil veces visto? Insisto en que Girls ha tratado, en mi opinión, estas historias de forma espléndida pero, tras seis años de idas y venidas de Hannah, hubiera esperado que al final madurase de forma un poco más original, más brillante. Siento que, tras todo este viaje, convertirla en madre y "centrarla" de esta manera resulta una decisión un tanto fácil, no tan inteligente ni atrevida como hubiera esperado. Todo lo que ha pasado ha sido coherente -la temporada, como digo, ha sido fascinante-, pero me dejaba con la sensación de que faltaba algo más, algo mejor, algo mucho más ingenioso.

Decía Lena Dunham en esta interesantísima entrevista en inglés de 'THR' que le gustaría hacer una película en unos años, tal y como HBO permitió con Sex and the City -recordad, no infravaloréis esa serie-, y contar qué había sido de las chicas durante todo ese tiempo. A mí me parece una idea maravillosa: el saber que en un futuro es muy probable que volvamos a saber de ellas es algo que me alegra. No dudo de que a Lena Dunham le sobre creatividad para seguir contando buenas historias. Y es precisamente por su gran potencial, por la inteligencia que ha demostrado siempre en Girls, por los que hubiera esperado que este final (¿o hasta pronto?) de Hannah hubiese estado a la altura de las expectativas.

Final de 'Girls', de HBO


Isidro López (@Drolope)

Broadchurch dice adiós en su mejor momento

$
0
0
Tercera temporada de 'Broadchurch'

Estos días están siendo de gran pesambre para los seriéfilos. Primero Big Little Lies, luego Girls, y ahora nos toca despedir a otra serie de esas que dejan huella: Broadchurch. Nadie lo hubiera visto venir al comienzo, cuando Ellie y Alec buscaban al asesino de Danny Latimer y todo apuntaba a que la historia quedaría en una única temporada, pero lo cierto es que esta serie británica ha sabido ser muy inteligente al reinventarse, moviéndose siempre hacia delante; no deja de tener cierta ironía que el caso de su tercera temporada haya sido el más complejo y fascinante de toda la serie, despidiéndola como se merece.

¡Spoilers importantes a partir de aquí!

Alec, Tercera temporada de 'Broadchurch'Alec, Tercera temporada de 'Broadchurch'
Alec, Tercera temporada de 'Broadchurch'Alec, Tercera temporada de 'Broadchurch'
Solo por esta escena Broadchurch ya merece todos los premios.

Ya apuntaba al comienzo de la temporada lo mucho que prometía, y me alegra que el gran nivel se haya mantenido los ocho episodios –los británicos son así con sus series, enseguida cierran el chiringuito y a otra cosa–. La segunda temporada también me gustó (James D'Arcy es dueño de mi corazón), pero el caso de las primas asesinadas está a años luz del interés que me ha despertado el de Trish Winterman (gran trabajo de Julie Hesmondhalgh). Así, la tercera temporada de Broadchurch se ha convertido en una importante y afiladísima crítica a la cultura de la violación, donde se han denunciado conceptos como el "slut-shaming" y la culpabilización de la víctima por parte de la sociedad y el propio sistema, al tiempo que se lidiaba con el dolor de Trish con esa sensibilidad, inteligencia y respeto que siempre ha tenido Broadchurch.

Mucho se ha criticado el papel de los Latimer esta temporada; he llegado incluso a leer a algunos fans diciendo que "sobraban". Y bien es cierto que Mark Latimer no es el mejor personaje de la serie (soy incapaz de creerme como actor a Andrew Buchan), pero yo sí creo que los Latimer han sido necesarios. Una de las cosas que más me gusta de Broadchurch es que explora el "más allá": la serie es consciente de que estas historias no terminan con la captura del asesino, y me ha resultado muy interesante ver cómo los Latimer –en especial, Beth–, han tenido que evolucionar y convertirse en algo nuevo para sobrevivir. Enlazar a Beth con Trish nos ha dejado escenas muy potentes y tiernas; ayudando a los demás es como Beth logró sobreponerse a su propio dolor. Y esa escena tan íntima del final entre Beth y Mark, admitiendo que se quieren pero necesitan seguir caminos separados, fue el cierre perfecto para una historia que ha explorado como pocas los efectos que produce, a largo plazo, perder a un hijo.

Tercera temporada de 'Broadchurch'

Las tramas secundarias de la periodista Maggie y el reverendo Paul han sido simpáticas, funcionando bien como "complemento" y dando más perspectiva, aunque no les acabé de ver demasiado interés en ningún momento –lo siento, Arthur Darvill, pero tu personaje siempre me ha dado igual–. Creo que casi todos estaremos de acuerdo en que la historia estrella, incluso más que la de los Latimer, ha sido la de Trish. La investigación del caso nos mantuvo en vilo hasta el último momento, y finalmente el violador resultó ser el hijo de uno de los sospechosos; apenas un chiquillo de dieciséis años que fue incitado por Leo, la "mierdecilla arrogante" que Ellie despreció desde el primer minuto en que le conoció. Inquietante y perturbadora, Broadchurch advierte así sobre los peligros de la masculinidad tóxica y la forma en que el machismo se ha asentado en los hombres más jóvenes, algo que también queda reflejado en la situación tan difícil que vive la propia hija de Alec.

Ha sido una temporada brillante y muy emocionante. David Tennant y Olivia Colman han estado mejores que nunca, demostrando que Alec Hardy y Ellie Miller son una de las parejas de detectives con más química de la televisión. Esa escena final entre ellos, brusca y un tanto desconcertante, define muy bien su relación: áspera, íntima, llena de confianza, e incluso un poco grotesca a ratos. No me importaría volver a verles de nuevo –sus rostros tan expresivos son el alma de Broadchurch–, pero las tramas se han cerrado tan bien que me siento satisfecho tal y como quedan las cosas. La serie ha logrado ir in crescendo en su temporada final, y es para aplaudir que haya terminado su viaje por lo alto. Gracias por tanto, chicos. 

Alec y Ellie, Tercera temporada de 'Broadchurch'


Isidro López (@Drolope)

The Good Fight brilla, pero no fascina

$
0
0
Primera temporada de 'The Good Fight'

Tras algunos días de retraso, por fin me he puesto al día con The Good Fight. La serie spin-off del matrimonio King tuvo desde el principio la larga sombra de The Good Wife proyectándose sobre ella, pero ha sabido ir más allá y forjarse una personalidad propia gracias a su trío femenino conformado por tres grandes actrices: Christine Baranski, elegante y poderosa; Cush Jumbo, más sutil pero igualmente magnética, y Rose Leslie, la nueva incorporación que ha traído un encanto y una frescura que le han sentado muy bien a la serie. Y ha sido una serie, sin duda, estupenda: la escritura de los King, inteligente y afilada, ha convertido a The Good Fight en una de las series que mejor ha tratado temas de ardiente actualidad. Pero... ¿ha sido The Good Fight tan buena? ¿Ha exprimido realmente bien su enorme potencial?

Primera temporada de 'The Good Fight'Primera temporada de 'The Good Fight'
El comienzo, eso sí, fue inmejorable.

He estado reflexionando mucho sobre por qué no acaba de entusiasmarme The Good Fight. No entendía cómo era posible que no cayera rendido a los pies de una serie que tenía todas las papeletas para encantarme: grandes actrices dándolo todo en casos brillantes, actuales y llenos de matices, una atmósfera elegante y sensual, diálogos ingeniosos y lo más importante– un personaje de la talla de Diane Lockhart, que ya me fascinaba desde The Good Wife. Esta, de hecho, era la oportunidad de que Diane pudiera batir sus alas y alejarse del monopolio chochocentrista de Alicia en que Julianna Margulies había convertido The Good Wife. Ha sido una oportunidad de oro para Diane que, no obstante, siento que no ha sido tan bien aprovechada como podría.

Mi amiga Irene Galindo, a la que hemos podido leer en sus críticas semanales de cada episodio la más reciente, esta del season finale, me ha ayudado mucho a entender mis propios sentimientos hacia esta serie. The Good Fight con solo diez episodios ha logrado grandes hazañas, dejado momentos geniales por el camino, pero ha fallado en la profundización en sus personajes. Porque puede que Julianna fuese una tirana en The Good Wife ya hemos hablado mucho sobre esta cuestión, probando cómo aplastó al personaje de Kalinda, pero es indudable que Alicia Florrick y su viaje personal fueron absolutamente apasionantes durante las siete temporadas, por mucho que las últimas flojearan un poco.¿Y qué hemos visto de eso en The Good Fight?

Primera temporada de 'The Good Fight'
Primera temporada de 'The Good Fight'

"Su mayor drama es que no podrá comprarse una mansión millonaria en Francia. Uf, qué pena", me decía hace un tiempo de forma sarcástica el sensual @visionado en Twitter. Y puede que reducir así su trama sea algo injusto, pero es que sus movidas comenzaban exactamente así. Su jubilación soñada en los campos de Frachutenlandia ha tenido que atrasarse. Eso es una penita, sí, pero hubiera esperado una premisa más atractiva para Diane que la de "sufrir" por tener que trabajar un poco más y mudarse a un piso más pequeño. A The Good Wife también le costó su tiempo despegar, desde luego, pero el viaje de Alicia me resultó fascinante, original y mucho más interesante desde el principio. 

Que esta vez las protagonistas sean tres en lugar de una es una decisión creativa que tiene sus pros y contras: abarcas más, pero peor. Lucca es un personaje atractivo e intrigante, y Maia, como decía, ha aportado muchísima frescura a la serie, además de la "trama política" con el caso de su familia. Pero voy a hablaros en plata, de forma directa: ninguna de ellas me ha dado la vida. Ningún personaje me ha atrapado nunca del todo. Los King han querido acaparar tantísimo, presentar tantos nuevos personajes, que no han acabado de sacarle mucho jugo a ninguno. La propia Diane, aunque también con sus momentos memorables –muy hermosa y potente esa escena en que reflexiona sobre la maternidad junto a Barbara–, ha sido algo "secundaria" en su propia serie. Y las comparaciones son odiosas, lo sé, pero su trayectoria ha estado a años luz de la calidad que tuvo la de Alicia Florrick.

La July hot evil bitch

He lanzado unas cuantas "pullitas" que considero que era pertinente plantear, pero quiero terminar este artículo insistiendo en lo mucho que me ha gustado The Good Fight. Con solo diez episodios ha logrado consolidarse como un producto inteligente, con chispa, lleno de crítica social –lo que más adoro en una serie– y con mucha más libertad creativa de la que tuvo The Good Wifeque además promete ir in crescendo conforme más tiempo tenga para desarrollar mejor a sus personajes. Todo esto lo digo porque siento que, en ocasiones, le ha faltado más "chicha", más pasión, una trama general más atractiva como la que siempre nos dio The Good Wife. Pero no pasa nada. Cero dramas. Confío en vosotros, matrimonio King. Confío en que la segunda temporada, con todos los personajes ya presentados y posicionados, será donde comencéis a encender el fuego que tanto prometisteis en los carteles promocionales.

PD: Me ha dejado el culo torcidísimo la forma en que han pasado por encima de Alicia Florrick, casi "de puntillas", durante casi toda la temporada –por no hablar de los dardos envenenados–. No negaré que les guardo un poco de rencor por eso, aunque casi les perdoné por esa escena tan íntima, tan bella, entre Lucca y Colin, cuando ella le explica lo importante que fue su amistad.

Culo de Colin, Primera temporada de 'The Good Fight'
Aprobé esta escena por muchas razones.

PD2: Tampoco esperaba alguien a la altura de Kalinda, pero el nuevo investigador... ¿podría de alguna forma haber sido más insípido? No lo creo. Es que ni queriendo, vaya.


Isidro López (@Drolope)

Feud ha sido absolutamente maravillosa

$
0
0
Jessica Lange en el finale de 'Feud'

Este año 2017 nos está dejando grandes series por el camino. Big Little Lies, The Good Fight, 13 Reasons Why, las temporadas finales de BroadchurchyGirls... no podemos decir que sean pocas. Y, sin embargo, a pesar de este gran nivel, tengo que rendirme ante una serie cuya genialidad ya nos adelantó en el blog Irene Galindo: Feud. No sé si diría que ha sido mi serie favorita en lo que va de año (como digo, hay mucha competencia), pero sí ha sido la que más me ha emocionado. La historia de la rivalidad entre Bette Davis y Joan Crawford podría haber sido llevada de forma mucho más mamarracha y morbosa, pero Ryan Murphy la ha plasmado con una sensibilidad, con una elegancia, que han dado como resultado un relato bellísimo y desgarrador, de esos que se te clavan dentro y te hacen reflexionar. Una maravilla, de verdad os lo digo.

Susan Sarandon es Bette Davis en 'Feud'
No te merecemos, Susan Sarandon.

Tengo grandes sentimientos encontrados hacia Ryan Murphy. Es un hombre que es capaz, literalmente, de lo mejor y de lo peor. Todos recordamos ese esperpento entrañable (pero esperpento, al fin y al cabo) que fue Glee, además de una mejorable Scream Queens, aunque también debemos tener en mente "Roanoke", la última y genialísima temporada emitida de American Horror Story. En esta primera historia de Feud, su nueva antología, Murphy ha sabido seguir puliendo lo "mejor" de sí mismo: una ambientación espectacular, diálogos con chispa, un sutil pero hilarante (y muy rancio en ocasiones) sentido del humor... sus grandes bazas. Pero, al margen de todo eso, en lo que más ha sobresalido Murphy esta vez ha sido en su ambición por contar una historia que sí, que ha tenido salseo y las dosis perfectas de mamarrachismo, pero que ha sido importantísima.

No sé cómo he podido vivir todos estos años de mi vida sin haberme enterado hasta ahora del dramón que existió entre Joan Crawford y Bette Davis. Una de las cosas que más impresiona de Feud es que, salvando ciertas licencias históricas, todo lo que cuenta es absolutamente verídico. Pero lo mejor es el enfoque dado a estos hechos. La serie, como decía, muy fácilmente podría haber caído en el morbo y en la excentricidad (excesiva) tan propios de Murphy, pero ha sido narrada con un respeto, con un tacto e incluso con una "seriedad" que nada tienen que envidiar a Mad Men Kiernan Shipka, por cierto, ha estado estupenda, qué bonito es verla crecer como actriz. Porque Feud ha sido una crítica brutal al modo en que Hollywood desprecia y manipula a las mujeres. Y esa durísima escena del episodio final en que Joan delira, comprendiendo que todo habría sido mucho mejor de haber sido amiga de Bette, es probablemente una de las más bellas del año. La llorera fue épica.

Susan Sarandon es Bette Davis en 'Feud'Susan Sarandon es Bette Davis en 'Feud'
Sarandon resumiendo perfectamente la clave de la serie (conclusión, por cierto, a la que también llega 'Big Little Lies').

Si algo tuviera que criticar a Feud, probablemente sería que he echado en falta más protagonismo de Bette Davis. Susan Sarandon ha bordado el papel –todos los premios del universo para ella, por favor–, mientras que Jessica Lange ha sido buena también, pero no espectacular. Nadie duda que sea una gran actriz, pero mi problema con ella es que siento que interpreta el mismo personaje en todos sus papeles, sin matices. Nunca veía del todo a Joan: siempre veía a Jessica Lange. A Susan Sarandon, en cambio, sí me la creía totalmente, y creo que fue quien mejor captó la esencia de su personaje. Pero todo esto es irrelevante. Los ocho episodios de Feud han sido casi impecables, por mucho que sienta que quizá otra opción para Crawford habría sido mejor.

Ha sido una historia hermosísima. He llorado, reído y gozado cual enano entusiasta viendo cómo Feud nos abría el alma de dos mujeres rotas y llenas de talento que se resistían a ser dejadas de lado. Solo por esta temporada, Murphy, ha valido la pena tragarme todos tus despropósitos previos. Deseando ver qué haces con nuestra Pene en el siguiente relato. 


Isidro López (@Drolope)

Adiós, Bates Motel

$
0
0

El otro día dije adiós a esta serie que llevaba siguiendo desde sus inicios y no puedo estar más orgullosa de cómo se ha ido desarrollando a lo largo de los años. Porque sí, Bates Motel nos ha dado cosas maravillosas y su final es una de ellas. 

Spoilers!)

¿Sabéis estas series que continúan años y años mientras los seguidores rezan todos los días para que se acaben? Pues Bates Motel no ha sido una de ellas. Ha tenido exactamente las temporadas que debía tener y ha acabado exactamente como debía acabar. 

Soy la primera que tenía sus dudas respecto a la quinta temporada ("cómo sobreviviremos sin el personaje de Norma durante diez capítulos más"). Daba por echo que Norma iba a ser asesinada por su hijo en algún momento, pero creía que ése sería el final de la serie y, así, daría paso a la película Psicosis. Estaba equivocada. Y nunca me había alegrado tanto de estarlo. Con esta quinta temporada, no solo se han atado todos los clavos que quedaron sueltos al final de la cuarta, sino que hemos tenido la oportunidad de ver a Vera Farmiga en un papel diferente al que estábamos acostumbrados y no por ello menos fascinante.

Algo que me ha gustado mucho de la serie es que no se muestre a Norma como la culpable de que su hijo esté loco, ya sabéis lo fácil que es culpar a la madre de todos los problemas de los hijos. En Bates Motel Norma es una víctima más de Norman, incluso la víctima que más nos ha dolido que asesinara.

No os imagináis la de veces que he deseado que esto no fuera una precuela de Psicosis y que no acabara en desastre. Que Norma siguiera viva y se mudara lejos de ese pueblo y lejos de su hijo para pasar una vida larga y feliz junto a Romero. Definitivamente se merecían algo mejor. Pero todos sabíamos que eso no era posible. Así que vamos a conformarnos con que Dylan y Emma tengan una vida larga y feliz (podría haber sido MUCHO peor) y recordemos a Normero con cariño y resignación.

Conformémonos con esas escenas de Vera Farmiga con la ropa de Norman defendiéndolo frente a la policía, ligando con desconocidos en bares sin que él entienda nada y peleando contra su hijo (que en realidad es Norman peleando contra sí mismo) y destrozando toda la cocina. Conformémonos con Madelaine Loomis y Marion Crane (interpretado por Rihanna), que me han parecido personajes fantásticos. Y conformémonos con esos escenarios antiguos/tétricos/preciosos que siempre han aparecido en Bates Motel pero que merecen ser nombrados. Y al final no es conformarse, porque nos han dado un final maravilloso. Una temporada maravillosa. Una serie maravillosa.
 
Se han alejado de Psicosis, al igual que Hannibal se alejó de El Silencio de los corderos en su día, pero ambos me parecen más que justificados y más que extraordinarios. Y admitámoslo, ver a Norman muerto era lo que todos queríamos desde hace un par de temporadas. Así que gracias, Bates Motel, gracias. 



Victoria (@_TheEastWind)


Crítica del 6x18 "Where Bluebirds Fly" de Once Upon a Time: La verdadera fortaleza

$
0
0
6x18 "Where Bluebirds Fly" de 'Once Upon a Time'

Una nueva semana Once Upon a Hook  nos trae sus mágicas tonterías de siempre. Que los guionistas ya no saben qué inventarse, y que la serie vive de los fans de esa insoportable pareja que es el Captain Swan –lo siento, pero me consumen la vida–, es algo indudable: casi todas las tramas están monopolizadas por sus aventuras románticas, donde el tedio y la falta de química son los auténticos protagonistas. Entre tanto, complementando esa historia existe la de un personaje aleatorio que nos trae su drama episódico del pasado sacado de la manga. Afortunadamente "Where Bluebirds Fly" otorga la voz cantante a Zelena, dando como resultado un capítulo que no avanza ni aporta absolutamente nada nuevo ni de interés, pero que sí ha sido simpático y ha servido para apreciar lo guapa que es Rebecca Mader y el estupendo pelo que tiene.

¡Spoilers!

6x18 "Where Bluebirds Fly" de 'Once Upon a Time'
Brutal falta de respeto a las tortitas.

La villana más poderosa del mundo está hospedada en el pueblo y quiere asesinar a Emma en la batalla más épica de todos los tiempos, pero eso no es impedimento para seguir disfrutando de tu vida y centrarte en preparar tus fiestas pijas. Cero dramas. Por eso, tras haber perdonado que Garfio matase a su abuelo ("¿y a mí qué me importa ese pinche viejo? Lo importante es que me lo dijiste. Jaja saludos"), Emma está más contenta que unas pascuas de poder casarse con su pirata. Van al restaurante de la Abuelita para preparar allí la celebración, pero Charming dice que es cutre. Luego van al edificio municipal donde celebran plenos, pero a Charming tampoco le parece suficiente. Y al final concluyen que mejor celebrar la boda después de librarse del Hada Negra, no vaya a ser que se autoinvite y se pase a arruinarles la fiesta.

En paralelo a esta fascinante historia de mierda, tenemos a Zelena tratando de superar sus complejines. La falta de amor materno la llevó a obsesionarse con su poder para demostrar su valía, y en esas seguimos. Cuando la Hada Negra va a chulearla, Zelena responde contraatacando y desoyendo las advertencias de Regina –cuyos poderes son mayores o menores según las necesidades de la trama–. Tras una obvia trampa del Hada maligna a Zelena, que se vio venir hasta desde el Perú, ella se ve obligada a hacer algo que nunca hubiera esperado hacer: sacrificar sus propios poderes por el bien común. Esto nos lleva a una bonita reflexión sobre cuál es la auténtica fuerza. Porque Zelena comprende que su familia es Regina. Y puede que amar a los demás te haga exponerte y ser vulnerable, pero... ¿acaso no es lo más valiente aceptar ese amor? ¿De qué sirve ser la bruja más poderosa si te sientas a cenar sola cada noche?

6x18 "Where Bluebirds Fly" de 'Once Upon a Time'
6x18 "Where Bluebirds Fly" de 'Once Upon a Time'
6x18 "Where Bluebirds Fly" de 'Once Upon a Time'
Bellísima escena.

¿Qué os ha parecido a vosotros el episodio? ¿Os gusta Captain Swan? ¿Tenéis interés por conocer el turbio secreto del Hada Oscura? ¿También vosotros os preguntáis por qué no se dedica a matar gente y sembrar el terror, si tan mala es? La semana que viene más, pero no peor, porque es imposible.


Isidro López (@Drolope)

No habrá segunda temporada de Sweet/Vicious, la brillante serie que lo tuvo todo en contra

$
0
0
'Sweet/Vicious', Jules y Ophelia

Sabíamos que era una posibilidad. Sabíamos que el éxito de crítica no lo había sido tanto de audiencia. Sabíamos todo eso, e incluso así ha dolido que en las últimas horas la MTV anunciase que no concederá una segunda temporada a Sweet Vicious, la serie creada por Jennifer Kaytin Robinson que tan sagazmente denunciaba el machismo actual a través de la figura de dos chicas, Jules y Ophelia, unidas para perseguir a los agresores sexuales de un campus universitario.

'Sweet/Vicious' gif, Jules y Ophelia

No voy a negar que esté molesto –creo que todos los seriéfilos hemos tenido que sufrir alguna vez que cancelen una serie que nos gusta–, pero con el caso de Sweet Vicious me siento especialmente irritado. Más de una persona siempre la miró por encima del hombro, negándose incluso a darle una oportunidad, por ser de la cadena que era. Y esto es de un esnobismo tan lamentable como cutre. ¿Por qué hay quien cree que las únicas series buenas son las de HBO? ¿Por qué hay quien mira por encima del hombro a las series de temática adolescente y/o juvenil?

Las series adolescentes también pueden ser algo inteligente y maravilloso. Y no, no estoy hablando solo de esas dos o tres cuyo valor es tan generalmente aceptado, como bien podrían serlo Buffy the Vampire Slayer, My So Called Life o Freaks and Geeks. Otras series más actuales de temática juvenil brillantísimas, como My Mad Fat Diary, son miradas con algo de desprecio, descartadas por muchos por ser "sobre adolescentes". El fenómeno que ha sido 13 Reasons Why, por suerte, parece estar echando por tierra esa idea de que un "adulto" nada tiene que hacer con series adolescentes –y mejor no hablemos de esa creencia idiota de que verlas es un "guilty pleasure"–, pero aún queda mucho por hacer.

El caso de Sweet Vicious me molesta en especial, como decía, porque creo que han jugado contra ella todos estos factores: por una parte, su temática juvenil. Por otra, la cadena en que fue emitida. ¿Habría sido tan exitosa 13 Reasons Why de haberse emitido en MTV, aunque hubiera sido la misma serie o una muy parecida? Pienso que, de haberse emitido en otra cadena con más "prestigio", Sweet Vicious habría recibido la atención merecida y le habría ido mejor. Pero también creo que, de no haber habido tantos prejuiciosos que le echaron la cruz encima solo por ser de MTV, la serie habría podido triunfar también en esa misma cadena. 

'Sweet/Vicious' gif, Jules y Ophelia

A pesar de todo, nos queda el consuelo de que pudimos disfrutar una buenísima temporada que tuvo un final estupendo y cerró muy bien todas las tramas planteadas. Pero ya sabéis, chicos, chicas... cuando alguien os diga que las series "adolescentes" no valen nada, desconfiad de esa persona. No queréis alguien así en vuestra vida.


Isidro López (@Drolope)

Crítica del 6x19 "The Black Fairy" de Once Upon a Time: el nacimiento del mal

$
0
0

La semana pasada en Once Upon a Time nos trajeron un capítulo centrado en Zelena que tuvo sus pros y sus contras que Isidro analizó, y esta semana tenemos un capítulo centrado en ese gran enigma que había sido hasta ahora la Black Fairy: sus inicios, sus secretos, sus planes... Os cuento qué me ha parecido; ya os adelanto que nada del otro mundo. ¡Spoilers!

Ciertamente, poco sabíamos de esa señora además de que era la madre de Rumpelstiltskin y que estaba un poco loca, y este capítulo ha dado respuestas. Para mí, sinceramente, la historia ha sido bastante decepcionante, pues viene a ser una copia de la de Rumple: muchas ansias de poder y poco preocuparse por la gente a la que se supone que quieres, lo cual no puede llevar a otra cosa que a volverte oscuro y malvado. Rumple y su familia tienen un problema con su atracción por la oscuridad y se llevan por delante a quien sea con tal de tener el poder entre sus manos. El viajecito al sueño de Rumple y el haber descubierto que en realidad él era el Salvador, me parece totalmente fuera de lugar. No me pueden vender la moto de que Rumple estaba destinado a ser un ser bondadoso, no a estas alturas, porque no me lo creo después de todo lo que ha hecho. Y menos, si ni siquiera hace amago de intentar ser mejor, de dejar de mentir a todo el mundo.

No pasa nada, Rumple, ahora que eres el Salvador te lo perdonamos todo :)

De cualquier manera, quise pensar, por un momento, que de verdad Rumple habría recapacitado y que iba a mandar a su madre a freír espárragos, pero el no haber mostrado cómo desparecía la Black Fairy y que haya ido corriendo a contarles a todos que ya la ha echado, como buen Salvador, me olía completamente a chamusquina. Y era, claramente, porque estaba empezando a arder la llama del mal entre Rumple y su madre. Hagan lo que hagan estos dos villanos, lo que ha sido peor ha sido la reacción de todos los demás, que me ha parecido absurda. ¿De verdad son tan tontos como para fiarse de que este Rumpelstiltskin les esté contando la verdad? Ha sido completamente genial cuando, nada más enterarse de que la Black Fairy se había (supuestamente) ido de Storybrooke, Snow ha dicho: "¡Podemos celebrar la boda mañana!". ¡Claro que sí! ¡Vámonos de celebración, que el sincero de Rumple ha dicho que está todo en orden! Y también ha sido maravilloso cuando Belle no ha dejado de decir halagos hacia Rumple y lo bien que protege a su familia. ¿Qué familia? Si a este hombre no le importa nadie más que él, y lo saben todos perfectamente... Me apena que escriban de este modo al personaje de Belle, como una mujer que parece no querer ver lo que de verdad está pasando, que parece negar que su marido es una persona horrible. Es un mensaje completamente erróneo. Yo, de verdad, que cada día creo que los personajes (y guionistas) de esta serie se están quedando más atontados.

Error 404: poder de detectar mentiras de Emma, not found.

De este capítulo lleno de sinsentidos, lo único que salvo es a Zelena montando una cuna de Ikea, a Regina enseñando a Zelena a conducir y a Zelena atropellando a la Black Fairy. Estas dos son el alma de la serie y verlas simpatizar por fin era una cosa que quería ver desde hace tiempo, lástima que no haya podido ser sin que Zelena tuviera que sacrificar sus poderes. ¡Quiero justicia para Zelena y sus poderes!


La semana que viene por fin tendremos ese capítulo musical que tanto esperamos (yo al menos). Será la boda del Captain Swan, para bien o para mal, según cada uno, pero yo tengo muchísimas ganas de ver qué puede dar de sí el episodio, si va a ser una catástrofe o si va a ser el apogeo de la serie y después nos reiremos nosotros habernos quejado tanto de Once Upon a Time. Lo que seguro que habrá es guerra, teniendo en cuenta que se han aliado Rumple y su madre, las dos grandes figuras del mal de la serie. ¿Vosotros le tenéis ganas al capítulo? 


 Doralicia (@Doralais)

Bryan Fuller regresa a lo grande con American Gods, su oportunidad de hacer las cosas mejor

$
0
0
'American Gods' de Bryan Fuller

Bryan Fuller es un creativo brillante al que siempre he tenido mucho cariño. Tiene una personalidad alegre, explosiva e intensa (no hay más que leer su cuenta de Twitter), es abiertamente pro-LGTB –lo cual suele plasmar en sus series; recordemos lo gay que era Hannibal– y, por si fuera poco, es fan de Gillian Anderson. ¿Qué más se le puede pedir a un hombre en esta vida? Por todas estas razones esperaba con muchas ganas American Gods, la nueva apuesta con la que Fuller espera superar su mala racha de series canceladas y cosechar, por fin, el éxito que merece. Y lo cierto es que, de momento, va por muy buen camino.

'American Gods' de Bryan Fuller

No voy a destripar el piloto de American Gods –creo que lo mejor es, si aún no lo habéis visto, dejaros sorprender y adentraros en esta historia sabiendo lo menos posible–, pero sí diré que ha sido una carta de presentación excelente, quizá uno de los mejores pilotos de todo el 2017. Bryan Fuller concibe las series como un espectáculo visual, y eso es exactamente lo que ha sido American Gods: una serie donde cada escena recoge una belleza, una magia, que convierte el visionado en una experiencia en sí mismo. El sexo, la violencia y el gore (¡cómo le gusta la sangre a este hombre!) serán recurrentes, tal y como ya lo fueron en Hannibal... pero más fuertes, más honestos, más brutales, sin esa "sofisticación" propia de los crímenes de Lecter a la que se tachó de ser, en ocasiones, demasiado pomposa y pretenciosa. 

Ricky Whittle, conocido por el dramón que se montó tras su salida de The 100, es el protagonista total de American Gods. Interpreta, de nuevo, a un personaje serio, comedido, que algunos podrían tachar de "soso", pero que a mí me ha resultado bastante carismático. Creo que Whittle es un actor que desprende mucha fuerza en sus gestos y que llevará estupendamente el peso del protagonismo. Lo que me preocupan, en realidad, son otros asuntos.

'American Gods' de Bryan Fuller

Bryan Fuller, como decía, me parece un gran creativo. Es un hombre que tiene grandes ideas, además de una pasión e imaginación desbordantes que le permiten crear universos llenos de potencial. El problema está precisamente en que ese potencial no siempre es bien aprovechado. El peor defecto de Fuller es que él mismo tiende a perderse en el desarrollo de estas buenas ideas. A veces parte de una premisa tremendamente interesante y original, pero no sabe mantener el interés (caso de Dead Like Me), o se acaba volviendo "difuso" y un tanto errático en el transcurso de la historia, casos de Pushing Daisies e incluso de Hannibal.

American Gods tiene muchas cosas a su favor: la estética cautivadora, un buen elenco y una premisa que es tan excéntrica como atractiva. Queda por ver, no obstante, si Fuller es capaz de elaborar un discurso narrativo claro y coherente que mantenga el interés a lo largo de la temporada. Está por ver también si superará otro de sus talones de Aquiles y sabrá desarrollar bien a sus personajes. El piloto, como decía, a pesar de durar una hora me ha parecido totalmente magnético y fascinante. Y de verdad espero que Fuller sepa seguir en esta línea el resto de la temporada y no quede a medio gas, como tantas otras veces. Confío en ti, de verdad que sí. Esta es la buena.


Isidro López (@Drolope)

Dear White People, la ingeniosa serie que expone nuestro patetismo blanco

$
0
0
'Dear White People', serie de Netflix

Vivimos en tiempos donde el neomachismo y el neorracismo son despreciados por gran parte de la sociedad. Esa idea de que "la igualdad ya se ha conseguido, ¿de qué te quejas?" ha calado hondo en muchas personas... en muchas personas blancas y heterosexuales, quiero decir. A las feministas, por una parte, se las demoniza y malinterpreta no hay más que leer las opiniones cutres y lamentables del elenco de Las chicas del cable, mientras que la discriminación e invisibilización que sufre la población negra queda, directamente, fuera del debate social, a excepción de los Oscar de turno que vuelven a reactivar la discusión momentáneamente. Y a eso viene precisamente Dear White People: a hablar de cosas de las que hace falta hablar.

'Dear White People', serie de Netflix
'Dear White People', serie de Netflix
'Dear White People', serie de Netflix
En Estados Unidos las cicatrices de su pasado aún duelen.

He, literalmente, devorado esta serie. Sus diez episodios, de apenas media hora de duración cada uno, conforman una de las temporadas más "maratoneables" y adictivas que he visto en mucho tiempo. La afiladísima escritura de sus guiones disecciona en un margen relativamente corto de tiempo multitud de temas relevantes y de ardiente actualidad, tantos que la discusión sobre ellos podría durar horas y horas. Porque, como bien resalta la propia Dear White People, la llegada del presidente Obama no fue el revulsivo que tantos estadounidenses esperaban... los chavales negros siguen siendo asesinados a tiros por la policía.

La mejor baza de la serie son sus personajes, la mayoría de ellos complejos y llenos de matices: en particular'Coco' y Sam, dos amigas que representan dos formas completamente diferentes de entender el activismo y que son, al final del día, la mejor y auténtica relación de Dear White People. 'Coco' es ambiciosa, más honesta con su verdadero yo, y pretende vencer el racismo institucional adentrándose en él ¿o eso es lo que se dice a sí misma? ¿No vela únicamente, en el fondo, por sus propios intereses?–, mientras que Sam es pasional, más partidaria de vencer el racismo institucional platándole cara, pero también propensa a caer en un "postureo" un tanto patético, como dejar de escuchar la música que le gusta por no ser representativa de la "cultura negra", o avergonzarse de tener un novio blanco.

Quizá esta sea la parte que más me ha chirriado de Dear White People. Y esto lo digo siendo consciente de mi "blancura", de que soy ignorante y hablo desde mi posición de privilegio, pero no pude entender que la serie hiciera tantísimo drama en torno al hecho de que Sam, una activista negra, amase a un chico blanco. En torno a la mitad de la temporada Joelle, la "amiga" de Sam –aunque una amiga mierder y deshonesta con ella, en mi opinión– exponía la narrativa, lo problématico de la situación que generaba conflicto, y pude entender un poco mejor:

'Dear White People', serie de Netflix
'Dear White People', serie de Netflix

Puedo aceptar a regañadientes que Sam sintiera conflicto por querer a alguien que simboliza al opresor, pero no que mostrara un interés tan repentino por Reggie desde el momento del quinto capítulo en que es apuntado por un arma. Fue desleal a Gabe, al hombre al que sabía que amaba, solo por demostrarse a sí misma que no amaba al hombre negro activista al que debería haber amado. Todo ello en pos de ese "postureo", del anhelo de tener una estampa de perfecta activista con un novio negro que realmente entendiera su sufrimiento... en fin, no puedo decir que me gustase esa trama, o que acabara de verle la profundidad. ¿Por esa estúpida regla de tres Sam, como feminista –lo que asumo que también es–, no debería haber sentido conflicto por amar a cualquier hombre? Pero, insisto: todo esto lo digo como espectador blanco, y es posible que no esté acabando de entender la trama y su mensaje en toda su magnitud. Diré en mi defensa que lo estoy intentando, de verdad que sí.

El episodio que mencionaba, por cierto, fue uno de los más brillantes de la temporada. No es casualidad que estuviese dirigido por Barry Jerkins, a quien debemos la premiada y bellísima Moonlight. Los acontecimientos tomaban un giro especialmente oscuro cuando Reggie era apuntado con un arma tras una pequeña revuelta. Es entonces cuando realmente pude entender a qué se refieren los activistas negros cuando un nuevo chico es tiroteado y dicen "podríamos haber sido nosotros". El racismo institucional de Estados Unidos, tan criticado en The Good Wife y The Good Fight, es una lacra profundamente arraigada que está, literalmente, matando gente. Gente de color. Este bofetón de Dear White People, una serie divertidísima pero también muy seria cuando quiere, nos lo recuerda de una forma tan dolorosa como efectiva.

'Dear White People', serie de Netflix'Dear White People', serie de Netflix
'Dear White People', serie de Netflix'Dear White People', serie de Netflix

Pero Dear White People ha sido, sobre todo, una crítica a nuestro patetismo blanco. A la forma en que, cegados por nuestros privilegios, somos incapaces de ver y valorar lo que supone tener la piel oscura en una sociedad racista que te tratará de forma diferente por ello. Prueba de ello era 'Pastiche', la revista que tildaba de "extremistas odia-blancos" a los activistas negros y denunciaba que estaban atacando su "libertad de expresión". Y esto me recuerda enormemente a aquella vez en queBertín Osborne se quejó de que ya no se podían haber chistes de mariquitas en España sin que te mirasen mal. ¡Uf! ¡Los blancos ya no podemos perpetuar la opresión a colectivos discriminados con nuestro humor tóxico sin que nos llamen la atención! ¡Qué horrible mundo!

Dear White People es una serie que, como digo, se pasa en un suspiro. Ágil, refrescante e ingeniosa pero, sobre todo, oportuna y necesaria. Plantea debates que necesitan ser debatidos, y denuncias que necesitan ser escuchadas, muy en la línea de la maravillosa (e injustamente cancelada) Sweet Vicious. Más series juveniles así, por favor. 


Isidro López (@Drolope)

Viewing all 1377 articles
Browse latest View live